Usted está aquí: sábado 18 de junio de 2005 Capital El problema se originó en fuentes de suministro externas, afirma el director del SACM

El problema se originó en fuentes de suministro externas, afirma el director del SACM

La secretaria de Medio Ambiente del Distrito Federal, Claudia Sheinbaum Pardo, pidió no utilizar la escasez de agua con propósitos políticos, y aseguró que luego de los problemas que se presentaron durante los primeros días del mes, debido a una disminución de cerca de 4 mil litros por segundo del caudal que recibe la ciudad de fuentes externas, el servicio se ha normalizado e incluso se incrementó el volumen en más de un metro cúbico.

La funcionaria explicó que para garantizar el abasto de agua en la ciudad, el Gobierno del DF ha apostado fundamentalmente a la reducción de fugas y el mantenimiento de pozos, lo que ha hecho inecesario recurrir a fuentes externas adicionales, pero previno sobre el crecimiento de la población en municipios como Chalco y Chimalhuacán, de hasta 7 por ciento anual -en el DF es de 0.3 por ciento-, y advirtió que no puede seguir al mismo ritmo, porque "sí puede haber un riesgo importante de desabasto de agua".

En cuanto a las posibles fuentes externas que podrían utilizarse para aumentar el caudal a la ciudad, refirió que la más viable es el acuífero del valle de Tula, lo que se tendría que trabajar con la Comisión Nacional del Agua (CNA) y los estados de Hidalgo y México.

Germán Martínez Santoyo, director general del Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACM), explicó que los problemas de desabasto se originaron fundamentalmente en las fuentes de abastecimiento externas, como el sistema Cutzamala, la cuenca del río Lerma, La Caldera y Quetzalcóatl, lo que afectó el almacenamiento en 10 tanques que abastecen a las delegaciones Azcapotzalco, Benito Juárez, Miguel Hidalgo, Alvaro Obregón, Cuajimalpa, Tlalpan, Coyoacán, Cuauhtémoc e Iztapalapa; de ésta, tres tanques en el Cerro de la Estrella y uno en La Caldera; un tanque en el cerro del Peñón, que afectó a Venustiano Carranza, y otro en el cerro de Zacatepetl, que surte a Coyoacán.

En el caso del abastecimiento del río Lerma, operado por el SACM -el resto los opera la CNA-, explicó que debido a la prolongación de la temporada de estiaje se incrementó en 15 por ciento la demanda en las zonas agrícolas del valle de Lerma, lo que implicó una reducción del caudal hacia la ciudad de México.

Angel Bolaños Sánchez

 
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