''Si el partido se equivoca en la elección podemos perder''

En AN, alguien sabotea a algunos aspirantes: Barrio

Reconoce que el factor Marta Sahagún afecta al blanquiazul

CLAUDIA HERRERA Y BLANCHE PETRICH

Si el Partido Acción Nacional (PAN) se equivoca en la elección de su candidato a la Presidencia, ''podemos perder'', advierte Francisco Barrio Terrazas y recomienda a sus correligionarios ''estar bien conscientes de esa posibilidad''.

Esa equivocación se está perfilando en esta etapa de la contienda interna, según cuenta a lo largo de una entrevista con La Jornada, días antes de que tomara la decisión, anunciada ayer, de abandonar la competencia por la candidatura presidencial del blanquiazul.

''Alguien'' en el PAN está haciendo un ''trabajo'' que sabotea la promoción de algunos aspirantes a la candidatura presidencial y favorece la de otros, denunció el ex gobernador chihuahuense. ''Llevo al menos tres actos, en Guadalajara, Querétaro y Tlaxcala, donde claramente podemos hablar de boicot. No puedo aseverar que lo armó fulano o que vino de tal oficina, pero sucedió. Fueron casos en los que, habiendo confirmado una cantidad considerable de asistentes, llegamos y no había nadie. Acaba uno convertido en el hazmerreír.''

Abiertamente crítico ante el rumbo que ha tomado su partido, el diputado federal reconoce que el ''factor Marta Sahagún'' y los escándalos de corrupción en los que se han visto involucrados sus hijos, los hermanos Bribiesca Sahagún, pesan negativamente para el panismo en 2006. ''En muchos estados nuestra credibilidad está muy dañada. Naturalmente estos asuntos como los que ustedes mencionan nos afectan. Ni siquiera está claro si hay o no sustento en lo que se dice, pero finalmente son temas que calan, que dejan en la gente un sustrato de duda, de malestar, independientemente si a la postre resultan o no justificados.''

''Fox, el mandatario más golpeado''

Barrio confiesa que llevaba días, semanas, dándole vueltas al problema de la desigualdad en la competencia por la candidatura panista. ''Estoy viendo cómo procedo'', decía el pasado sábado 2 de julio por la mañana, frente a una taza de café ya frío, mientras veía desde el ventanal de un restaurante cercano al Angel de la Independencia cómo a cuentagotas la gente se congregaba para la llamada fiesta de la democracia.

Pero incluso en ese momento aclaró que dejaba fuera de su balance pesimista la figura del presidente Vicente Fox. ''Es el mandatario más golpeado, más criticado desde que yo tengo memoria. No veo un ánimo adulto para la crítica. Si lo hubiera no tendría empacho en criticarlo.''

Hecha esa reserva, se lanzó a fondo contra la conducción del PAN: ''Ahí hay sin duda un elemento de inequidad. Estamos en un escenario en donde parece que podría ser meramente el dinero el que determinará los resultados''. Le preocupaba, sobre todo, la operación política ''inequitativa'' que salía de ''algunas oficinas públicas federales y de instancias locales, particularmente en delegaciones. No lo veo tanto en oficinas de la ciudad de México, sino en delegaciones en el interior del país. No tengo pruebas, no puedo asegurar que en tal o cual oficina se esté haciendo campaña en horas hábiles o se estén utilizando las instalaciones públicas o los equipos o los teléfonos. Pero sí hay muchos casos que apuntan en esa dirección.''

-¿A favor de quién?

-En su gran mayoría a favor de Santiago Creel; quizá no la totalidad de los casos, pero sí la gran mayoría.

-¿Tiene ejemplos concretos?

-He puesto una denuncia hasta ahora relativa a lo que ocurre en Zacatecas, un acto muy concreto de parcialidad. Estoy investigando, tratando de documentar algunos otros.

-¿Le han obstaculizado algún acto?

-Sí. En Guadalajara, Querétaro, Tlaxcala. Pero tampoco tengo elementos para decir ''vino de ahí''.

-En el último Consejo Político, cuando fue electo Manuel Espino, se definieron dos líneas: una, que no percibe la gestión foxista como motor de una nueva victoria del PAN, y otra, la que impulsan el propio Espino y Marta Sahagún, que apuesta al foxismo para continuar en el poder.

