Nelson Vargas exhortó a las federaciones a la unidad para beneficiar a los deportistas
Entre impugnaciones aprueban nuevos estatutos para elegir presidente del Codeme
Dirigentes del COM abandonaron la asamblea, tras la decisión considerada histórica
Ampliar la imagen Fue en vano el intento conciliador de Nelson Vargas, titular de la Codeme FOTO Yazmin Ortega
Aunque la mayoría de los federativos consideró histórico que ahora serán ellos los que elijan al presidente de la Confederación Deportiva Mexicana (Codeme), tras aprobarse los nuevos estatutos, algunos dirigentes del Comité Olímpico Mexicano (COM), encabezados por Ricardo Contreras, abandonaron la asamblea general extraordinaria en señal de protesta sin dar su voto.
En vano fue el tono conciliador de Nelson Vargas Basáñez por tratar de calmar al titular del boxeo, quien lo encaró para señalar que se estaban violentando las garantías de los miembros federados con la modificación de los estatutos y reglamentos de la Codeme.
Específicamente los artículos 30 y 58, que fueron los más impugnados, pero al final aprobados en paquete y con sufragios: 48 a favor, por cuatro en contra.
Fueron más de dos horas de discusión entre los dos grupos identificados que apoyan a Vargas y los que están con Felipe Muñoz.
Los primeros exigían la aprobación del artículo 38, en el que se establecía que el futuro presidente de la Codeme debe formar parte del consejo directivo de ese organismo, correspondiente al periodo inmediato anterior a la fecha en que sea propuesto, lo cual no aceptó el grupo del Tibio.
Argumentó que favorecía a la gente de Vargas, en especial al vicepresidente Alonso Pérez, titular de beisbol, a quien parte del gremio lo ubica como el futuro dirigente de la confederación.
Los ánimos se caldearon en el auditorio José García Cervantes. Comenzó con un apagado Jorge Castro, de esgrima, mientras José Luis Aguilar, de deportes invernales, enviaba papelitos al de pentatlón moderno, Juan Manzo, y al de tenis, Francisco Maciel, para que impugnaran los nuevos cambios, y Javier Rosas, de triatlón, se decía una persona "con libertad de expresión en el COM y Codeme''.
Cuando tocó el turno a Ricardo Contreras, éste prendió la mecha para tratar de echar abajo lo que una gran mayoría había aceptado: "Nos están tomando el pelo. No se puede ser juez y parte, ni distribuir el dinero para después designar a alguien''.
Enojado, Contreras bajó y se puso frente a Vargas y su consejo directivo para que se consignara en el acta su desacuerdo y abandonó el salón repitiendo la misma escena que le hizo a Raúl González, cuando dirigió aquella renuncia masiva de federativos identificados con el COM, a principios de los 90.
Lo siguieron Aguilar, Manzo, Izquierdo y hasta el de fisicoconstructivismo, Francisco Cabezas, mientras Vargas admitía que la división que hay en el deporte es por "gente que sólo viene a simular y a buscar una democracia amañada, cuando estamos convencidos en unir esfuerzos, dejar atrás los grupos y pensar antes que nada en los atletas''
Alonso Pérez perdió el control y le dijo a Contreras que no fuera "maricón'', al querer hablar de una democracia que no existe en el COM, "y ahora resulta que somos los antidemocráticos''.
Al final se le acercaron a Vargas, los titulares de triatlón, handball y Mariano Lara, de atletismo, quien llegó un poco tarde para aclararle que aunque forman parte del comité ejecutivo del COM y no estuvieron de acuerdo con la aprobación de estatutos, estaban ahí para defender a sus deportes y no a los grupos que representan, y sellaron el pacto con una comida.
Durante el acto se presentó la maqueta virtual de lo que será el Centro Nacional de Desarrollo de Talentos, el cual estará terminado en agosto de 2006 en la llamada Cola de Pato de la Magdalena Mixhiuca, y que atenderá a 800 deportistas estudiantes de primaria, secundaria y preparatoria en disciplinas olímpicas.