ExxonMobil reportó el beneficio cuatrimestral más grande jamás visto en firma de EU
Grave crisis en CA si continúa la escalada de los precios del petróleo, vaticinan
En El Salvador se pidió que cada quien ''se autorregule'' para soportar el encarecimiento
Ampliar la imagen Un estudiante universitario golpea un autob� las inmediaciones de la Universidad Nacional en Managua, Nicaragua, como parte de una protesta por el incremento del costo del pasaje del transporte colectivo por las alzas internacionales del precio del petr� FOTO Afp
San Jose, 14 de abril. Mientras las trasnacionales petroleras obtienen ganancias históricas gracias a los altos precios del petróleo, los países de Centroamérica enfrentarán una grave crisis social si continúa la escalada en las cotizaciones del crudo, que impactan todas las actividades económicas en una región donde el 50 por ciento de sus 38 millones de habitantes vive sumergida en la pobreza, según diversas fuentes.
En caso de que los precios del petróleo alcancen la barrera de los 60 dólares por barril, las economías centroamericanas tendrían que destinar en 2005 alrededor de mil 727 millones de dólares más que en 2004 para importar unos 93.9 millones de barriles de crudo.
La situación resulta complicada al ser economías dependientes de la energía fósil, pues no desarrollaron tecnologías apropiadas para atenuar las consecuencias de los altos precios del crudo, que la semana pasada alcanzaron los 58 dólares el barril.
La factura petrolera total de Centroamérica de 3 mil 907.4 millones de dólares en 2004, se dispararía a más de 5 mil 600 millones en 2005, si el costo del hidrocarburo se ubicara en los 60 dólares, uno de los escenarios probables menos pesimistas.
A modo de comparación, ExxonMobil, la petrolera estadunidense más grande del mundo, reportó ingresos por 8 mil 420 millones de dólares sólo en los últimos cuatro meses del año pasado, el beneficio cuatrimestral más grande jamás visto en empresa estadunidense alguna. En todo el año las ganancias fueron de más de 25 mil millones de dólares.
Por su parte, el grupo británico-holandés Royal Dutch Shell registró un beneficio neto para 2004 de 18 mil 536 millones, 48 por ciento más que los 12 mil 496 millones del año precedente. En los últimos tres meses de 2004 logró ingresos netos de 4 mil 478 millones, 134 por ciento más que en 2003, gracias a la disparada de los petroprecios.
''El tema del petróleo es un verdadero dolor de cabeza para los países que no producimos petróleo; los países petroleros están quebrando nuestras economías'', señaló el pasado 12 de abril el presidente salvadoreño Elías Antonio Saca, evidenciando la magnitud de la crisis.
''Si los precios siguen subiendo podría significar un desastre para nuestras economías'', declaró el presidente de la Comisión Nacional de Energía (CNE) de Nicaragua, Raúl Solórzano.
Durante 2004, Guatemala importó 24.9 millones de barriles de crudo; Honduras, 16 millones; El Salvador, 16 millones; Nicaragua, 10 millones; Costa Rica, 15 millones, y Panamá 16 millones de barriles.
Si el barril llega al hipotético precio de 100 dólares, lo que algunos analistas ven como posibilidad real, la factura petrolera para Centroamérica se elevaría a 9 mil 390 millones de dólares anuales, casi 60 por ciento de las exportaciones de la región que alcanzan los 15 mil 987 millones de dólares.
Las consecuencias del alza en los crudos provocaron ya las primeras protestas en Honduras, Nicaragua y Panamá, y el anuncio de una declaración de emergencia económica en Costa Rica.
Nicaragua decretó a partir del miércoles 13 el adelanto de la hora oficial para aprovechar al máximo la luz diurna. Pero la medida fue anunciada en medio de un descontento social generado por un aumento en el precio de la gasolina y el diesel que provocó un incremento en el valor del pasaje de autobuses y taxis.
En El Salvador, el presidente Saca se declaró opuesto a poner restricciones para obligar al ahorro de combustible y más bien apeló a la necesidad de que cada quien ''se autorregule'' para evitar el golpe del incremento del crudo.
La pobreza en América Central es un mal crónico y los sectores más empobrecidos ya resienten los altos precios del petróleo. Guatemala tiene 56 por ciento de su población en la pobreza, Honduras, 71.6 por ciento; El Salvador, 45.5; Nicaragua, 45.8; Panamá, 40.5, y Costa Rica, 22 por ciento.