-Yo no percibo corrientes internas, aunque sí puede haber visiones de futuro diferenciadas. Yo he venido machacando en que tenemos que actuar en esta elección interna, en todo nuestro trabajo partidista, en las elecciones de gobernador que tenemos con un apego puntual a lo que son nuestros principios. Sí me preocupa que en distintas partes de la República hay desviaciones de lo que ha sido nuestra filosofía política, lo que ha sido sobre todo la ética partidista. De no corregirlo nos puede hacer un daño importante más allá de la postura que tomemos frente al gobierno.

''Tampoco soy muy partidario de erigirnos en críticos del gobierno, no porque no considere que haya cosas que merezcan ser señaladas, sino porque me parece que hoy día no hay un equilibrio en cuanto a los juicios. Veo al presidente Fox como el más señalado, más golpeado y más criticado desde que yo tengo memoria. Por momentos me parece que hay un ambiente de linchamiento.''

-¿A qué tipo de desviaciones se refiere?

-En ciertas partes del país va ganando la lógica de ir por el poder, que no fue la lógica del PAN por décadas. El partido era para luchar por incorporar a la vida pública de México un movimiento ético, por ir construyendo en el país condiciones que permitieran mejores niveles de vida para todo mundo. Eso era lo que nos movía, nos motivaba. Hoy me preocupa que, cada vez más, lo único importante es ganar tal o cual elección y me parece que en determinados momentos se nos olvida ya para qué queríamos esa posición pública.

-¿Y qué le parece la creciente influencia de Marta Sahagún en la presidencia del PAN y en la administración pública?

-Ella está en un órgano de consulta del presidente del PAN, no es un órgano de decisión. Es preferible que esto se haga de manera institucional.

-¿Quiere decir que antes influía, pero no por las vías institucionales?

-Me parece que es preferible que lo haga en un órgano donde está otra gente y que sea de una manera tan transparente.

-¿Al PAN lo golpean escándalos como el de los hijos de Marta Sahagún? ¿Cree que esto haga caer al partido a una tercera posición en la votación?

-Veo muy poco probable ese escenario.

-¿Por qué está tan seguro?

-Porque el PAN tiene un voto duro que le da un margen de maniobra importante. Este no se modifica en plazos tan cortos. Tampoco podemos jugar y arriesgarlo.

-Usted tiene un handicap en contra, porque prometió meter a la cárcel a los peces gordos y ninguno de ellos está detenido.

-Primero, la promesa no fue mía. Ni siquiera la frase es mía. Me hicieron ene veces esa pregunta y se acabó vinculandola conmigo. Ahí yo tengo una de mis mayores fortalezas. Lo único que podía hacer y debía hacer era denunciar ante la PGR, y no hay un solo caso, ¡ni uno solo!, que me puedan decir lo tuviste y no lo denunciaste, a pesar de que en ocasiones fui objeto de presiones. ¿Qué pasó después con esos casos en la PGR, en juzgados, en tribunales? De eso yo no puedo responder.

-En la Cámara de Diputados usted era uno de los responsables de realizar las reformas estructurales.

-Yo no puedo responder por el voto del PRI o del PRD. Hay un cierto límite hasta donde usted puede llegar en el cabildeo. ¿De qué fui responsable? Del voto de mi bancada.

-Usted ha dicho que el gobierno no le ayudó mucho en esta tarea.

-No lo he dicho. Digo que yo me propuse hacer ese trabajo político de negociación de las reformas de una manera diferente.

-¿Lo hizo mal el gobierno?

-Cada quien tiene su manera de matar pulgas. Yo tengo la mía. Lo hice en Chihuahua con un Congreso local donde no teníamos mayoría y nos funcionó. Allá siempre negociábamos las reformas antes de presentarlas.

-Qué bueno que menciona Chihuahua, porque fue un laboratorio del país: el fraude, la resistencia cívica, la transición, el triunfo del PAN y luego el voto de castigo, la derrota y el retorno del PRI. ¿No se vive ese momento a nivel nacional?

-Desde luego que esa posibilidad existe. Si ahora no vamos tomando una serie de decisiones adecuadas, por supuesto que podemos perder la Presidencia de la República, y una de esas decisiones es la elección de candidato. Si nos equivocamos, ahí podemos perder.