México, trampolín de la industria del sexo: Ulloa
México se ha convertido en país de origen, tránsito y destino de mujeres y niñas para la industria del sexo en España, Japón, Holanda, Alemania, Grecia, Canadá y distintas ciudades de Estados Unidos, aprovechando la pobreza o los problemas que enfrenta, lo cual ha provocado que la prostitución se haya disparado en los últimos tres años, afirmó Teresa Ulloa, directora regional de la Coalición contra el Tráfico de Mujeres y Niñas en América Latina y el Caribe (CATW-LAC).
Ulloa mencionó que entre las técnicas de reclutamiento más utilizadas se encuentra el rapto o secuestro, la presión de los padres o familiares, el arreglo entre padres y traficantes, el engaño de mejores condiciones de vida, el abuso sexual, la seducción o matrimonio previos a la explotación de la víctima.
En su intervención en el foro Una visión integral sobre el sexoservicio en el Distrito Federal, organizado por la ALDF, comentó que las sobrevivientes de esta situación suelen declarar que los traficantes les retienen sus documentos de viaje durante el transporte o después y, a veces, se los revenden a precios exorbitantes; se les mantiene prisioneras en burdeles y casas de citas o les crean dependencia y endeudamiento.
Más de 70 por ciento de las mujeres en prostitución callejera en la ciudad de México, por ejemplo, se iniciaron cuando eran niñas o adolescentes en lugares como bares, loncherías, table dance, salones de baile o masaje, saunas, baños públicos y vapores, burdeles, casas de citas, servicios de escorts, callgirls, etcétera.
Por ello, cualquier ley o política que legitimice la prostitución como trabajo pone en grave peligro a las mujeres y las niñas, pues no se trata de un simple fenómeno migratorio o turístico, o de hacer dinero fácil, sino de perpetuar estereotipos en que sus cuerpos son para placer sexual de los hombres, y se les trata como una mercancía. "Lamentó que se pretenda legislar sobre el tema cuando sería mejor que se les garantice una vida libre de violencia y todos sus derechos sociales, económicos y culturales, porque sus cuerpos no son mercancías ni instrumentos de trabajo", argumentó.
Mientras, la directora de la Asociación para el Desarrollo Integral de Personas Violadas, Laura Martínez, mencionó que de acuerdo con la ONU, cada año se venden cerca de cuatro millones de mujeres con fines de prostitución, esclavitud o matrimonio, en tanto que dos millones de niñas son introducidas en el comercio sexual.
Laura Gómez Flores