El líder del PP rechaza cualquier reunión con el gobierno e insiste en proscribir al PCTV

Rodríguez Zapatero insta a Rajoy a mantener el pacto contra el terrorismo

Refrenda el presidente del gobierno español su disposición a un eventual diálogo con ETA

ARMANDO G. TEJEDA CORRESPONSAL

Madrid, 26 de abril. El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, del Partido Socialista Obrero Español (PSOE), respondió a las críticas que le hizo el jefe del derechista Partido Popular (PP), Mariano Rajoy, quien lo acusó de deslealtad hacia la lucha antiterrorista, a la que ambos se comprometieron en 2000 al firmar el Pacto de Libertades y contra el Terrorismo. El gobernante, sin embargo, instó a Rajoy a celebrar una reunión para conservar el pacto.

Rajoy habla de negociaciones clandestinas entre el PSOE y la organización armada vasca ETA, tras las elecciones vascas el pasado 17 de abril. A estas acusaciones, el mandatario socialista respondió refrendando su compromiso hacia el pacto antiterrorista, pero afirmando su disposición a un eventual diálogo con ETA.

El Pacto de Libertades y contra el Terrorismo permitió que durante cuatro años los dos principales partidos españoles coincidieran en todo cuanto hizo el gobierno conservador para luchar contra el grupo armado. Además fue antesala a la aprobación, en 2002, de la Ley Orgánica de Partidos Políticos con el fin de proscribir a la coalición Batasuna, así como a organizaciones sociales y sindicales afines a ella.

La disputa entre el PSOE y el PP se originó con el proceso electoral en el País Vasco. Las dos semanas de campaña estuvieron plagadas de filtraciones sobre supuestas negociaciones secretas entre ETA y el gobierno español, así como por la controversia generada por el pedido del PP de ilegalizar a la lista electoral Partido Comunista de las Tierras Vascas (PCTV o EHAK, por sus siglas en lengua vasca), a la que consideró la voz de Batasuna.

En versiones periodísticas sobre el supuesto acercamiento entre el gobierno y ETA se llegaron a mencionar condiciones para negociar, y sobre "concesiones" que Rodríguez Zapatero estaría dispuesto a dar en materia de amnistía a presos vascos.

Dando credibilidad a esta información, el PP decidió de forma unilateral dar por roto el citado Pacto contra el Terrorismo, aunque no de manera formal. Esto derivó en un intercambio epistolar entre Rodríguez Zapatero y Rajoy, en las que se responsabilizan mutuamente del futuro incierto de la alianza.

En una de estas cartas, el presidente español le señaló a Rajoy: "Después de un año en la responsabilidad del gobierno y vosotros en la tarea de oposición, compruebo con decepción que habéis decidido hacer del terrorismo elemento de confrontación y de control parlamentario. Lamento esta actitud, es negativa para la lucha contra el terrorismo".

Sobre el reclamo de Rajoy de que el gobierno se había negado a ilegalizar al PCTV, Rodríguez Zapatero explicó que no se encontraron elementos jurídicamente relevantes para hacerlo y señaló: "Seguramente te cuesta recordar que este partido es legal desde septiembre de 2002. La Ley de Partidos habla, para llegar a la conclusión de una posible acción, de una ejecutoria continuada, grave y reiterada. Es difícil que alguien pueda sostener que estemos ante uno de los supuestos de la tan referida ley".

Lamentó el doble rasero de la oposición ante un escenario de negociación con ETA para encauzar un proceso de paz, al sostener: "Me sorprende oír decir a dirigentes del PP que hay conversaciones con ETA cuando la última negociación la hizo el gobierno de (el ex presidente derechista, José María) Aznar en 1999. ¿Con la mejor intención? Seguro. Y también con el apoyo de todos los partidos, y el mío.

"Sin que el gobierno tenga ningún tipo de negociación, ya está criticando que estamos negociando. Es de una tremenda hipocresía. Pero el gobierno hará lo que esté en su mano para ver el final de la violencia. Es mi obligación como presidente del gobierno y espero estar a la altura de las circunstancias".

En respuesta, Rajoy rechazó la sugerencia de una reunión hecha por Rodríguez Zapatero, y aseveró que su formación no participará en ninguna reunión del pacto hasta que el gobierno no dé el primer paso para ilegalizar al PCTV. "Estamos a tiempo para que el crédito del gobierno y la dignidad del Estado de derecho se restablezca, si no se hace esto se habrá dañado seriamente el pacto por la irresponsabilidad de su dejadez".

Con la llegada al poder de Rodríguez Zapatero, PSOE y PP reiteraron sus convicciones en el pacto, pero al mismo tiempo intercambiaron un sinfín de descalificaciones y críticas en la Comisión de Investigación Parlamentaria por los atentados del 11 de marzo de 2004.

El PP acusó a Zapatero de hacerse con el poder de manera "ilegítima", aprovechándose de un atentado terrorista para "manipular a la opinión pública". El gobierno socialista acusó a sus predecesores de llevar a cabo "un engaño masivo" para evitar que la matanza tuviera consecuencias electorales en sus filas.

En todo caso, parece improbable que el PP, ahora en la oposición, acepte no utilizar el tema de la lucha contra el terrorismo en su estrategia de desgaste del gobierno, a pesar de que cuando eran gobierno su discurso era el opuesto.