Es una película en la que hay actores, no estrellas, expresa Rosita Quintana
"Club eutanasia, thriller geriátrico que de la risa lleva a la reflexión"
Quise decir que los ancianos tienen los mismos deseos y pasiones que cualquier individuo: El Oso Tapia
A los senectos no se les había tomado en cuenta, afirma Eduardo Manzano
Ampliar la imagen Eduardo Manzano, Magda Guzm� Lorenzo de Rodas, Lupita Sandoval y Xavier L� Chabelo FOTO Clasos.com
Más de 500 años de talento histriónico se reúnen en los ocho protagonistas de la película Club eutanasia, dirigida por Agustín El Oso Tapia, comedia de humor negro, thriller geriátrico (según El Oso), cuyo estreno será este viernes con cien copias a escala nacional y con la cual Tapia espera que el público reflexione sobre las condiciones de vida de los viejos.
La tarde-noche del pasado lunes, al Cinemark de la calle Cervantes Saavedra, en Polanco, fueron llegando las estrellas que brillan con luz propia. Los recibió una valla de curiosos y periodistas que los flasharon hasta encandilarlos. Algunas personas de la tercera edad se acercaron a saludarlos, pues los admiran desde hace varias décadas, de cuando se respetaba el trabajo actoral.
No pisaron una alfombra roja, sino unos petates unidos con cintas cuyos bordes se levantaban e hicieron trompicar a varios. La idea es que los viejos ya están cerca de ser petateados, que en México significa pasar a mejor vida. Mucho humor negro, como en la trama de la película.
La historia se desarrolla en un asilo de ancianos llamado El Refugio. Al morir el benefactor, empeora la ya de por sí maltrecha vida de sus habitantes. Alimentos y medicinas son racionados al mínimo y el trato de la directora-tirana se endurece. Ante eso, cuatro ancianos urden un plan para solucionar su patética situación: se convierten en los fundadores del Club Eutanasia, una agrupación secreta cuya senil y ridícula meta es la supervivencia, asesinando a los otros compañeros para poder disfrutar de más comida y mejor atención.
El reparto está conformado por actores de larga tradición en el cine, el teatro y la televisión, entre los que destacan Rosita Quintana, Lorenzo de Rodas, Magda Guzmán y Héctor Gómez. Además, Eduardo Manzano, Sergio Corona y Xavier López, acompañados por Ofelia Medina, quien encarna a la despiadada directora del asilo.
Arribó la bella Rosita Quintana: "Esta es una película fantástica. El tema es muy profundo y alegre; tiene los dos matices, pero es para pensar un poco. El tema de la eutanasia es escabroso, pues yo desearía que me la hicieran a mí, si es que la necesitara. Tendría que hallar a alguien con mucho amor para que me la hiciera. Es un acto de amor tremendo. Estoy feliz de regresar al cine mexicano, en una película donde hay actores, no estrellas".
Héctor Gómez, actor de carácter: "Con esta cinta ya hemos tenido experiencias espléndidas, como en la Muestra Internacional de Cine de Guadalajara, donde el público la eligió como la película que más le gustó; en Vallarta sucedió lo mismo. Hay una escena de amor entre Rosita y yo, y alguien mencionó que el amor entre viejos es algo maravilloso. Aparte, se rieron. La pregunta sobre si estoy de acuerdo o no con la eutanasia yo la revierto: ¿podemos confiar en quien la practique? ¿Si lo hiciera por intereses personales? ¿Cuánta gente ayudó a Bush?"
Magda Guzmán, de regreso luego de 15 años de ausencia, expresó: "No hacía cine porque estaba en televisión o teatro. No creo que haya sido una injusticia mi ausencia en el cine, pues lo importante es que cada año me llamen para hacer telenovelas. Esta vez me gustó el argumento y trabajar con estos compañeros maravillosos; todos son unos actorazos. Es difícil decir si estoy en favor o en contra de la eutanasia, pues están involucrados muchos sentimientos y siempre queda la esperanza de la vida".
Una cinta diferente
Eduardo Manzano, el ex Polivoz, quien provocó risas con su sola presencia: "Estoy emocionadísimo porque logramos todos los actores que integramos el elenco una película muy diferente a todo lo que se había hecho en México. A los senectos... ¡ay, me mordí la lengua!, no se les había tomado en cuenta. Primero que nada, es una comedia negra, de reflexión, protesta, que nos hace pensar en el futuro del senecto, que está tan abandonado. Por fortuna, esta película sale en un momento en que están en cartelera Mar adentro y One million dollar baby. Esta el caso de esta niña Terry, a quien acaban de asesinar... porque no le hicieron eutanasia".
Ofelia Medina, con un vestido rojo que resaltó su talle breve: "En esta película cambia el concepto de la eutanasia porque es una comedia negra. Se reflexiona por medio de la risa".
Sergio Corona, sin el bisoñé con el que actúa en Club eutanasia: "Esta cinta es un acierto. Es buen cine mexicano que recomiendo a los jóvenes".
Lorenzo de Rodas, actor de teatro clásico: "Siempre me he apasionado con los jóvenes con talento, como es el caso de El Oso. Leí el libreto y dije: va. Por supuesto que estoy en favor de la eutanasia, cuando no es irremediable. Es absurdo mantener con vida a alguien durante 14 años para luego matarla quitándole los alimentos, el agua. Eso es... una mente de crueldad de los estadunidenses".
Xavier López, creador de Chabelo, personaje que se quedó en los 13 años, para siempre: "Todos vamos a llegar a ser ancianos. Chabelo admira y sabe que los viejos son experiencia. Estoy preparado para llegar a esa etapa natural que es la vejez".
Agustín El Oso Tapia, director de Club eutanasia: "Hola, quiero presentarme: a mí me conocen por Club eutanasia, Club eutanasia y Club eutanasia. Esta es una comedia negra, un thriller geriátrico, en el que la risa lleva a la reflexión, y viceversa. La historia de los internos del asilo sirve como espejo, como metáfora de lo que es la vida del México actual, donde la supervivencia es lo que mueve a todas las personas.
"Casi nadie habla por las personas mayores. Los ancianos y los adolescentes tienen la mala suerte de que su vida es decidida por los adultos. Aparte de divertir quise mostrar que las personas mayores están tan vivas como cualquiera. Los ancianos, viejitos, personas de la tercera edad o como se les quiera llamar, como abuelitos, están sujetos a los mismos deseos y pasiones que cualquier individuo. El corazón no envejece, el cuero es el que se arruga, como señala el dicho."
Para El Oso, "la industria del cine mexicano está agonizando desde hace muchos años; todos los que hacemos películas aquí las hacemos por nuestras pistolas y porque tenemos mucho valor, corazón y ganas, y somos necios. Afortunadamente existen instancias como Fidecine que, en la medida de sus posibilidades, ayudan a que surjan algunas cintas".
Añadió que con la distribución de los ingresos de las salas, si el productor gana poco dinero, es muy difícil que alguien invierta. "Ahora bien, la calidad del cine mexicano es buena en su manufactura, aunque debemos ser más exigentes en los contenidos y en los guiones. Hablo por mí: hago un cine para que lo vea la gente, no para ganar premios. Si llegan los reconocimientos, bienvenidos. Creo en el cine que lleva gente a las salas, no sólo por lo económico, sino porque creo en el cine como entretenimiento."