ASTILLERO
Problemas de identidad
Nuevos libretos, actores entrampados
Continuidad teatral sin transición
Geometría política cambiante
ES UNA CRISIS de identidad. Porque quienes tienen aspiraciones de futuro electoral de entre los principales actores de la tragicomedia recién pasada del desafuero ahora están representando otros papeles, pero el público no tiene suficientemente claros los nuevos roles, ni esos mismos protagonistas han dejado de interpretar sus viejos libretos, y ni siquiera se han mudado de sus escenarios naturales de poder (el gobierno capitalino, Gobernación y el comité nacional priísta) para asumir sin conflicto ni confusión sus modificados ropajes y discursos.
POR ELLO ANDRES Manuel López Obrador se desgasta diariamente pretendiendo actuar como funcionario público cuando es evidente que ya sólo es un adelantadísimo precandidato presidencial en campaña (y de esa contradicción insoluble se desprenden episodios de oposición ciudadana genuina o provocada, como la de quienes ayer convirtieron en reyerta una inauguración de obras). Por ello Santiago Creel aparece diariamente como ilegítimo crítico de las acciones del propio gobierno federal al que pertenece y por ello en estos días recientes actúa ya sin siquiera el mínimo de recato formal, sobrellevando no sólo las críticas de sus adversarios, sino también de sus propios correligionarios que censuran su doble condición privilegiada de funcionario y precandidato oficial. Por ello Roberto Madrazo Pintado tiene que aparentar frente a sus contrincantes internos una mano suave y una vocación tolerante que no corresponden a su verdadera entraña, y en esa dualidad adulterada, de líder y precandidato presidencial puntero en su partido, tiene que ir repartiendo migajas y porciones del gran pastel, aun a riesgo de que de pronto pueda voltear hacia la despensa y se encuentre con que ha agotado sus existencias y entonces pudiera ser necesario un nuevo candidato con arcas cuando menos llenas de sal como, por ejemplo, el acechante gobernador regiomontano Natividad Gonzalinas de Gortari. Tres ocupantes a título falso de cargos que ya no ejercen a plenitud, tres declarantes diarios que hablan en términos que ya nadie puede creer, tres precandidatos a la presidencia que irán dejando escalonadamente sus actuales puestos para entrar todos a esa nueva etapa a la que el respetable deberá irse acostumbrando en esta función teatral sin intermedio ni transición entre obras distintas.
PROBLEMAS DE IDENTIDAD y de personalidad llevan al Consejo Político Nacional del PAN a plantear que los funcionarios del gobierno federal deben tener apego a la doctrina blanquiazul, engallamiento del partido presuntamente en el poder que se da cuando a la actual administración federal le queda cronológicamente año y medio pero políticamente ya nada, rebasado, extenuado y cada vez más ridiculizado ese ejercicio foxista prozaico. La Santísima Trinidad Panista (la señora Marca, el desértico Espino y el jefe yunque Ramón Muñoz) quiere apropiarse de los nombramientos sustitutos que hará el rehén Vicente cuando se vayan Creel y tal vez otros miembros de ese gabinete patas arriba y para ello es revestida de presuntas reivindicaciones éticas la mezquina ambición trinitaria de podercito de fin de sexenio. Tampoco saben ya los perredistas cuál es su verdadera identidad, dominados cada vez más por la camada lopezobradorista de priísmo servil (el mejor ejemplo es Leonel Cota, cuyo único mérito es asumirse y comportarse como un marcial subordinado de la voluntad de su jefe) y por el camaleonismo intrigante del camachismo que controla la planeación y la estrategia del movimiento andresino y que, desde luego, coloca en arrancaderos privilegiados a su propia caballada grupal, en este caso a Marcelo Ebrard, que debe tener hoy estupefactos a todos quienes se hayan considerado alguna vez "de izquierda", pues tal posición de geometría política ha exigido para sí el candidato a la jefatura de gobierno beneficiado por el dedo tabasqueño: si él no fuera de izquierda, dijo Marcelo, el carnal de Manuel, ¿cómo sería posible que trabajara con López Obrador? (quien se acaba de declarar centrista). Izquierdismo por la vía de la nómina. Entonces, ¿sería indiscutiblemente salinista todo aquel que hubiera trabajado con Carlos Salinas de Gortari?
MAXIMA EXPRESION INSTITUCIONAL de las personalidades desdobladas, el bipolar Cente (Bi-Snte) vaga por el país cual fantasma vacilón. La más reciente de sus representaciones escénicas se ha dado en la emblemática Culiacán, a la que ha provisto de un plan de saliva contra el narco. Nada puede hacer el gobierno federal porque virtualmente no existe, pero su acta de defunción tiene fecha del 30 de noviembre de 2006 y por tanto el concesionario de ese changarro oficial debe sobrellevar las apariencias cuando menos hasta entonces. Las bandas del narcotráfico se arrebatan las porciones de poder que el gobierno en prolongada abdicación va dejando abandonadas, y en el colmo del enredo se producen episodios oscuros como el traslado entre cárceles de El Chapito (la reducción progresiva del nivel de las preocupaciones nacionales: ya no es El Chapo, sino su filial diminutivo. ¿El gobierno que no ha podido controlar al papá, y que ahora se enzarza con el hijo, será entonces un gobiernito, igualmente chapito (es decir, chaparrito)?
FALTA DE DEFINICION también ha de reconocer en sí mismo el autor de los presentes teclazos, pues ayer ha visto triunfar al América sobre los Tecos en la final del futbol de paga, pero no ha atinado a precisar sus sentimientos. Cayó el buen equipo deportivo armado por la directiva de la universidad tapatía, que durante décadas ha sido asiento de la ultraderecha más peligrosa del país, pero tampoco le es posible al columnero hacer siquiera una mueca de gusto por quien ha parado el avance de los Tecos. Mejor será esperar el inicio de la nueva temporada para seguir apoyando a las Chivas y al Santos. ¡Hasta mañana, mientras la Señora Marca sigue de ideóloga, según ella desmarcando al PAN de la derecha y acusando a la oposición de portarse "como oposición", pero no a Fox sino "a México"!
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