La solución es que reconozcan su error, expresa
Rechaza López Obrador negociar salida política
Confía en que su nombre estará en las boletas de 2006
El jefe de Gobierno del Distrito Federal (GDF), Andrés Manuel López Obrador, afirmó que su nombre aparecerá en las boletas electorales de 2006 pese a que el presidente Vicente Fox ya tomó la decisión de excluirlo, y advirtió que si sus adversarios políticos "logran aplastar la voluntad y los sentimientos de la gente, van a poder imponer el autoritarismo".
En la que anunció como última conferencia de prensa en el parque Margait, a unos pasos de su domicilio en la colonia Copilco -antes de continuar hoy su gira de resistencia y retomar el lunes las riendas del gobierno de la ciudad-, López Obrador retó al titular de la Procuraduría General de la República (PGR), Rafael Macedo de la Concha, a que muestre un solo documento en el que se compruebe que ordenó que no se respetara el mandato judicial en el caso El Encino.
Expuso que no le causa ningún miedo la advertencia de la PGR de iniciar otra averiguación previa en su contra por usurpación de funciones, de regresar al GDF, pues aun cuando "son capaces de todo", reiteró que no hay obstáculo legal que se lo impida, y rechazó proponer a las autoridades federales alguna salida política, pues son ellas las que hicieron el embrollo y a ellas corresponde desenredarlo.
El itinerario de la resistencia
Por la tarde, tras trabajar en el Instituto de Investigaciones de la Revolución Democrática del PRD, a unos metros de su domicilio, despejó rumores sobre una posible consignación ayer mismo de la averiguación previa, y señaló que no han cambiado sus planes de acudir hoy a la plaza principal de Villahermosa, Tabasco, a las cinco de la tarde; el jueves a la misma hora a la plaza de Guadalajara, Jalisco; el viernes a la de Tepic, Nayarit, en apoyo al candidato de la alianza PRD-PT-PRS al gobierno del estado, Miguel Angel Navarro Quintero, y el sábado, a las 16 horas, en Acapulco, Guerrero.
El itinerario es parte de su gira de resistencia antes de la marcha silenciosa del próximo domingo, del Museo Nacional de Antropología, en Chapultepec, al Zócalo. "Lo más importante es que estamos defendiendo el derecho de todos los mexicanos de elegir libremente a sus autoridades, porque no se puede permitir que desde Los Pinos se decida quién debe y quién no debe ser presidente.
"Si aceptamos eso, si permitimos esas reglas no escritas, estaríamos retrocediendo en lo que se ha avanzado con el esfuerzo, el sacrificio y la vida de muchos mexicanos por ganar esos espacios de libertad y de democracia; por eso no podemos permitir que se consume este golpe. Ese es el punto que más nos importa, porque es algo que tiene que ver con las libertades de todas y todos, no es nada más un asunto del jefe de Gobierno. Si aplastan la voluntad y los sentimientos de la gente van a imponer el autoritarismo", advirtió.
En cuanto a la advertencia de la PGR de que podría iniciar una averiguación previa en su contra por usurpación de funciones si regresa el próximo lunes a gobernar la ciudad, expresó: "Lo que quieran. Estamos en espera de otros atropellos, porque son capaces de muchas cosas", y cuestionó sobre el procurador Macedo de la Concha: "¿De dónde viene?, ¿qué está haciendo ahora?", y se respondió: "Viene de la justicia de mando y está recibiendo órdenes del Presidente para que por ningún motivo mantenga yo mis derechos políticos.
"Que me diga el señor Macedo si en el expediente hay una sola prueba firmada por mí donde yo haya desobedecido o haya ordenado que no se respetara el mandato del juez en El Encino. No hay ni una sola prueba, ni un solo elemento para enjuiciarme, y tanto el Ministerio Público como los diputados del PAN y el PRI en la sección instructora de la Cámara de Diputados basaron su conclusión de la probable responsabilidad a partir de suponer que yo estaba enterado y que no actué, lo que es prueba indiciaria, pero no hay prueba directa, contundente, y concluyen que yo soy el responsable por ser el superior jerárquico, lo cual es absurdo."
Pero arriba de todos ellos, indicó, se encuentra Carlos Salinas, "actuando como un Calles moderno, jefe de jefes, el poder tras el trono, operando esta arbitrariedad para apoyar a Fox, quien había dicho en su campaña a la Presidencia que con Salinillas ni al baño. No sólo está con él en el baño, no sé dónde más".
Criticó la "elocuencia" del gobierno federal al salir a dar conferencias a las 7:30 de la mañana sólo para decir que él no debe regresar al Gobierno, y luego por la tarde el secretario de Gobernación, Santiago Creel, diciendo que se va a buscar una salida política. "No hay voluntad, lo único que prevalece es la decisión de Vicente Fox de excluirme de las boletas electorales de 2006, eso es todo; lo demás es pura demagogia", prosiguió.
Rechazó negociar con ellos alguna salida política, porque la única solución es que rectifiquen y reconozcan que se equivocaron, y ofreció incluso que si así lo hicieran no se burlaría. "Actuaríamos de manera responsable, no vamos a festejar, no vamos a decir lero-lero, lero-lero, te ganamos, eso no", planteó.
"Nada más que no crean que somos ingenuos -subrayó-, porque yo no estoy diciendo que ellos van a cambiar, ellos tienen ya un propósito y están muy obcecados: quieren quitarme mis derechos políticos."
-Y ante todo esto, ¿lo vamos a ver en las boletas electorales de 2006?
-Yo creo que sí -respondió.
Reunión de emergencia
Por la noche, en una reunión en el departamento del jefe de Gobierno, se decidió continuar con la agenda dada a conocer el viernes anterior, que incluye visitas a cuatro estados.
Participaron Leonel Cota Montaño, Manuel Camacho Solís, Socorro Díaz, José Agustín Ortiz Pinchetti, Martí Batres Guadarrama, Alvaro Arceo Corcuera, Ricardo Monreal y Javier Quijano.
Antes de ingresar al departamento ubicado en el numero 57 de la calle Odontología, en la colonia Copilco Universidad, Monreal explicó que el encuentro fue motivado por "la intención de la PGR de agilizar la consignación del expediente de El Encino", ya que al parecer el hecho de que el jefe de Gobierno no se quede en su casa "los asustó mucho".
El encuentro estuvo dividido, ya que en un primer momento López Obrador se reunió con los integrantes del Comité Nacional de Redes Ciudadanas, y posteriormente con los abogados Quijano y Arceo Corcuera.
Los primeros en salir fueron los dirigentes perredistas Cota Montaño y Batres Guadarrama. Ambos criticaron que la PGR haya dado varias versiones sobre la fecha en que se consignará el expediente ante un juez federal desde el jueves 7 de abril, cuando el pleno de la Cámara de Diputados, convertido en jurado de procedencia, determinó retirar el fuero constitucional a López Obrador.
Minutos después Monreal argumentó que la orden de aprehensión no puede liberarse hasta que la Suprema Corte de Justicia de la Nación resuelva las controversias constitucionales interpuestas por la Cámara de Diputados y por la Asamblea Legislativa del Distrito Federal.
"Jurídicamente no puede un juez dictar orden de aprehensión cuando el asunto está pendiente de resolverse con sus superiores jerárquicos, los ministros de la Corte; por ello, la intención de López Obrador de encabezar la marcha del silencio y regresar al GDF sigue en pie."