Obispo de Tampico, José Luis Dibildox
Acciones de la Iglesia, lejos de la realidad de los mexicanos
En el mundo actual, donde prevalecen el consumismo desenfrenado y la violencia, "no resulta fácil ser buenos cristianos". Existen corrientes de pensamiento que de manera sutil o abierta y descaradamente buscan la desintegración de los valores, como la familia y la religión, advirtió el obispo de Ciudad Juárez, Chihuahua, Renato Ascencio León.
En tanto, el obispo de Tampico, José Luis Dibildox reconoció que las acciones de la Iglesia, además de faltarles organización, están muy lejos de la realidad que viven campesinos, obreros y quienes padecen las administraciones basadas sólo en el afán de obtener ganancia.
Durante las homilías pronunciadas en la Basílica de Guadalupe con motivo de las peregrinaciones de Chihuahua y Tamaulipas, ambos prelados resaltaron la necesidad de que la sociedad recupere el significado cristiano de familia, su espíritu de servicio y colaboración. Dibildox señaló que los católicos están obligados a hacer un examen de conciencia para reconocer los obstáculos que enfrenta la misión evangelizadora.
En la celebración, que de manera conjunta se realizó con las diócesis de Tampico, Ciudad Victoria y Matamoros, el obispo Dibildox señaló que esta tarea debe empezar por reconocer las resistencias que se arrastran por inercias del pasado, las cuales dificultan la renovación de la vida cristiana. A lo anterior se suma, apuntó, el hecho de que las acciones de la Iglesia "están muy lejos" de la realidad que viven los mexicanos con autoridades que priorizan sus intereses por encima de las necesidades de la población en su conjunto.
Al filo del mediodía arribó al templo mariano la peregrinación de la diócesis de Ciudad Juárez, y durante su homilía el obispo Ascencio León confió en que la violencia que persiste en aquella entidad "no apague la esperanza".
Advirtió sobre las corrientes de pensamiento que plantean que la familia, la religión, el amor fraterno, la honestidad y la fidelidad son cosas pasadas de moda, cuando en realidad, dijo, la verdad y la virtud no son cuestiones de tiempo.
El mismo se refirió al riesgo de que el materialismo moderno logre la "desintegración del hombre, de la familia" y la desestabilización de la sociedad.
Angeles Cruz Martínez