Entrevista a FELIPE CALDERON HINOJOSA, PRECANDIDATO PRESIDENCIAL DEL PAN

El Presidente desea que me vaya bien, él me lo dijo

Delicado pero superable, el momento actual del partido

Aunque renuente a la autocrítica partidista, el político michoacano se da tiempo para afirmar que los panistas jamás han sido amigos del abuso y el dispendio, "y eso puede pesar" en el ánimo de militancia y electores

CLAUDIA HERRERA BELTRAN

La elección del candidato presidencial del PAN no es un asunto de familias tradicionales, sino de los "principios y valores" que el blanquiazul ha enarbolado en sus 66 años de historia, afirma Felipe Calderón Hinojosa.

Heredero de la generación de fundadores de Acción Nacional -su padre, Luis Calderón Vega, fue contemporáneo de Manuel Gómez Morín, historiador del partido y diputado-, el michoacano compite con una doble tarea: revivir los valores del panismo y recobrar los espacios perdidos ante el avance de los pragmáticos de ese partido.

De atacar de forma abierta a Santiago Creel e intentar atraer los reflectores cuestionando al jefe de Gobierno capitalino, Andrés Manuel López Obrador, Calderón ha pasado a una postura cautelosa, con el argumento de que su partido enfrenta una situación delicada.

Dejó por la paz a Creel, su competidor más fuerte, pero no así a Alberto Cárdenas Jiménez, a quien en broma define como caballo afroamericano, en alusión a su supuesta condición de caballo negro en la competencia interna, y quien, dice Calderón, no ha repuntado en encuestas.

"Sería lesivo para el Presidente y para el propio Alberto considerarse un plan B si se supone que hay un plan A", señala el ex secretario de Energía.

De la tarea de Vicente Fox -quien lo regañó públicamente por destaparse, por lo que Calderón dejó la Secretaría de Energía y se distanció del mandatario- en este proceso, considera que le corresponde hacer su parte como "buen presidente y nosotros tenemos que hacer la nuestra".

Calderón ha escalado peldaños con rapidez en el blanquiazul; se convirtió en el presidente más joven del partido, a los 33 años, y fue coordinador de la bancada panista en la Cámara de Diputados.

La bandera de su precampaña es el rescate de los "viejos principios" del PAN como una nueva opción política. En su discurso de registro retomó el lema "ganar el gobierno sin perder el partido", que fue el sello de su gestión en la directiva.

Y cómo no va a recurrir a ese discurso, si cuentan que de niño conoció la historia y la política del país leyendo La Nación, el órgano oficial del PAN. A propósito del registro de su precandidatura, Calderón conversó con este diario.

Muchos problemas por corregir

-El PAN está en una situación delicada, como indican los resultados en el estado de México y Nayarit. ¿Qué problemas debe corregir?

-Son muchos. Todos en el partido, en el gobierno y los precandidatos tienen que revisar a conciencia las cosas que hay que corregir. En el PAN hay problemas de organización, de unidad y de financiamiento. También hay un dato para subrayar. En las contiendas del estado de México y Nayarit finalmente el que decidió fue el dinero, el derroche del PRI, y me parece que México pierde si permitimos eso.

-Eso es del PRI. ¿Cuál es la autocrítica del PAN? Usted no es autocomplaciente.

-Pero tampoco soy masoquista y no me voy a dedicar a convertir esta reflexión en un ejercicio de autoflagelación, de manera que yo personalmente voy a contribuir, como se ha planteado en el PAN, a generar un proceso de reflexión.

-¿Se está cayendo el PAN?

-Voy a citar a Carlos Castillo Peraza (el fallecido ideólogo y ex dirigente nacional de ese partido): hemos visto tantas veces la esquela del PAN en los periódicos que podemos empezar a creer en la inmortalidad. La verdad es que no se hunde, tiene un momento delicado, pero absolutamente superable.

-En el PAN dicen que se han visto desplazadas las familias tradicionales y que es creciente la influencia de grupos de ultraderecha. ¿Esto afecta al partido?

-No es un asunto de familias tradicionales, es una cuestión que tiene que ver con principios y valores, y también debe estar en la reflexión en qué medida el PAN refleja a los ciudadanos los principios y valores por los cuales fue creado.

-¿Cree que se han hecho a un lado estos principios y valores con tal de conquistar el poder?

-No lo quisiera afirmar, por eso es importante que se haga esa reflexión del tema.

