El delegado culpa a priístas de impedir la solución a la escasez del líquido

Amenazan con tomar ductos de agua en Cuajimalpa

Ante el desabasto de agua que han padecido desde hace un año, y que se agravó en la última semana, comuneros y habitantes de San Lorenzo Acopilco, delegación Cuajimalpa, advirtieron que tomarán las instalaciones hidráulicas para controlar las válvulas del sistema.

"Durante 50 años los manantiales de nuestro pueblo han abastecido a la ciudad y nosotros no hemos cobrado nada, pero ahora las autoridades ni siquiera nos proporcionan agua, y de no hacernos caso tomaremos otras medidas", expresó Margarita Negrete, comunera de San Lorenzo Acopilco.

Los integrantes del Comisariado Ejidal y vecinos de la zona informaron de las diversas protestas que han realizado en la explanada delegacional -incluso haber bloqueado la carretera México-Toluca-, y si bien reconocieron que fueron recibidos personalmente por el jefe delegacional, Ignacio Ruiz, afirmaron que el problema no se ha solucionado.

Por lo anterior, un grupo de 20 personas, entre comuneros y vecinos, decidieron salir de San Lorenzo Acopilco, colindante con La Marquesa, y llegar hasta el centro de la ciudad para realizar por la mañana una concentración frente a la Torre del Caballito -sede del Senado de la República- e informar sobre las carencias que padecen y las acciones que están dispuestos a tomar.

Maximiliano Reyes, habitante del pueblo, atribuyó la escasez de agua a la masiva construcción de viviendas en la zona y criticó que cada delegado en turno trate de evadir su responsabilidad en el tema con el argumento de que las autorizaciones fueron otorgadas por sus antecesores. Ese, dijo, es el caso de Ignacio Ruiz, quien en un comunicado de prensa emitido por la tarde descalificó la protesta y aseguró que los inconformes son priístas, que no han permitido que se lleven a cabo obras para solucionar el problema.

Reyes calculó que en los últimos cinco años se han construido 15 mil viviendas, lo que ha provocado una disminución del suministro de agua a la población, al grado de que se han visto obligados a comprar agua de pipas, cuyos precios oscilan entre 300 y 600 pesos por unidad.

Pese a eso, aseguró el inconforme, "el recibo del agua no deja de llegar a nuestras casas puntualmente".

Horas después de la concentración, a la que fueron convocados reporteros y fotógrafos, la oficina de Comunicación Social de la delegación Cuajimalpa difundió un boletín con declaraciones de Ruiz, quien demandó "no politizar" el problema, pues la escasez de agua no es problema exclusivo de Cuajimalpa y tiene relación directa con la temporada de estiaje.

"Es inmoral convertir esta problemática en política y partidizarla", señaló el funcionario, quien minimizó la protesta llevada a cabo por "un pequeño grupo de habitantes que se dijeron originarios del pueblo de San Lorenzo Acopilco".

Añadió que su gobierno ha tenido un diálogo permanente con los inconformes, e incluso aseguró que el año pasado "ellos, los que encabezan esta protesta (René Angeles, Maximiliano Reyes y Margarita Negrete, priístas de Cuajimalpa), impidieron que se conectara una tubería que llevaría el líquido a los habitantes de San Lorenzo Acopilco, pretextando que esa agua iba a ser trasladada a otro lugar, lo cual no era cierto.

"De esto se informó puntualmente a los vecinos, y nos comprometimos a que el único beneficiario iba a ser San Lorenzo Acopilco. También se informó a la población quiénes evitaron la conexión de ese ducto de agua, por lo cual, si a alguien habrá que reclamar es a quienes con fines políticos se opusieron a la conexión."

Susana González