El diplomático anunció que el lunes reabrirá el consulado en Nuevo Laredo
EU apremió a México para erradicar violencia fronteriza, admite Garza
Washington trabajará con Fox para recuperar la región, que está en manos del crimen, afirma
Ampliar la imagen Elementos de la AFI custodian la zona donde asesinaron al regidor Leopoldo Ramos, en Nuevo Laredo. Se anunci�e el lunes ser�eabierto el consulado de EU en esta ciudad FOTO Ap Foto: Ap
El gobierno de Estados Unidos anunció la reapertura de su consulado en Nuevo Laredo, Tamaulipas, mientras el embajador de ese país en México, Anthony O. Garza, reveló que hace una semana le solicitó al gobierno de México acelerar la aplicación de medidas decisivas para erradicar la violencia fronteriza, producto del narcotráfico.
Informó que "trabaja de manera conjunta" con el gobierno de Vicente Fox en la evaluación de las actividades delictivas a lo largo de la frontera norte para implementar estrategias de seguridad, así como un acuerdo sobre medidas necesarias para esa zona.
El reinicio de labores del consulado de Nuevo Laredo, Tamaulipas, será el próximo lunes, confirmó ayer el embajador Garza, quien anunció que Washington acompañará a México "hombro con hombro" en la lucha contra la violencia en la frontera norte.
El diplomático estadunidense reconoció que el combate contra el crimen organizado debe ser compartido por los dos países y prometió que la relación entre ambas naciones será más fuerte, llena de energía y progresista "como son los pueblos de nuestras dos grandes naciones.
"Sabemos que la criminali- dad a lo largo de la frontera no va a desaparecer de la noche a la mañana. Los compromisos que ha expresado el gobierno de México me alientan y confortan. El presidente (Vicente) Fox comprende que las bandas criminales y los traficantes de drogas posan (sic) una amenaza para nuestras familias, nuestros niños y nuestra forma de vida.
"En repetidas ocasiones he dicho que poner fin a la violencia en la frontera es una responsabilidad compartida, y derivado de dicho compromiso, Estados Unidos acompaña hombro con hombro con el pueblo de México", ratificó después de alabar el trabajo del gobierno del presidente Vicente Fox, así como de los secretarios de Gobernación, Carlos Abascal Carranza, y de Relaciones Exteriores, Luis Ernesto Derbez, para disminuir los índices de violencia en la frontera norte de México.
El diplomático recordó que "el clima de violencia feroz a lo largo de la frontera", que culminó con un incidente el 28 de julio en el que integrantes de diversas bandas invadieron una casa y disparaban armas de alto calibre de uso militar, "me dejó sin alternativa alguna que suspender las labores" del consulado en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Justificó su decisión de cerrar el consulado ante la violencia generalizada en el norte de México y dijo que no tomó la decisión a la ligera. "Tanto ciudadanos estadunidenses como mexicanos me comentaban con preocupación sobre cómo la violenta criminalidad en las calles había afectado sus vidas", subrayó.
Reveló que la decisión la tomó cuando leyó "un estudio" realizado por el Consejo Ciudadano para la Seguridad Pública, sobre los crecientes índices en secuestros y otro informe de la organización Alerta de la Pren- sa Global sobre vínculos entre políticos corruptos y lavado de dinero.
Insistió en que ha solicitado al gobierno del presidente Fox celeridad en el combate a la delincuencia, pero sorpresivamente aceptó que en conversaciones sostenidas con los secretarios de Gobernación, Carlos Abascal, y de Relaciones Exteriores, Ernesto Derbez, "me han convencido de que la administración del presidente Vicente Fox tiene el compromiso de combatir el tráfico de estupefacientes y recuperar a la frontera, que se encuentra en manos de los líderes de organizaciones delictivas y capos cuya influencia destructiva es una amenaza que merma la estructura misma de la vida en México".
Los argumentos positivos del gabinete foxista provocaron, según el diplomático, que el gobierno de Estados Unidos decidiera reabrir el próximo lunes a las ocho de la mañana el consulado de Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Espectáculo de Garza: senador
Mientras el senador priísta Genaro Borrego, calificó como positiva la decisión de reabrir el consulado de Estados Unidos en Nuevo Laredo, su homólogo perredista Raymundo Cárdenas consideró ayer que el embajador del vecino país del norte, Anthony Garza, armó un espectáculo con el tema de la violencia y el cierre de la legación diplomática, con el fin de crear entre la opinión pública un clima favorable a los acuerdos sobre seguridad que se firmaron en Waco, Texas.
Dichos acuerdos, cuyas aplicaciones concretas se siguen negociando, hacen temer que México ya asumió como enemigos suyos a los enemigos de Estados Unidos, lo que la ciudadanía no va aceptar tan fácilmente, estimó.
Para crear un clima favorable a la realización de operativos conjuntos en materia de seguridad, consideró, el representante de la Casa Blanca cerró el consulado e "hizo más ruido del necesario para impactar en los medios de comunicación y en la sociedad".
El legislador no descartó que en el futuro se homologue la lucha contra el terrorismo con el combate al crimen organizado. Con ello, no sería extraño que al rato podamos ver las fragatas de la armada estadunidense vigilando los puertos mexicanos y las instalaciones petroleras.
Reconoció que sí hay un problema de violencia en la frontera norte, pero ello se ha utilizado para justificar la aplicación de medidas de seguridad conjuntas.
El priísta Genaro Borrego refirió que si México quiere tener una buena relación con Estados Unidos, como le conviene, "hay que hacer todo lo que esté de nuestra parte porque haya seguridad".
Calificó como una "expresión que corresponde a la verdad", la queja del embajador Garza por la violencia en Nuevo Laredo. "Se trata de una expresión muy franca", puntualizó.
Para reducir los niveles de inseguridad en el norte del país, el perredista Raymundo Cárdenas consideró necesario que todos los gobernadores de la zona firmen un gran acuerdo que sacuda a los cuerpos policiacos y dé un fuerte empujón al combate contra el narcotráfico.
Otro senador perredista, Rutilio Escandón, fue más allá al destacar la conveniencia de que se reúnan todas las fuerzas del país, todas las instancias de gobierno en el combate a la delincuencia.