Los cascarones donados por Vamos México y Estrella Blanca empeoraron la situación de 23 niños
Fracaso total del programa de autobuses aulas en Querétaro
El viento y el calor de Motosí y Pueblo Nuevo hicieron que los dejaran antes de terminar el año escolar
Ampliar la imagen El cami�scuela de Pueblo Nuevo sirve de dormitorio a los alba�s que construyen un sal�decuado para los ni�FOTO Mariana Chavez Foto: Mariana Chavez
Pueblo Nuevo, Qro., 18 de agosto. El programa de la fundación Vamos México y Estrella Blanca para "poner al alcance de miles de niños y niñas mejores oportunidades de acceso a la educación" es un fracaso, o al menos no ha dado los resultados que sus organizadores esperaban en las comunidades de Motosí y Pueblo Nuevo, municipios de Peña Miller y San Juan del Río, respectivamente.
Se trata de los dos cascarones donados por la empresa camionera y habilitados como autobuses aulas que Marta Sahagún de Fox entregó a 14 alumnos de primaria de Motosí y a nueve de Pueblo Nuevo, ante la carencia de infraestructura educativa en esas zonas, consideradas de alta marginalidad en Querétaro.
Las estadísticas del Consejo Nacional de Fomento Educativo indican que en la entidad existen 218 primarias rurales, donde son atendidos aproximadamente 2 mil 600 alumnos que cursan de primero a sexto de primaria con un solo maestro, mientras la Unidad de Servicios para la Educación Básica en el estado reporta 911 planteles, con una población de 82 mil 152 estudiantes.
Habitantes de Pueblo Nuevo, entre ellos niñas que tomaban clases en el "camioncito", señalaron que lo abandonaron antes de que concluyera el pasado ciclo escolar porque las ráfagas de aire, que en la zona son muy fuertes, balanceaban el cascarón. "Se mueve mucho y nos da miedo", expresaron.
Además, las altas temperaturas del verano pasado no permitían que los menores se concentraran en las clases, pues la lámina del camión concentraba aún más el calor. "Mejor se fueron, ya no funciona", expresó Gustavo López, supervisor de un aula que se construye en la zona.
En Pueblo Nuevo, los niños de entre siete y 11 años tomaban clases en dos salones fabricados con tabique y lámina, cuyo equipamiento consistía en sillas de madera, un pizarrón y un baño.
A escasos metros de las antiguas aulas, el camión sirve ahora de almacén y dormitorio de tres albañiles que trabajan en la construcción de un salón de clases que financia la presidencia municipal de San Juan del Río, gobernado por el Partido Revolucionario Institucional, la cual esperan concluir en un mes para que los menores puedan contar con una instalación adecuada.
En la parte de enfrente del camión aula se observa un pizarrón, y atrás hay aproximadamente 15 sillas apiladas, algunas sin la paleta. A un costado del vehículo aún permanece un espectacular con la leyenda: "Sin ti no estamos completos. Autobús-aula entregado por Marta Sahagún de Fox".
Los 14 niños regresaron a sus antiguos salones para concluir el curso escolar 2004-2005, y ahí continuarán para el periodo que empieza el lunes, mientras concluye la construcción de las nuevas instalaciones.
Los nueve alumnos de Motosí, en el municipio de Peña Miller, considerado de alta marginación, no correrán con la misma suerte, pues empezarán sus clases en el autobús aula, no obstante que funcionarios del Consejo Nacional de Fomento Educativo consideraron inapropiado ese espacio.
Por ello, el organismo anunció que rehabilitarán el salón "rústico" con que contaban antes de la entrega del camión: un salón fabricado de adobe y lámina. Serán acondicionadas puertas y ventanas, pues carece de ventilación, y pintarán las paredes y el techo, en lo que invertirán 21 mil pesos, informó el jefe de informática y apoyo logístico de esta delegación, Elías Domínguez Trejo.
Vicente Rogelio Rodríguez Vélez, delegado en Querétaro del Consejo Nacional de Fomento Educativo, recuerda el origen de los autobuses aulas. Fue en el pasado ciclo escolar cuando desde las oficinas centrales de la dependencia, en la ciudad de México, le solicitaron que especificara qué zonas no cuentan con infraestructura escolar para que fueran candidatas a recibir un camión de la fundación Vamos México.
El diputado local priísta Gregorio López González pidió a la Unidad de Servicios para la Educación Básica en el estado de Querétaro (Usebeq) que quite estos camiones, pues resulta "grotesco" que los niños tomen clases en condiciones inapropiadas y, sobre todo, que se otorgue esa infraestructura cuando la fundación Vamos México "maneja una gran cantidad de recursos".
"Sí tenemos falta de escuelas, en algunos casos les toca a los niños caminar por el cerro para llegar a la comunidad vecina, pero tampoco creo que sea la salida el que se les ponga ese tipo de programa, y menos, insisto, con los recursos que maneja Vamos México. Si está haciendo un esfuerzo (la fundación), creo que debe realizarlo bien, porque tiene bastantes recursos". agregó.
El lunes pasado, Raymundo Gómez Ramírez, coordinador operativo de la Usebeq, explicó que Vamos México y Estrella Blanca "conjugan esfuerzos" para donar los autobuses aulas en zonas donde carecen de infraestructura educativa.
Tras la crítica del diputado Gregorio López, explicó que Estrella Blanca dona a la fundación de Marta Sahagún los autobuses que saca de servicio. "Hace la adecuación para que se conviertan en aulas y las envía a escuelas rurales, principalmente para suplir necesidades de falta de espacios educativos; son fundaciones que conjugan esfuerzos para ayudar en este sentido", expresó.
En la página electrónica de Vamos México se resalta que entre sus programas se incluye "dotar de autobuses aulas a las comunidades más marginadas del país en lo que se tienen salones más dignos, con la finalidad de poner al alcance de miles de niños y niñas mejores oportunidades de acceso a la educación".
En Motosí y Pueblo Nuevo, estos propósitos quedaron en eso.