-Generaron mucho debate los espots de Creel. ¿Afectaron la equidad en la contienda?

-Un poco lo que reflexiono es lo que señalamos en los procesos externos, en cuanto a la equidad y el gasto en las campañas. No veo por qué no se deba aplicar en lo interno.

Sé que mi opinión es importante

-¿Por qué es tan cauteloso en sus comentarios?

-Porque me preocupa el PAN. Sé que mi opinión es importante y que en este momento se requiere un gran esfuerzo para mantener al partido unido y poder reorganizarlo o relanzarlo.

-¿Hay algún temor? ¿Cree que por hablar les vaya peor en 2006?

-Sí pienso que puede ser tomada con gran sensacionalismo cualquier cosa que diga y que eso siga golpeando no sólo el ánimo, sino que vaya minimizando la capacidad de unidad y de cohesión que necesita vitalmente el propio partido.

-Desde que abandonó la Secretaría de Energía parecía que los dados estaban cargados, que el Presidente ya tenía ciertas simpatías y usted no estaba incluido. ¿Qué opina?

-Como esto no es cubilete, yo estoy habituado a competir en cualquier circunstancia. Espero que ahora que se inicia el proceso interno, con los registros de cada uno de nosotros podamos construir esas condiciones de equidad.

Fox no tiene precandidato

-Algún peso debe tener la opinión del Presidente y su esposa, Marta Sahagún.

-Reitero lo que el propio presidente Fox me ha dicho: no tiene precandidato favorito, será muy respetuoso del proceso interno y desea que me vaya bien. Independientemente de eso, la verdad es que la comisión electoral interna tiene en sus manos la posibilidad de manejar un proceso equitativo y el comité nacional también.

-Hay contrastes: un Santiago Creel muy presente en los medios, un ex secretario de Medio Ambiente que se tardó mucho tiempo en renunciar y usted con pocos recursos. ¿Cómo cae eso en el ánimo del panismo?

-No veo que tenga ningún resultado positivo. No quisiera hablar mal de nadie, pero me parece que el panista nunca ha sido amigo del dispendio, del abuso, y eso puede pesar de manera adversa en el ánimo de la gente.

-¿Tendrán los escándalos en torno a la familia de Sahagún consecuencias para el PAN?

-No lo sé, pero no voy a anticipar vísperas hasta que no haya algo verdaderamente claro y sólido. Se ha hecho mucho ruido y pocas nueces en ese tema, porque hay especulaciones, señalamientos, críticas, algunas fuertes, pero no hay evidencias.

-En cuanto a la influencia de Marta Sahagún, ¿cree que ha sido positiva o negativa?

-Ella siempre ha tenido una militancia activa en el PAN, incluso desde antes de conocer a Vicente Fox. La incidencia de Marta Sahagún dentro del partido es menor a la que se le ha querido atribuir. Tiene incidencia importante por ser militante destacada, que desempeña su propio liderazgo, pero nada más.

Antes que errores, desafíos

-¿Dónde ubica los errores de este gobierno?

-Más que errores, desafíos. Primero en estado de derecho, legalidad, respeto a la ley y transformación del sistema de seguridad, que ha rebasado a todos: al PAN, al PRI, al PRD. Hace falta generar empleos, gran desarrollo tecnológico y calidad educativa. Los estándares internacionales están marcando que debido al rezago de décadas México es un país de reprobados.

-Algunos lo atribuyen al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación. ¿Qué haría con él si llega a la Presidencia?

-Tiene que haber una relación constructiva y toda reforma educativa debe partir de un acuerdo con los maestros. Yo crearía un sistema de incentivos para ellos.

-¿Pero esto se puede hacer con el cacicazgo de Elba Esther Gordillo de por medio?

-Yo no lo quisiera calificar así, pero sea el liderazgo de Elba Esther o del de los telefonistas, todos los ámbitos de la vida sindical tienen un peso y debe llegarse a una negociación digna y productiva con todo mundo.

El caballo afroamericano, sin movimiento en las encuestas

-Alberto Cárdenas se maneja como el caballo negro, que viene de atrás y presume su relación con Fox. ¿Eso pudiera pesar para que él representara el plan B y se imponga como candidato?

-La verdad no. En todo caso será el caballo afroamericano. Tiene varios meses de señalar eso, pero la verdad es que en las encuestas internas no se refleja movimiento. Es muy descriptivo e indicativo de lo que verdaderamente está ocurriendo en su propio arranque de campaña, del que ustedes ya tienen reporte.