Pide el New York Times al presidente Bush no dar asilo político al anticastrista
Confirman documentos desclasificados que Luis Posada Carriles fue agente de la CIA
Nueva York, 10 de mayo. "En nombre de la credibilidad, consistencia y justicia para las 73 víctimas" del atentado contra un avión comercial cubano en 1976, Estados Unidos "no debe dar asilo político" a Luis Posada Carriles, pues en caso de concederlo "establecería un gravísimo precedente haciendo una excepción en el caso de un confeso terrorista", afirmó este martes un editorial de The New York Times, al tiempo que se confirmaba que el anticastrista fue agente pagado de la Agencia Central de Inteligencia (CIA) y autor del bombazo.
Documentos desclasificados identifican a Posada Carriles como ex agente de la CIA y el artífice, junto con otro anticastrista, Orlando Bosch, del atentado contra el avión cubano en Barbados en que viajaba el equipo juvenil de esgrima de Cuba.
Disponibles por primera vez al público por el proyecto Archivos de Seguridad Nacional, de la Universidad George Washington, los documentos confirman que Posada Carriles fue agente de la CIA desde 1965 hasta por lo menos junio de 1976, destacó Peter Kornbluh, encargado del archivo.
Un día después del atentado, el 7 de octubre de 1976, un informe de la Oficina Federal de Investigaciones (FBI) señaló a Posada Carriles y a Bosch sospechosos del bombazo, y citó a un informante que "prácticamente admitió que ambos lo prepararon".
Otro informe de la FBI de noviembre de ese año agregó que uno de los hombres que había puesto la bomba en el avión llamó a Bosch y le dijo: "Un autobús con 73 perros se cayó por un risco y todos murieron".
Pero tanto Posada Carriles como Bosch fueron inicialmente exonerados de los cargos en juicios en Venezuela, y el primero escapó de la cárcel en 1985, mientras el caso era apelado.
Bosch permaneció en prisión hasta 1987 y regresó a Miami, donde fue detenido por no tener visa, pero gracias a la intervención del presidente George Bush, padre del actual presidente, fue liberado.
Según Kornbluh, los documentos indican que la policía secreta venezolana, dominada por elementos anticastristas, estaba vinculada con los sospechosos del bombazo.
Los documentos, que están disponibles en http://www.nsarchive.org, son conocidos al tiempo que un editorial del New York Times pide no otorgar asilo a Posada, quien estaría en el país desde hace seis semanas.
El anticastrista "debería ser arrestado y extraditado para ser juzgado no sólo por el ataque a la aerolínea, sino por otros atentados terroristas que admitió haber planificado, incluso el de 1997" contra hoteles cubanos que costó la vida a un italiano, añadió.
"Lamentablemente el gobierno del presidente Bush no cree en la Corte Penal Internacional, que habría sido el sitio ideal para juzgarlo", por lo que la única opción que queda es extraditarlo a Venezuela, país que lo ha reclamado, sostuvo el diario.
Eduardo Soto, abogado de Posada Carriles en Estados Unidos, anunció el mes pasado en Miami que su cliente había pedido asilo político en este país por haber "servido a los intereses de Estados Unidos durante tres décadas". Pero el gobierno estadunidense dice no tener informes de la presencia del ex agente en su territorio.
Antes de llegar a Estados Unidos Posada Carriles estuvo encarcelado en Panamá hasta 2003, cuando fue indultado por la entonces presidenta Mireya Moscoso, en el contexto de la causa por intento de asesinato del presidente Fidel Castro durante la Cumbre Iberoamericana de 2000.