No es un museo, sino un espacio ''vivo'' para el arte sacro: Rivera Carrera
El Instituto Manuel Toussaint abrió sus puertas en el Centro Histórico
Insiste el cardenal en la legalidad de la cesión del antiguo oratorio a la Iglesia
Ampliar la imagen Vista interior del edificio del Antiguo Oratorio de San Felipe Neri el Viejo, cedido de manera irregular por el gobierno de Fox a la arquidi�is de M�co, como document� Jornada FOTO Jes�llaseca Foto: Jes�llaseca
Con la presencia de políticos y empresarios como Miguel Alemán Velasco y miembros de la jerarquía católica como el arzobispo primado de México, Norberto Rivera Carrera, anteanoche fue inaugurado el Instituto Manuel Toussaint en el edificio del Antiguo Oratorio de San Felipe Neri el Viejo, cedido en comodato de manera irregular por el gobierno foxista a la arquidiócesis mexicana.
Ubicado en la calle de República de El Salvador 47, Centro Histórico, el inmueble del siglo XVII está catalogado como patrimonio histórico de la nación y se afirma que su cesión a la Iglesia católica viola ordenamientos como la Ley General de Bienes Nacionales.
Cesión impugnada por diversos sectores
La cesión del edificio, cuyo caso ha sido ampliamente documentado por La Jornada, fue impugnada por diversos sectores y por legisladores de los partidos Revolucionario Institucional y de la Revolución Democrática.
Inclusive este último anunció que interpondría una denuncia ante la Procuraduría General de la República.
Sin embargo, anteanoche el cardenal Rivera Carrera dijo a este diario que con la inauguración del Instituto Manuel Toussaint, ''Centro Ecuménico para la Conservación y Promoción del Patrimonio Artístico", no quedaba atrás ninguna controversia porque ésta nunca existió, ya que todo fue legal.
''No tuvimos ninguna controversia con nadie, ninguna polémica, nadie se subió al ring. Se procedió durante años, se estuvo haciendo todo legalmente", dijo el dirigente religioso.
''Esto no es de ninguna Iglesia, de ninguna confesión. Esto es patrimonio de México y hay que cuidarlo, darlo a conocer y rescatar lo que nos han robado", agregó en referencia al hurto de arte religioso en el país.
Durante la inauguración en un auditorio del edificio histórico, el cardenal Rivera Carrera señaló que el nacimiento de dicho instituto prueba que han tenido eco las inquietudes manifestadas por él a las autoridades y al presbítero Armando Ruiz Castellanos, presidente de la Comisión de Arte Sacro de la arquidiócesis de México y encargado del proyecto.
Recordó que el patrimonio artístico de inspiración religiosa en México padece desaparición, destrucción o desconocimiento y aclaró que el nuevo instituto no es un museo, sino un ''centro vivo" para las nuevas expresiones del arte sacro.
"Ahora tenemos este inmueble"
El edificio del Antiguo Oratorio de San Felipe Neri el Viejo fue desocupado hace dos meses por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para enseguida ser entregado a la Asociación del Patrimonio Artístico Mexicano, AC, encabezada por el sacerdote Ruiz Castellanos, quien además es coordinador de Pastoral de la prelatura del Opus Dei.
Sobre el aspecto legal, Ruiz Castellanos reiteró anteanoche:
''Desde el punto de vista jurídico, bueno, las autoridades son las que tienen que decirlo. Personalmente no albergo ninguna duda. Está la constancia documental de que todo este acervo y estos restos monumentales en los que estamos ahora fueron vendidos a Mateo de la Tijera en 1852.
''Este inmueble nunca fue objeto de nacionalización ni de desamortización, que son dos cosas distintas."
Informó además que el instituto no cuenta con un acervo y que sólo posee dos piezas del siglo XVI donadas por Guillermo Tovar y de Teresa, quien las rescató de una casa de subastas de Nueva York.
''Este es un centro de estudios, de impulso, de aliento, de profundización, de catalogación. Es un centro muy ambicioso en ese sentido.
''Ahora tenemos encomendado este inmueble, que tenemos que cuidar. El primer acervo que tenemos es este inmueble."
Recordó que el primer proyecto de investigación de la asociación devino en el libro Arquitectura religiosa de la ciudad de México. Siglos XVI al XX y que se realiza otra sobre los retablos de las iglesias de la capital del país, cuyo volumen se presentará el 16 de noviembre.
Luego seguirá un proyecto sobre la escultura religiosa.
Programa musical
La inauguración del Instituto Manuel Toussaint, cuyo nombre recuerda al destacado investigador del arte virreinal mexicano, también fue avalada por dirigentes de otras religiones, como Antonio Chedraui, obispo de la Iglesia ortodoxa en México.
Y por personajes de la vida académica y artística, como María Teresa Uriarte, directora del Instituto de Investigaciones estéticas de la Universidad Nacional Autónoma de México; la arquitecta Sara Topelson y el poeta y promotor cultural José Angel Leyva.
En la inauguración el padre Ruiz Castellanos esbozó el organigrama del naciente Instituto Manuel Toussaint y dijo que consta de cuatro áreas básicas: académica, talleres, restauración e imagen institucional, todo en torno al arte de inspiración religiosa, ''que no acaba de remontar la profunda crisis en la que cayó".
El director de orquesta Benjamín Juárez Echenique coordinó y comentó un programa musical que incluyó obras provenientes de distintas tradiciones religiosas, como la católica, la protestante y la budista, que fueron interpretadas por los pianistas Eugenio Toussaint, sobrino nieto del investigador, y Cristóbal Juárez, así como la flautista Marisa Canales, la soprano Nadia Ortega y los violinistas Gabriel Pliego y Humberto Ramos.
También se inauguró la exposición Ayer-hoy. Oriente-occidente, de la artista Esther González, comentada por el especialista en arte religioso fray Gabriel Chávez de la Mora y por el poeta José Angel Leyva.