Lamentan ONG la designación
Activistas y defensoras de los derechos humanos y reproductivos de la mujer lamentaron la elección de Joseph Ratzinger como el nuevo papa Benedicto XVI, acción que calificaron de "fortalecimiento de las corrientes más conservadoras" en la Iglesia católica. Pilar Muriedas, presidenta de la organización Salud Integral para la Mujer, señaló que existen "pocas expectativas" de que en este nuevo pontificado la jerarquía eclesiástica modifique sus "preceptos conservadores como demanda la mayoría de la sociedad, sobre todo en materia de anticonceptivos y educación sexual". Agregó que es evidente que quienes gobiernan la Iglesia católica son un sector "caduco", sin el menor interés por reconocer el valor de las mujeres en una religión en que son mayoría. En entrevista por separado, Martha Juárez, del Grupo de Información en Reproducción Elegida, aseguró que es "triste y preocupante" que la Iglesia opte por "ratificar la línea dura" en una acción que le traerá "elevados costos", indiferente a las demandas más urgentes de la sociedad. Indicó que la separación que hoy existe entre la moral sexual que promueve la Iglesia católica y la que ejerce la mayoría de las personas "es prácticamente irreversible, en particular para las mujeres, quienes no están dispuestas a poner en riesgo su salud reproductiva por llamados fundamentalistas de un sector conservador de la Iglesia".
Laura Poy Solano