Usted está aquí: lunes 1 de agosto de 2005 Espectáculos Murió Pepe Jara, exponente del romanticismo convertido en bolero

Falleció el sábado a los 76 años a causa de complicaciones diabéticas

Murió Pepe Jara, exponente del romanticismo convertido en bolero

Dejó pendiente la selección de los temas para lo que sería su producción número cien

Las mujeres me podrán fallar; mi guitarra, nunca, solía decir

Principal intérprete de Alvaro Carrillo

DE LA REDACCION

Ampliar la imagen El cantante interpret�nciones como Echame a m�a culpa, Te odio y te quiero, Ultimo trago y Serenata sin luna FOTO Roberto Garcia Ortiz Foto: Roberto Garcia Ortiz

Pepe Jara, conocido como El Trovador Solitario, uno de los exponentes más importantes del bolero y principal intérprete del compositor Alvaro Carrillo, murió este sábado a los 76 años de edad a causa de complicaciones diabéticas, a un mes de haber padecido un infarto cerebral que le provocó parálisis facial, informó su familia.

El Trovador Solitario decía que las mujeres le podían fallar, pero su guitarra nunca; por eso la consideraba su más fiel compañera, aquella con la que podía interpretar temas como Echame a mí la culpa, Te odio y te quiero, Ultimo trago y Serenata sin luna, por mencionar algunos.

Jara dejó pendiente la selección de los temas de lo que sería la producción discográfica número cien de su carrera, comentó su viuda, Silvia Hermosillo.

Pepe Jara nació en Ciudad Madero, Tamaulipas, el 25 de diciembre de 1928, pero desde pequeño se fue a vivir a Chihuahua; siempre que podía aclaraba que tenía 58 años viviendo en la ciudad de México, ya que comentaba que llegó a la capital mexicana en 1947.

En ese momento los tríos estaban en su mayor apogeo, por lo que formó parte de importantes agrupaciones como Los Pepes, el Culiacán y Los Duendes.

Según se menciona, Pepe Jara nunca firmó un cheque por considerarlo un acto de prepotencia, además porque todo su dinero, que fue mucho, se lo gastaba en mujeres y alcohol.

Escribió un libro

El Trovador Solitario fue amigo de Pedro Infante y Amparo Montes, así como de los escritores Octavio Paz, Gabriel García Márquez y Carlos Fuentes. Estos últimos quizás lo inspiraron para que publicara un libro de memorias: El andariego.

El artista tamaulipeco jamás se atrevió a manejar un automóvil, y eso que a lo largo de su vida se compró cerca de 50 coches. Le gustaba cocinar verdolagas con espinazo, mole de olla, nopalitos navegantes con carne de puerco y huevos, aunque no le gustaba ir al mercado a comprar las cosas, porque se tardaba mucho saludando a la gente que se le acercaba, y lo "peor" es que nadie quería cobrarle nada.

El cantante no tenía miedo a la muerte, pues decía que ésta le "pelaba los dientes", por eso era como una buena amiga; más cuando ya la había visto de cerca en tres ocasiones, debido a accidentes aéreos que sufrió.

El primer percance fue a bordo de un avión fumigador; el segundo, en una avioneta, y el último, cuando estuvo en mayor peligro, fue en Guadalajara, Jalisco, acompañando a un diputado que lo invitó a volar en su avioneta.

Este accidente ocasionó que desde hace 26 años caminara mal, lo que nunca impidió que siguiera haciendo presentaciones. El cantante adoraba tener contacto con el público durante los espectáculos.

Interpretó temas de Carrillo, Cárdenas, Curiel, Gabriel Ruiz, El Vate López Méndez, Palmerín, Del Moral, María Griver, Agustín Lara, Cervera, Zorrilla, Luna de la Fuente, Molina Fuentes, pues consideraba que eran los mejores poetas dedicados a crear boleros.

Pepe Jara, quien era un romántico empedernido, lamentaba la falta de honestidad que tenían algunos cantantes, que se apoyaban en la tecnología y la parafernalia para pararse en un escenario, vestidos inapropiadamente sólo para cantar letras ininteligibles.

Aseguraba que él todavía sentía miedo cuando debía subir a un escenario, usando aún un par de mancuernillas, porque creía que el artista que decía serlo y no sentía ese miedo tan especial era como si estuviera prostituyendo el arte.

El Trovador Solitario fue internado el pasado lunes en un hospital a causa de un mareo, en momentos en que se restablecía de un infarto cerebral que sufrió hace un mes.

Sin embargo, el cantante falleció este sábado debido a complicaciones por la diabetes que padecía. Su cuerpo es velado en una funeraria del centro de la ciudad de México, donde se han dado cita sus familiares y amigos. Su cuerpo será incinerado este lunes a las 11 horas y se planea construir un nicho junto a la tumba de Alvaro Carrillo en el Panteón Jardín para colocar ahí la urna.

 
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