Están implicados en el asesinato, según Navarrete Prida
Arraiga la PGJEM a abogado y un vecino de Enrique Salinas
Toluca, Mex., 12 de mayo. La Procuraduría General de Justicia del Estado de México (PGJEM) arraigó a Mariano de Jesús Flores Arciniega, representante legal de Enrique Salinas de Gortari en su juicio de divorcio contra Adriana Lagarde, así como al vecino y compadre del finado, José Ricardo Hernández Iturbide, por considerar que ambos tendrían relación directa con el homicidio del hermano del ex presidente Carlos Salinas o en su encubrimiento, lo que deberá comprobar el Ministerio Público durante los próximos 30 días, informó el procurador mexiquense, Alfonso Navarrete Prida.
Añadió que se giró una orden de presentación a Hilda Deneken, quien fue pareja sentimental de Enrique Salinas, para que aclare la serie de supuestas omisiones y mentiras que ha rendido en declaración ante la autoridad sobre el asesinato del menor de los hermanos Salinas de Gortari.
Navarrete Prida dijo que se procedió contra Hernández Iturbide y el abogado Flores Arciniega al saberse que conocían de la extorsión y posiblemente a los responsables de la misma, además de que en sus declaraciones ministeriales omitieron dar información relevante a la PGJEM sobre acontecimientos previos al crimen.
El abogado, comentó el procurador, recomendó a Salinas de Gortari no salir de su casa el 5 de diciembre, día en que tenía una cita con quienes lo estaban extorsionando, y "eso nunca lo declaró", mientras José Ricardo Hernández Iturbide no sólo permitió salir al ingeniero Salinas a la cita que tenía con los extorsionadores por un pasillo contiguo a su casa, para que no fuera visto por nadie, sino que omitió declarar varios puntos relacionados con el crimen.
El citatorio a Hilda Deneken es por haber omitido a la autoridad datos de los acontecimientos previos a la cita con los extorsionadores y por haber mentido en sus testimoniales de lo que ocurrió previo al homicidio.
Navarrete Prida presentó este jueves el avance de las investigaciones del asesinato de Enrique Salinas, perpetrado la madrugada del pasado 6 de diciembre en los límites entre el estado de México y el Distrito Federal, que habría sido resultado de una extorsión por 2 millones 900 mil dólares.
El procurador afirmó que Enrique Salinas fue presionado la víspera de su muerte por dos vías. La primera se derivó de su divorcio de Adriana Lagarde, quien le solicitó una pensión mayor a la que se le otorgaba, por haberse enterado de que las autoridades de Suiza habían descongelado más de 7 millones de dólares a su ex esposo, tras una investigación practicada en ese país para conocer el origen de sus recursos, lo cual fue ventilado por un semanario de circulación nacional en México.
Derivado de este acontecimiento, "que provocó una fuerte tensión a Enrique Salinas, acudió una segunda fuente de extorsión, con otro tipo de problemas que desembocan en la muerte del ingeniero, y esta hipótesis está robustecida el día de hoy".
Aunque Navarrete Prida se negó a revelar la fuente de la segunda extorsión, dijo tener indicios de que ésta pudo provenir de elementos de la Interpol para no causarle daño por una supuesta investigación que el gobierno francés ordenó en su contra. "Esto no lo decimos nosotros, lo señalan varios testimonios indirectos que dicen que él (Enrique Salinas) estaba siendo extorsionado por agentes federales de Interpol, y desde ese momento citamos a declarar a personas de la Procuraduría General de la República, incluso a algunos directores", planteó.
Ya se han tomado medidas de seguimiento y cercanía contra presuntos responsables para que no evadan la acción de la justicia, añadió el procurador, quien destacó que por lo pronto la PGJEM busca demostrar quiénes fueron responsables materiales e intelectuales del crimen.
Navarrete Prida indicó que hasta el momento se han realizado 246 declaraciones ministeriales, entre ellas los testimonios de la ex esposa de Salinas de Gortari, Adriana Lagarde; sus hijas Mónica y Carolina Salinas Lagarde; el abogado de la familia, Mariano Flores Arciniega; la secretaria particular de Enrique Salinas, Lourdes Corral; el principal socio de la víctima, Carlos de la Mora; las hermanas Hilda y Lila Deneken, la primera de ellas pareja de Salinas hasta el día de su muerte; Claudia Lucila Martínez Araujo, con quien sostuvo una relación sentimental, así como los hermanos Adriana, Sergio y Raúl Salinas de Gortari, además de empresarios, amigos, socios, colaboradores y directivos y agentes de la Agencia Federal de Investigación de la Procuraduría General de la República.
La investigación también incluye 65 dictámenes periciales, entre los que destacan la necropsia, con la que se pudo conocer que el hermano del ex presidente Carlos Salinas de Gortari falleció por sofocación, en su modalidad de obstrucción de las vías respiratorias altas; grafoscópicos que revelaron que la carta póstuma que dejó la víctima fue escrita "bajo presión"; informes de empresas telefónicas con los que se precisaron los vínculos del finado, así como reportes de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores que permitieron proceder jurídicamente contra algunas personas.