Consternación de intelectuales y académicos por el deceso de la investigadora
Valorar la creatividad prehispánica como arte, máximo legado de Beatriz de la Fuente
Sus restos fueron cremados y las cenizas depositadas en una iglesia del Pedregal
Ampliar la imagen Beatriz de la Fuente deja una importante labor intelectual que deber�continuar sus disc�los FOTO Archivo La Jornada Foto: Archivo La Jornada
El legado más importante que deja la investigadora Beatriz de la Fuente, quien falleció este lunes, es haber rescatado y valorado las esculturas, murales y piezas prehispánicas como arte, destacó María Teresa Uriarte, directora del Instituto de Investigaciones Estéticas de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) y una de sus más distinguidas discípulas.
Entre su vasta labor, durante más de 15 años De la Fuente se dedicó, de manera multidisciplinaria, a rescatar una historia del arte prehispánico con el título Pintura Mural Prehispánica en México, proyecto al que se integrarán otros estudios que deja pendientes y que tocará a sus discípulos proseguir.
De la Fuente fue notable investigadora, generosa con sus alumnos, sabia como mujer y académica, y una manera de rendirle homenaje -dijo Uriarte- sería ''el reconocimiento de que el Museo Nacional de Antropología es el museo nacional de arte prehispánico mexicano.
''Su trabajo fue demostrar que detrás de las diversas manifestaciones plásticas prehispánicas existe un deseo y voluntad estética de los pueblos antiguos.
''Fue discípula directa de Justino Fernández. Introdujo en México y aplicó realmente por primera vez la metodología de la historia del arte. La historia se basa mucho más en los hechos, pero ella como historiadora del arte supo desarrollar una lectura de las imágenes, ese vínculo entre alguien que vivió hace muchos siglos y sus manifestaciones plásticas."
La obra monumental que De la Fuente inició hace más de 15 años (Pintura Mural Prehispánica de México), está conformada por una serie de estudios y sus respectivos catálogos. Lo publicado hasta el momento integra las áreas de Teotihuacán, Bonampak y el libro de estudios del área maya.
Entre las investigaciones que deja pendientes y de próxima publicación, comentaron por separado Luciano Cedillo, titular del Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) y Uriarte, se encuentran ''los estudios sobre Oaxaca, Veracruz, el catálogo de la pintura mural en el área maya, así como un estudio sobre la pintura mural del antiplano de México, después de la caída de Teotihuacán".
De Beatriz de la Fuente, hay que destacar tres aspectos, sintetizó Eduardo Matos Moctezuma. ''Uno, su enorme presencia como investigadora del mundo prehispánico, en particular sobre su arte; segundo, la integración del corpus de la pintura mural precolombina. Obra de investigación impresionante, en la que conjuntó diversos especialistas y, tercero, su carácter de formadora de nuevas generaciones, cuyos frutos están a la vista".
De la Fuente, destacó el historiador Miguel León-Portilla, se distinguía por su ''profesionalismo y responsabilidad'', y por su capacidad para promover e impulsar a investigadores y conformar con ellos importantes equipos de trabajo, agregó el arqueólogo Rubén Cabrera.
''Ella -dijo León-Portilla- cuidaba mucho lo que hacía, no se lanzaba con teorías. Trabajaba de manera multidisciplinaria. No es una expresión de cajón, pero es una gran pérdida para la UNAM y para México. Todavía dos días antes de morir dio instrucciones de cómo había que presentar uno de los estudios sobre la pintura mural de Monte Albán, Oaxaca."
Forjadora de generaciones
Como persona, expresó el pintor Raúl Anguiano, ''era muy agradable, guapa, sencilla, cordial, nada vanidosa, una verdadera amiga; fuimos colegas en la Academia de Artes. Desgraciadamente ya había dejado de asistir hace algún tiempo, pero sus investigaciones sobre los olmecas y los mayas de Bonampak son interesantísimas y brillantes".
Para Ramón Xirau y Adolfo Sánchez Vázquez, será difícil superar el trabajo que realizó en el campo de la investigación del arte prehispánico.
''Es una pérdida irreparable para la cultura mexicana y en general para la cultura estética", coincidieron en señalar. Ella, añadió Sánchez Vázquez, ''como una de las grandes precursoras en el estudio del arte prehispánico, dejó una escuela, una huella profunda, porque su trabajo no es solamente lo que aporta con sus investigaciones, sino los campos de posibilidades que abre para continuar los estudios en ese terreno".
Su mayor aportación, explicó por su parte Gerardo Estrada, titular de la Coordinación de Difusión Cultural de la UNAM, ''fue el vincular la antropología y la arqueología con el arte y la estética. Demostró que más allá de piezas históricas o arqueológicas, los objetos prehispánicos tenían un valor artístico per se. Sus grandes trabajos sobre el muralismo prehispánico son una aportación tanto en el campo de la antropología como en el de la historia del arte. Formó muchas generaciones y prácticamente creó una escuela en el país, lo que ha permitido que avancemos muchísimo y reconozcamos el valor, ya no sólo histórico sino de belleza de mucho de nuestro patrimonio. En fecha próxima -agregó Estrada- vamos a publicar un libro que ella alcanzó a terminar sobre el muralismo en las culturas maya y olmeca, y el Instituto de Investigaciones Estéticas le hará un homenaje".
De igual manera será reconocida por el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes y el INAH, dijo Sari Bermúdez, quien definió a De la Fuente como '' una de nuestras más distinguidas mexicanas a escala universal".
Por su parte, Reyes Tamez, secretario de Educación Pública, anunció que también, junto con El Colegio de México, se organizará otro homenaje.
En tanto se realizan esos reconocimientos, ayer, antes de iniciar el periodo de sesiones de la Cámara de Diputados, se guardó un minuto de silencio en memoria de la notable investigadora.
Como se informó ayer en estas páginas, entre las distinciones, premios y reconocimientos a la especialista figura la presentación, en abril pasado, del libro Acercarse y mirar: homenaje a Beatriz de la Fuente, integrado por más de 20 textos de diversos especialistas. Volumen que fue comentado, entre otros, por Sergio Raúl Arroyo, quien esa ocasión destacó: ''Muchos de los conceptos que hoy manejamos como parte de lo que pudiera entenderse como imaginario común, tienen origen e inspiración en la labor académica de Beatriz de la Fuente, trabajo que rompe con las vertientes meramente arqueológicas y que recupera las formas y figuraciones como elementos centrales de la condición humana".
Entre sus esfuerzos estuvo ''sistematizar una iconología y una iconografía para poder descifrar los códigos primigenios de las creaciones plásticas creadas fuera del canon occidental".
El cuerpo de Beatriz de la Fuente fue cremado ayer a las 13 horas y sus cenizas depositadas en una iglesia del Pedregal, donde hubo una misa a las 20 horas.