ASTILLERO
Señor López
Heráldica hepática
PGR del pensamiento
ESTA DEJANDO DEMASIADAS huellas delatoras el grupo federal encargado de la Operación Desafuero. El salto procesal al vacío, dado este miércoles de consignación, dejó claras evidencias de la confabulación que hay entre los poderes Judicial y Ejecutivo y el partido que se dice en el gobierno. Pero a los plomeros formalmente pertenecientes a la empresa denominada Los Pinos Inc. no les pareciera suficiente la colección de desatinos hecha hasta ahora, y se esmeran diariamente en aportar nuevas creaciones.
LA DE AYER ESTUVO a cuenta del pirata Aguilar, el vocero de la casa presidencial que pretende apropiarse del espacio mediático matutino presuntamente dejado por un tabasqueño madrugador. El bucanero Rubén se regaló el extraño placer de nombrar de manera innecesariamente despectiva a un político destinatario de una alocución formal del gobierno mexicano. "Señor López", dijo una y otra vez el alegre portavoz, embonando así el criterio oficial de la administración foxista con la moda desdeñosa de nomenclatura recortada que mantienen los más férreos opositores de Andrés Manuel López Obrador.
"LOPEZ", SE ESCRIBE en el diario crónicamente sabido como salinista (el Salinews) y en otros espacios ocupados por críticos persistentes del tabasqueño a quienes les parece degradar al blanco de sus críticas quitándole el segundo apellido. Detalle muy significativo resulta ser que a estas alturas de la batalla aparezca la oficina de comunicación social de la Presidencia utilizando el giro heráldico supuestamente despectivo que también manejan plumas, micrófonos y medios comprometidos con una campaña de ataque sucio contra el "señor López". El uso oficial de ese apellido solitario, que va en sentido intencionalmente opuesto a la denominación ampliamente conocida del obrador político desaforado, exhibe el grado de peligroso resentimiento (ojeriza, tirria, rencor, aborrecimiento, rabia) que en la cabaña del amor se tiene contra el peje enjabonado. Aunque pudiera parecerlo, no es un asunto menor. De la violencia verbal suele pasarse a la física, y Los Pinos está descuidando (en muchos casos, pues el "López" de ayer es apenas uno más de ellos) formas que son fondo.
LO MISMO HA SUCEDIDO con el marcial defensor de la justicia imparcial, objetiva y ajena a partidismos o politizaciones que se supone es el general procurador general. Ya antes su subalterno pandillero, de apellidos Vega Memije, se había atrevido a cruzar la línea del alegato jurídico para instalarse en la retórica política, cuando habló el pasado 7 ante el pleno legislativo de San Lázaro. Ahora, en su colaboración semanal en un programa radiofónico de corte empresarial, el general Macedo de la Concha hizo una abierta confesión de que el manejo del expediente del desafuero hacia un juzgado fue elaborado a partir de consideraciones personales, subjetivas, políticas.
SIN SUSTENTO JURIDICO alguno, opinando más bien como parte política, Macedo de la Concha acusó a un ciudadano, objeto de una acción de la procuraduría federal, de tener propósitos de asumirse como víctima, de buscar una fotografía tras las rejas ("es lo que él quisiera", comentó con ese mismo ánimo amargo del vocero Rubencito que muy probablemente sea el del presunto jefe de ambos). Como si fuese juez, el general Macedo dijo que López Obrador pretende seguir haciéndose la víctima "de aspectos que sabemos bien que no tienen por qué ser". Instalado en policía del pensamiento y en fiscal político, el procurador dijo que ese buscador de escenas de martirio buscaba las rejas "para vender muy bien lo que pretende hacer". Con tufos sudamericanos de décadas pasadas, o del México de la guerra sucia, el titular de la PGR insistió en que hay sectores que de manera "yo diría imprudente, tratan de amedrentarnos" y "lo único que están haciendo hoy es provocar, es llevar a nuestra paz social a una crisis que obviamente no es permisible para las leyes". ¡Oh astillado que está a punto de declarar toque de queda nacional!
EN ESE ESCENARIO DE DESFIGUROS aparece, obviamente, el rey de las iniciativas exitosas, el canciller Al Derbez, que ha anunciado que realizará por todo el mundo una campaña informativa para que se conozca el punto de vista del foxismo respecto del caso López Obrador. No dijo el Hombrecito de Tlatelolco si para ahorrar recursos realizará esa cruzada esclarecedora al mismo tiempo que viaja prestándose a la farsa con la que Estados Unidos pretende imponerlo como mayordomo en la OEA.
EL OBJETO DE LOS ENCONOS foxista-salinistas desbordados sigue mientras tanto en su campaña electoral, ayer en Guadalajara, y se entretiene exhibiendo las tonteras blanquiazules y macedonias cometidas a causa de la fianza que panistas le pagaron para que no sea encarcelado. No es tanto que él vaya ganando por grandes méritos y extraordinarias estrategias, sino que sus contrincantes le regalan las victorias y pareciera que trabajan para engrandecerlo. Esa desproporcionada pelea está consolidando, por lo demás, la tendencia caudillista que sabidamente caracteriza al tabasqueño, y hace que el análisis de sus debilidades y errores languidezca o sea pospuesto ante el tamaño de las pifias de sus contrarios y ante los riesgos de coletazos autoritarios que no se deben descartar.
MAS NO DEBE VERSE con condescendencia, al amparo de la tesis de que toda crítica al desaforado y su movimiento ayuda a sus verdugos, la concentración extrema de poder en un solo par de manos, sin contrapesos reales. Justamente una marcha como la de este domingo venidero, de un corte ciudadano que es de esperarse supere las previsibles expresiones corporativas del perredismo tradicional, podría alentar el fortalecimiento de una resistencia en lo general contra el desafuero bárbaro pero, al mismo tiempo, el establecimiento claro de la importancia de propuestas cívicas y políticas amplias que vayan más allá de las militancias partidistas, del asentimiento acrítico al líder y de la emotividad del momento de lucha. ¡Feliz fin de semana, mientras Felipe Calderón sigue cobrando regalías periodísticas por su idea de la fianza a fuerza!
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