Necesaria, mayor libertad de acción para competir en igualdad de condiciones, señala
Admite CFE que la apertura irrestricta del sector eléctrico afectaría sus operaciones
Mientras se insiste en la necesidad de captar recursos provenientes de inversionistas privados, especialmente extranjeros, para la expansión del sistema eléctrico nacional, el propio gobierno mexicano reconoce que la eventual apertura del sector podría afectar el negocio de manera adversa.
Información oficial de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), enviada a los potenciales inversionistas y a las autoridades bursátiles, admite: "en el caso de que se dé una reforma eléctrica en México que permita la participación privada irrestricta en la generación de energía y el gobierno no otorgue a CFE la libertad de acción requerida para poder competir en igualdad de condiciones, la comisión podría experimentar un impacto en sus operaciones a mediano plazo".
Con las reformas a la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica realizadas en 1992 se permitió al sector privado invertir en la generación de electricidad mediante las figuras de generador de energía eléctrica independiente, autoabastecimiento y cogeneración. Actualmente bajo estas figuras prácticamente 25 por ciento de la generación de energía está en manos de inversionistas privados, con un potencial de crecer hasta 40 por ciento.
Pese a que las políticas de libre mercado ya demostraron no ser la solución, como lo confirmó la desregulación que se llevó a cabo en la década pasada en California y que permitió crear una escasez ficticia por parte de las compañías eléctricas privadas para aumentar las tarifas de energía, en detrimento de los consumidores, en México las autoridades continúan insistiendo en la apertura al capital en este sector estratégico de la economía.
De acuerdo con el prospecto de colocación de Certificados Bursátiles por hasta 8 mil millones de pesos para todo 2005, precisa que de 2004 a 2009 se estima que el sistema eléctrico nacional requiere de 28 mil millones de dólares, es decir, 5 mil 600 millones de dólares anuales, los cuales son necesarios para expandir y modernizar la infraestructura eléctrica.
El plan de CFE para los próximos nueve años incluye la construcción de 50 nuevas plantas, incrementando la capacidad para generar energía en 21 mil 408 megavatios, para lograr una capacidad total de 65 mil 646. Alrededor del 85 por ciento de la nueva capacidad provendrá de centrales generadoras de ciclo combinado. "Se estima que 61 por ciento de las necesidades provendrán de capital privado y el remanente directamente de CFE".
Según los datos más recientes presentados a los inversionistas, la CFE ha firmado 21 contratos con productores privados, denominados productores independientes de energía, por un plazo de 25 años, donde se establece la obligación para CFE de pagar diversas contraprestaciones a cambio de que éstos garanticen el servicio de suministro de energía, con base en una capacidad de generación previamente establecida, mediante plantas de generación de energía financiadas y construidas por su cuenta.
Los montos estimados de estos contratos de arrendamiento representan una transferencia de recursos de la CFE a inversionistas privados extranjeros por 30 mil 41 millones de pesos.
En opinión de José Luis Apodaca Villarreal, consultor experto en temas energéticos, quien laboró por más de 32 años en la CFE y se jubiló como gerente general divisional de la empresa, la participación de los productores independientes de energía ha significado un encarecimiento de la electricidad en México y en una dependencia de importación de gas natural, cada vez más caro y escaso.
El experto ha insistido en reiteradas ocasiones en que la CFE podría financiar sus inversiones con 7 por ciento de tasa de interés. Los productores independientes de energía le cobran una tasa de 12.5 por ciento y los costos unitarios de plantas de los inversionistas extranjeros son 20 por ciento mayores que los que podría obtener CFE en los mercados de capitales internacionales.
Informes de la Secretaría de Energía (Sener) precisan que de una capacidad efectiva de generación en México de 49 mil 672 megavatios, 24 por ciento es ya generada por privados, mediante las figuras de productores independientes de energía, cogeneración y autobastecimiento, mientras que 74 por ciento es realizado por la CFE y el 2 por ciento restante por Luz y Fuerza del Centro.
La estructura de generación eléctrica en México es concentrada en 33.3 por ciento con gas natural, seguida por petróleo con 32.9 por ciento, carbón 14.9, nuclear 5.2, hidroeléctrica 9.2 y otras con 4 por ciento.