Existe un problema de comunicación en la FMF, aseguró el ex directivo
Hay confusión en el caso de los dopados: Enrique Borja
Enrique Borja, ex presidente de la Federación Mexicana de Futbol, consideró que el caso de los futbolistas dopados que surgió durante la Copa Confederaciones Alemania 2005 reveló un "problema de comunicación en el organismo", y hasta la fecha "no hay certeza" de lo que ocurrió en realidad, lo que de nuevo reflejó una vez más una mala imagen del balompié mexicano.
Ante la molestia de federativos y dirigentes de equipos que recientemente han manifestado su desacuerdo con la continuidad de Alberto de la Torre al frente de la FMF, y de Ricardo La Volpe como seleccionador nacional, Borja se remontó a la confusión en torno a Salvador Carmona y Aarón Galindo, los jugadores de Cruz Azul que habrían dado positivo en exámenes de antidopaje.
"Pienso que después de ese problema que surgió en la Copa Confederaciones, lo que ha causado todo este gran desorden, este desbarajuste, es la comunicación. Independientemente de que pudo haber una falla en la disciplina, la comunicación fue la que no se canalizó.
"Hay cosas que pueden ser públicas y otras privadas. En eso estoy totalmente de acuerdo, y eso lo entendemos muchos de los que hemos estado en puestos de autoridad, pero la forma en que salen, primero los jugadores, después el cuerpo técnico, después los directivos, yo creo que el proceso se equivocó.
"Sólo hay una forma de comunicar algo, oficialmente y a través de los directivos. Los jugadores y técnicos a la cancha."
Borja enfatizó que la incomunicación tras la expulsión de Carmona y Galindo llega a tal grado, que "yo te digo a ciencia cierta, si preguntas ahorita a todos los de la familia futbolística, a excepción de los que están directamente involucrados, y te dirían que no saben qué pasó. Yo la verdad no sé qué pasó.
"He escuchado opiniones de los del cuerpo médico, de directivos, de La Volpe, de los jugadores, y no puedo dar una opinión. No hay certeza; tan es así, que de alguna manera hemos dejado una impresión muy mala a nivel mundial por lo que está pasando, y por otro lado nos está llamando FIFA a rendir cuentas, y eso quiere decir que ellos tampoco están seguros".
Señaló que sería una falta de ética de su parte comentar si este conflicto es motivo para que se produzcan movimientos en el seno de la FMF, porque "la responsabilidad es una cosa y la culpabilidad es otra".
Acerca de la continuidad de La Volpe, comentó que "en primer lugar la selección no es de un técnico ni de unos directivos, sino del país que pone a sus jugadores, y el técnico depende de los resultados, por lo que opinó que los federativos deberían sentarse a analizar para tomar medidas. "Tiempo siempre habrá, así que vale la pena analizar, porque ya se mezcló lo deportivo, las confrontaciones entre directivos, jugadores y técnicos, los medios, el público, y eso no lleva a nada bueno, porque lo que el futbol requiere es unión", concluyó.