Estrechar el conducto y reconstruir el himen, las operaciones más frecuentes
Cirugía estética vaginal, moda que atrae a miles de mujeres a Canadá y EU
No se advierte de los riesgos, denuncia la Sociedad Estadunidense de Cirujanos Plásticos
Ampliar la imagen Postal de 1900, cuyo t�lo es Die Jungfrau, de autor an�o FOTO Tomada del libro amor y deseo/ editorial blume Foto: Tomada del libro amor y deseo/ editorial blume
Ottawa, 27 de junio. Las liposucciones en el abdomen, los estiramientos faciales y los implantes en los senos tienen sus seguidores, pero la nueva moda va mucho más lejos: cada vez más mujeres optan por la cirugía estética vaginal.
Estas intervenciones se han puesto de moda en pocos años. Según la Sociedad Estadunidense de Cirujanos Plásticos, en Canadá y Estados Unidos surgió una docena de clínicas que ofrecen estas intervenciones, lo que ha atraído miles de clientas de todo el mundo.
En Francia, Suecia, Indonesia, Chile, Australia y República Dominicana los médicos han comenzado a trabajar en esta área también.
Las operaciones más comunes, según los cirujanos, incluyen estrechar la vagina para aumentar el placer sexual de la mujer, inyectar grasa en los labios mayores y reconstruir el himen, sobre todo en mujeres con interés de casarse vírgenes.
"Lo vengo haciendo desde hace cuatro o cinco años, pero de repente el negocio se ha incrementado", afirmó Roy Jackson, obstetra y ginecólogo de Vancouver, especialista en cirugías estéticas vaginales.
Las primeras pacientes en someterse a estas operaciones eran tratadas por incontinencia o complicaciones derivadas de dar a luz. Algunas regresaron y afirmaron que su vida sexual había mejorado notoriamente, dijo el doctor David Matlock, de Los Angeles.
Gracias al boca a boca y con poca publicidad, Matlock se vio de pronto ante muchas mujeres que le solicitaban estrechar su vagina, relató. Otras llegaban con revistas pornográficas y con la petición de que su zona genital se pareciera a las que aparecían en la fotografías, continuó.
Matlock destacó que ha tratado desde adolescentes a abuelas, desde amas de casa hasta abogadas.
"No me gusta cómo se veía mi vagina ni cómo me hacia sentir", afirmó una estudiante de 21 años que se estilizó los labios internos hace seis semanas. "Uno ve todas esas chicas en (la revista) Playboy y la mía no lucía como ésas", destacó.
Desde entonces la joven declaró sentirse "más confiada" y "muy feliz". Su madre ingresó al quirófano un mes después.
Pero Leroy Young, vicepresidente del comité de tendencias emergentes de la Sociedad Estadunidense de Cirujanos Plásticos, advirtió que las cirugías estéticas vaginales tienen riesgos.
"Matlock ofrece (estas cirugías) como un (restaurante) McDonald's en el Instituto de Rejuvenecimiento Vaginal y las ha vendido como forma de mejorar la vida sexual, en vez de como un procedimiento ginecológico para solucionar problemas, aunque no dice mucho sobre los inconvenientes", destacó. Agregó que el uso del término "láser" es un engaño. "Lo único que se hace es una incisión", puntualizó.
Young advirtió sobre problemas en la cura por cicatrizaciones dolorosas, posibles daños en los nervios, que provocarían menos sensación, e inclusive constricciones que pueden impedir futuras copulaciones. Y como en cualquier intervención quirúrgica, podrían producirse daños en otros órganos y surgir complicaciones debido a la anestesia.