En 10 años la paraestatal se convertirá en importadora de crudo, advierte Morales Gil
Pemex entregará a particulares exploración y perforación de pozos
Plantea la restitución de ciento por ciento de reservas para continuar con la autosuficiencia
Prevé inversión por $108 mil millones para el próximo año, 95% de la cual es vía Pidiregas
La capacidad financiera de Petróleos Mexicanos (Pemex) se encuentra al límite, en un momento en que con los proyectos que la paraestatal tiene en marcha pasarán sólo 10 años antes de que el país, cuyas finanzas y estabilidad económica dependen en gran parte de la exportación de hidrocarburo, se convierta en un importador de crudo. Es el diagnóstico que hace Carlos A. Morales Gil, director general de Pemex Exploración y Producción (PEP). El funcionario anunció que la empresa diseña un nuevo modelo de contrato para que firmas privadas puedan participar en la exploración y perforación de campos petroleros.
El director general de PEP aseguró que la producción en el principal campo petrolero del país, el de Cantarell -ubicado en la sonda de Campeche y que aporta dos tercios de la producción nacional- comenzará a declinar a partir de finales de 2006. Se trata de una información distinta a la de analistas petroleros, que estiman que el declive iniciará incluso a finales de 2005.
"En el caso de Cantarell se prevé que el declive en la producción inicie a finales del próximo año. Va a ser de manera paulatina, como ocurre en todos los procesos de este tipo", afirmó. "El ritmo de disminución será de 2 por ciento de la producción en el primer año y va a llegar a 10 por ciento anual", añadió. Sin embargo, dijo, "Cantarell tiene vida de 30 años todavía".
Con el principal campo petrolero en declive y una tasa de restitución de reservas de 57 por ciento anual, la siguiente pregunta que se han planteado expertos en el mercado petrolero es cuánto tiempo pasará antes de que México se convierta de exportador en importador de petróleo.
Carlos Morales Gil responde: "Como se ven las cosas hoy, los proyectos que tenemos nos permitirían transitar sin problema por alrededor del año 2015 o 2016, en ese rango de tiempo". Añadió: "Sí tendríamos que continuar descubriendo nuevas reservas y desarrollándolas para continuar siendo un país exportador. La meta es restituir 100 por ciento de reservas en 2010 y prolongar el tiempo en que el país sea autosuficiente".
La tasa de restitución se refiere a la capacidad de la empresa para reponer en las reservas probadas la cantidad de petróleo que es extraído cada año. A finales de los años 90, la tasa de restitución estuvo en torno a 20 por ciento y ahora es de 57 por ciento. Al inicio de la administración, el anterior director de Pemex, Raúl Muñoz Leos, comentó varias veces que al final de este sexenio la tasa de restitución sería de 100 por ciento, una meta que ahora ha sido llevada a 2010.
En lo que va del año, informó Morales Gil, la restitución de reservas "va de acuerdo con el programa". Han sido perforados dos pozos en la sonda de Campeche y otros 20 en la cuenca de Burgos, en el noreste del país, más otro frente a las costas de Poza Rica, a 700 metros de profundidad. Los primeros resultados apuntan a que la riqueza de estos yacimientos permitirá restituir las reservas de petróleo en el porcentaje previsto de 57 por ciento. Los resultados definitivos estarán disponibles el mes próximo, adelantó.
Dijo que el nivel de inversión para que se pueda incrementar el nivel de restitución de reservas y sostener la producción es a través de mayor inversión presupuestal. PEP invertirá este año 110 mil millones de pesos y el próximo año otros 108 mil millones, cantidad que no incluye los gastos de operación. De ambas cantidades, 95 por ciento será mediante la contratación de deuda con particulares a través del esquema de Proyectos de Inversión de Impacto Diferido en el Registro del Gasto (Pidiregas).
El efecto popote
En las aguas que México comparte con Estados Unidos en el Golfo de México existen varios yacimientos de petróleo que abarcan ambos lados de la frontera marina. Sobre uno de ellos, el llamado Hoyo de Dona o Polígono Occidental existe un tratado binacional que impide su exploración hasta antes de 2010, mientras los dos países se ponen de acuerdo en el reparto del yacimiento.
Pero a lo largo de la frontera marina existen otros yacimientos con probada capacidad de producir petróleo de manera rentable. Sólo uno de esos campos, comentó Morales Gil, tiene una reserva de petróleo probable de dos mil 500 millones de barriles, una cantidad nada despreciable.
Bajo las leyes actuales, Pemex no puede asociarse con empresas extranjeras para explotar esos yacimientos, una situación que la actual administración de Pemex busca que sea cambiada.
"Ellos (en alusión a Estados Unidos y las empresas que operan en ese país) pueden llegar ahora mismo y perforar", señaló. Como el petróleo es un cuerpo líquido "si desde allá se comienza a explotar, extraen el petróleo en lo que se ha llamado el efecto popote, que de alguna manera tiene sentido".
Explicó que cuando casos como este ocurren en el mundo, los países o empresas que comparten yacimientos se ponen de acuerdo en las políticas que deben prevalecer para explotarlo. "Por eso insistimos en que se legisle ya en cuanto a los yacimientos transfronterizos y es algo que se puede lograr en este sexenio", consideró.
Aunque, dijo, de manera Pemex no negocia nada con ninguna empresa en este momento. "Estamos viendo la posibilidad de cómo explotar esa zona".
Interesa a la empresa ampliar las posibilidades de inversión de particulares en la actividad petrolera, a través de un esquema similar los contratos de servicios múltiples en la cuenca de Burgos.
Dijo que en PEP se diseñan nuevos modelos de contratación de servicios a particulares para la exploración y extracción de petróleo que espera estén listos el próximo año.