Se les ha negado el registro
Por tratar de crear sindicato, el IFE acosa a trabajadores
El Sindicato Nacional de Trabajadores del Instituto Federal Electoral (IFE) interpuso un amparo en contra de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social e instancias de esa dependencia, como la Dirección General de Registro de Asociaciones, debido a que vulneró su derecho constitucional a la libre asociación al no otorgar el registro a su organización.
Miembros del Comité Ejecutivo de este sindicato denunciaron ante este periódico que a pesar de haber documentado fehacientemente todos los requisitos para su registro, las autoridades laborales "se han declarado incompetentes" para resolver su solicitud.
Encabezados por el secretario general de la organización, Germán León Rodríguez, advierten que llevarán el caso a la Suprema Corte de Justicia de la Nación y harán las denuncias correspondientes ante la Organización Internacional del Trabajo y otras instituciones internacionales, como la Corte Interamericana de Justicia y las instancias del Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Hostigamiento y represión a quienes tratan de organizarse para defender sus derechos
Advirtieron que a raíz de que se dieron a conocer como organización sindical, la secretaría ejecutiva del IFE ha seguido una política de hostigamiento y represión contra los integrantes de la misma, e inclusive se ha despedido a diversos trabajadores por esta razón. "A cualquier precio quieren acallar el movimiento y los jefes de todas las áreas han advertido a los trabajadores que quienes participen en el sindicato perderán su empleo", señaló su dirigente.
León Rodríguez explicó que muy lejos de lo que pregona el IFE hacia el exterior, al interior la administración del instituto es absolutamente antidemocrática, ya que se violan los derechos labores de trabajadores, se reprime y hostiga su organización, y se sigue una política de linchamiento hacia los integrantes del sindicato e inclusive se ha despedido a 48 trabajadores simpatizantes del movimiento.
Detalló que esta organización nació a raíz de la inconformidad de los trabajadores por la permanente violación a sus derechos laborales. Por ejemplo, dijo, el instituto tiene contratados 9 mil 500 empleados y 3 mil 500 por honorarios, pero estos últimos tienen entre 10 y 14 años laborando como "eventuales". Es decir, el organismo ha violado flagrantemente la Ley Federal del Trabajo para una parte considerable de sus trabajadores, ya que los tiene con contratos eventuales, anuales o mensuales, y les ha negado la seguridad en el empleo, el pago de prestaciones y el derecho a jubilarse, entre otras cosas.
Lilia García, quien es miembro de esta organización sindical, planteó que los trabajadores del Instituto Federal Electoral, han quedado en una laguna legal que los ha dejado totalmente desprotegidos, víctimas de un trato jurídico arbitrario e injusto, y bajo un ambiente de terrorismo laboral.