Critica la campaña emprendida por la cancillería
Se congratula el Gobierno del DF por la postura de obispos
El Gobierno del Distrito Federal (GDF) expresó su reconocimiento a los cinco obispos de la Comisión de Pastoral Social de la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) que condenaron el proceso de desafuero contra Andrés Manuel López Obrador, y reprobó la censura de la Secretaría de Gobernación al descalificar dicho pronunciamiento.
El secretario de Gobierno, Alejandro Encinas, consideró absurda la intención de las autoridades de Gobernación de "autorizar, desde la esfera de la administración federal, una versión oficial del Episcopado" sobre el tema del desafuero.
Además, criticó la campaña que la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) realizará en embajadas y en la prensa internacional para tratar de revertir la mala imagen del país que generó el desafuero del mandatario capitalino, así como la maniobra de autoridades municipales de Guadalajara para retirar mantas de apoyo a López Obrador y sustituirlas por otras en las que se insultaba al gobernante de la ciudad, previo al acto que se realizó en esa ciudad el jueves pasado.
Encinas hizo un reconocimiento a los obispos de Jalapa, Sergio Obeso -presidente de la Comisión de Pastoral Social-, Miguel Angel Alba, de La Paz; Luis Artemio Flores, de Valle de Chalco; Raúl Vera, de Saltillo, y Gustavo Rodríguez, obispo auxiliar de Monterrey.
Manifestó: "lamentamos que la Secretaría de Gobernación quiera intervenir en asuntos de esta naturaleza tratando de minimizarlos, de censurarlos, cuando la reforma constitucional permite a los ministros del clero intervenir en política y ejercer su derecho a votar, pues evidentemente todos estamos conscientes de que la diversidad de las iglesias se iba a manifestar tanto en el ámbito del culto como en los posicionamientos de carácter social", y cuestionó los comunicados que emitió Gobernación avalando el que a su vez sacó el presidente de la CEM para deslindarse de dicho pronunciamiento.
Acerca de la campaña de la SRE, Encinas consideró que esa acción es "to late, como dirían ellos", situación que da cuenta de la capacidad de reacción del gobierno federal, sobre todo porque "la gente de nuestro movimiento no solamente ha recorrido todas las embajadas y representaciones diplomáticas radicadas en México, sino que yo mismo he informado a todos los representantes de las principales ciudades del mundo sobre esta situación".