Ridiculización, política de la Iglesia hacia gays y lesbianas
Cuernavaca, Mor. El reverendo de la Iglesia Cristiana Metropolitana Renovación -enfocada a la atención de homosexuales-, Alfonso Leija Salas, pidió a su feligresía demostrar que la Biblia no condena la homosexualidad y, por tanto, demandó entender que el mensaje de Dios es la salvación para gays y lesbianas, posición que contradice la opinión de otras iglesias que condenan estas inclinaciones. En el contexto de la Semana por la Diversidad Sexual, que se realiza en esta ciudad, Pilar Sánchez, de la organización Católicas por el Derecho a Decidir, manifestó que es necesario sumar su voz a la de otros marginados para difundir que la jerarquía católica no respeta los derechos humanos. Cuestionó, al igual que los otros participantes en el encuentro, el trato diferenciado que reciben los homosexuales de las diversas iglesias y la "burocratización" de la jerarquía católica para ridiculizar a quienes tienen preferencia por personas de su mismo sexo. "¿Hasta dónde puede hablarse de dictadura o consejería espiritual?", dijo. Por su parte, Leija Salas pidió leer la Biblia "con nuevos ojos, desde la perspectiva de los oprimidos", para entender que en sus diferentes lecturas "se silencia y oculta la sexualidad de lesbianas y gays, aunque han estado en todas partes siempre". Esta búsqueda de la verdad, subrayó, "debe superar siglos de silencio", y frente a ello dijo que esta parte de la sociedad también debe dejar de ignorarla. Al foro no asistieron pastores luteranos, evangélicos y católicos, pese a que habían confirmado su presencia, aunque sí participaron dos ex ministros evangélicos estadunidenses, José Ortiz y Steve Parelli, quienes comentaron los fracasos de las terapias reparativas que impulsan esta religión y la católica.