Descarta la PGR que los zapatistas tengan vínculos con acciones del narcotráfico
Alertan ONG sobre los paramilitares
Denuncian movilizaciones de esas agrupaciones armadas
Organizaciones como el EZLN o el EPR "manifiestan inconformidades sociales", pero no son terroristas: SIEDO
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Ni�e la comunidad de Roberto Barrios FOTO Jos�arlo Gonz�z
Foto: Jos�arlo Gonz�z
San Cristóbal de las Casas, Chis., 24 de junio. Organizaciones no gubernamentales (ONG) que trabajan en Chiapas alertaron sobre el "incremento en la actividad de grupos paramilitares en regiones de influencia zapatista".
Agregaron que de igual forma se han reportado movimientos del Ejército Mexicano, que constituyen "la mayor actividad militar" desde el retiro de siete posiciones, en 2001, solicitado por el Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN).
En un comunicado firmado por los centros de Derechos Humanos Fray Bartolomé de las Casas y Fray Pedro Lorenzo de la Nada, la Red de Defensores Comunitarios, la Comisión de Apoyo a la Unidad y Reconciliación, Las Abejas y otros 17 organismos, demandaron a los gobiernos federal y estatal "no interferir" en la consulta que realiza el EZLN.
Los organismos lamentaron que el gobierno "siga ignorando la vigencia de las demandas zapatistas, despreciando la lucha por la autonomía, los derechos y la cultura de los pueblos indígenas". Ante la alerta roja declarada por el grupo rebelde, "la respuesta de los gobiernos federal y estatal ha sido minimizar la inseguridad".
GUSTAVO CASTILLO GARCIA
Los grupos armados que operan en México, como los ejércitos Zapatista de Liberación Nacional (EZLN) y Popular Revolucionario (EPR), "manifiestan inconformidades sociales y no tienen nexos con la producción o trasiego de enervantes", señalan informes de la Procuraduría General de la República (PGR).
La Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada (SIEDO) considera que grupos como el EZLN "tampoco pueden ser considerados terroristas, pues no reúnen las características establecidas para ello por la Organización de Naciones Unidas".
En todo caso, señalan los informes, en algún momento estuvieron vinculados con el tráfico ilegal de armas, "pero eso ya fue superado, y ahora están concentrados en la resolución de sus demandas sociales, y sólo se les da seguimiento como organizaciones armadas".
Los informes oficiales reconocen que si bien "algunas acciones de un grupo armado se pueden confundir con actos de terrorismo, cada uno tiene características especiales, y se debe analizar su ideología e intereses para determinar si son una cosa u otra; pero en México, incluso la colocación de explosivos en sucursales bancarias son meras acciones para llamar la atención de los órganos de gobierno".
Los informes de la procuraduría refieren que "en ocasiones se ha llegado a considerar que las explosiones en Morelos, Michoacán y el Distrito Federal supondrían actos terroristas, pero hasta el momento las investigaciones realizadas no han avanzado más allá de actas circunstanciadas y se ha dado seguimiento a petardazos colocados por gente inconforme; lo que se está haciendo es un rastreo de la fábrica que elaboró los explosivos utilizados".
Ante ese panorama, indicaron funcionarios de la SIEDO, la PGR sólo espera ante la alerta roja zapatista y deja que la Secretaría de Gobernación sea la que se encargue del asunto, en tanto se determina si en algún momento hubiera delitos del orden federal.