Demandan a Kirchner acabar con la impunidad del caso
Argentina: conmemoran aniversario 11 de atentado contra mutual judía
Ampliar la imagen Amigos y familiares de las 85 v�imas del atentado contra la Asociaci�utual Israelita Argentina, ayer durante la conmemoraci�el und�mo aniversario del crimen FOTO Ap Foto: Ap
Buenos Aires, 18 de julio. Acusaciones de "traidores, mentirosos, oportunistas" al ex presidente Carlos Menem, (1989-1999) su ex ministro del Interior Carlos Corach y otros funcionarios de ese periodo se escucharon hoy durante la conmemoración del undécimo aniversario del atentado contra la Asociación Mutual Israelita Argentina (AMIA), que dejó saldo de 85 muertos, centenares de heridos y una gran destrucción en una zona populosa de esta ciudad.
El dirigente de la AMIA, Luis Grynwald, demandó al presidente Néstor Kirchner la urgencia de la verdad, al advertir que "la impunidad que hoy tenemos es el mejor estímulo para el terrorismo". Kirchner asistió con su esposa Cristina Fernández y miembros del gabinete por tercer año consecutivo a esta conmemoración, cuando aún no se ha logrado encontrar a los responsables y la justicia debió volver atrás todo lo actuado en los últimos 10 años
El juez actuante, Juan Carlos Galeano, quien llevó adelante el proceso, es enjuiciado por graves irregularidades, como el robo de pruebas del juzgado, el pago de 400 mil dólares a un informante de la policía para que involucrara a oficiales de la desprestigiada institución de la provincia de Buenos Aires, entre otros.
Se demandó al gobierno no repetir los errores del pasado y hubo fuertes menciones también al ex presidente Eduardo Duhalde, al ex gobernador Carlos Ruckauf, al ex jefe de la Inteligencia de Estado Hugo Anzorreguy, entre otros, quienes fueron acusados de ser "cómplices" de lo actuado.
Pero ante la ausencia de justicia lo que ahora regresa es la tesis que varios analistas locales consideran como sólo "necesaria" para Israel y Estados Unidos: la pista iraní, con ramificaciones tales como la Triple Frontera (Paraguay, Brasil, Argentina) y hasta Colombia y lo que puede ser utilizado en los caminos de la militarización regional o argumentos para la "guerra preventiva".
En un día muy frío, y después de hacer sonar una estremecedora sirena, exactamente a las 9:53, hora local, la misma en que ocurrió la atronadora explosión que convirtió en escombros a la sede de la AMIA, comenzó el acto con asistencia de los sobrevivientes y familiares de las víctimas, representantes de comunidad judía y de diversos sectores políticos, sociales y humanitarios, en un fuerte reclamo contra la impunidad.
Para el dirigente de la AMIA este atentado responde al "mismo fundamentalismo terrorista que atacó en Nueva York, Madrid y recientemente en Londres".
"Subleva e indigna ver cómo en la Argentina no se encuentran pistas que estuvieron. Se perdieron 10 años", afirmó Grynwald al referirse a la anulación del juicio que hizo perder casi 10 años de tiempo a la justicia y golpeó profundamente a las familias afectadas.
Sergio Burstein, quien habló en nombre de los familiares de las víctimas, fustigó a los ex funcionarios menemistas, a los que responsabilizó por la falta de investigación y las irregularidades en el juicio, que volvió a fojas cero.
Kirchner, cuyo gobierno promulgó un decreto reconociendo la falta de respuesta a las víctimas y comprometiéndose a investigar plenamente el ataque, sostuvo que durante 10 años se estuvo "destruyendo todo, evitando y rompiendo todo tipo de pruebas".
También afirmó que si se hubiera procedido como en otros casos (Londres en los últimos días) se hubiera esclarecido el atentado, pero "aquí lo taparon", dijo refiriéndose al nudo de complicidad entre ex funcionarios y la justicia que construyeron acusaciones falsas.
Los familiares también señalan a la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA) que apoyó al juez Galeano y las hipótesis hoy anuladas por la realidad.
El año pasado el presidente Kirchner ordenó al procurador Esteban Righi activar las causas por presunto encubrimiento en el caso de la AMIA y arbitrar las medidas para investigar el encubrimiento del atentado.
En septiembre pasado la Cámara -después de escuchar toda la probatoria del juicio oral- absolvió a los que figuraban como principales imputados, la mayoría policías de la provincia de Buenos Aires, que si bien podían ser investigados por hechos de corrupción y otros, en este caso estaban involucrados mediante falsas pruebas. También la Policía Federal es señalada por el robo de 76 audiocintas con escuchas telefónicas y por las maniobras para complicar la investigación.
Muchos familiares piden cuentas a Washington y Tel Aviv por las constantes desviaciones del eje del juicio y esperan justicia, pero la mayoría no quiere un final irregular con falsos acusados, lo que sólo significaría "una impunidad eterna".