Impugna economista declaraciones de funcionario que atribuyó el hecho al actual gobierno
En medio siglo se redujo 65 por ciento la pobreza en el país, afirma experto
Las remesas son poco significativas en hogares pobres, asegura Miguel Székely
La reducción de la pobreza es una tendencia continua desde hace 50 años y no un logro sólo de esta administración, asentó el economista Jonathan Heath, director de Estudios Económicos del Grupo HSBC, luego de que el subsecretario de Prospectiva, Planeación y Evaluación de la Secretaría de Desarrollo Social, Miguel Székely, atribuyó esa situación a la estabilidad económica, crecimiento y expansión de los programas sociales, particularmente el de Oportunidades, impulsados por el actual gobierno.
En la mesa Análisis de las cifras de la pobreza, realizada en El Colegio de México, Heath apuntó que en medio siglo ha habido un decremento de 65 por ciento en la pobreza, pero, acotó, el ambiente de estabilidad por sí solo no reduce la pobreza. Reconoció que evitar las crisis económicas y el crecimiento de 1.6 por ciento per cápita del PIB en este sexenio ha contribuido a la reducción de la pobreza, "pero ello no es determinante"; además al gobierno le ha faltado buscar un mayor crecimiento del PIB.
Durante el foro, Székely comentó que entre 2002 y 2004 el crecimiento económico, la estabilidad y la expansión del gasto social contribuyeron a que la pobreza alimentaria y la del patrimonio tuvieran una tendencia a la baja y se situaran en 47 y 17.3 por ciento, respectivamente. La desigualdad no ha aumentado significativamente ya que el ingreso per cápita y el consumo privado aumentaron, a lo cual también ha contribuido una menor inflación, que en 2002 fue de 4.7 por ciento y en 2004 fue de 4.5 por ciento y el aumento del salario real.
Destacó que el incremento del salario real fue mayor entre las personas sin instrucción educativa, pues recibieron 5.6 por ciento si se comparan los precios vigentes entre 2002 y 2004, mientras quienes tienen primaria y secundaria tuvieron 3.2 por ciento; preparatoria, 1.1 por ciento, y con "más de preparatoria" 2.1 por ciento.
Además, la cobertura del programa Oportunidades aumentó en 800 mil beneficiarios y llega ya a 5 millones de personas, "la derrama económica del programa aumentó en 49 por ciento ya que pasó de 17 millones de pesos en 2002 a 25.3 millones de pesos".
De acuerdo con los datos del funcionario las remesas son poco significativas en los hogares pobres, ya que de cada 100 dólares transferidos sólo tres llegan a los más pobres, y 76.2 llegan a los hogares que no son pobres.
Insistió en que la reducción en tres puntos porcentuales en la pobreza alimentaria durante el periodo 2002-2004 se debió a la expansión del programa Oportunidades y a la combinación de 25 por ciento procedente de remuneraciones, 9 por ciento de remesas y 17 por ciento por otros factores.
A su vez, el subsecretario de Desarrollo Urbano y Ordenación del Territorio, Rodolfo Tuirán, expuso sus dudas en torno a la procedencia de las remesas, las cuales "no son únicamente familiares" como lo establece el método de medición del Banco de México. La institución establece que los ingresos son de 20 mil millones de dólares por ese concepto, cifra que no es cercana a los 9 mil 653 millones de dólares que se desprenden de los informes de la oficina de Análisis Económico de Estados Unidos y que incluyen las remesas privadas y otras transferencias.
A partir de 2001, explicó, los montos manejados por ambas instituciones se disparan significativamente, "ambas deben determinar las diferencias tan escandalosas y que a veces llegan a los 7 mil millones de dólares". Además, se esperaría un "cierto acompañamiento" entre la migración y las remesas, ya que anualmente migran 485 mil personas, de las cuales entre 80 a 85 por ciento son indocumentados. Asentó que uno de cada 20 mexicanos reciben los beneficios de las remesas y 6 de cada 10 hogares que tienen ingreso por ese medio no son pobres.
Destacó que 75 por ciento de los ingresos por remesas van a los hogares no pobres y los que están en extrema pobreza no reciben ni 12 por ciento de dichos ingresos, por lo que se atrevió a presentar su hipótesis de que en caso del retiro de las remesas la pobreza aumentaría únicamente en 1.5 por ciento, es decir, en 388 mil personas.