TELESCOPIO
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ESTA COLUMNA ESTA de luto por la masacre de peregrinos en Bagdad y la matanza -eso fue- en Nueva Orleáns y Louisiana, ambas resultantes de las políticas de Washington. Nos concentraremos, pues, en las reacciones ante estos horrores que muestran un progresivo retroceso a la barbarie.
LE MONDE, POR ejemplo, sostiene con razón que "la prensa estadunidense y extranjera" es muy crítica con el presidente Bush, a quien se imputa el desastre en el sur de su país. Il Manifesto, por su parte, dice que Bush no consigue no sólo controlar Irak, sino ni siquiera lo que él ha calificado de "un tercio del territorio de Estados Unidos", adonde ha enviado tropas con orden de tirar a matar contra los saqueadores, muchos de los cuales son sólo personas hambrientas que recuperan alimentos. El Corriere della Sera, órgano de la gran finanza italiana, publica enormes títulos en primera página que dicen "Licencia para matar" y "Bush: reimplantaremos el orden en la ciudad", e informa que los habitantes ricos que aún están en la misma se han armado y tirarán en defensa de su sagrada propiedad. El Chicago Sun Times se queja de que los primeros auxilios comenzaron a llegar cuatro días después, y el británico y conservador Financial Times, con un cauto "Bush under fire", destaca que todos critican duro y tupido al petrolero instalado en la Casa Blanca.
EN COLOMBIA, DONDE a diferencia de Venezuela y Cuba el gobierno ni se inmutó ante la tragedia provocada por los que destinan los fondos del Estado a financiar guerras en Irak (y en Colombia misma) y no a mejorar la situación de los negros de Nueva Orleáns, El Tiempo dice que la inundación en Louisiana costará al menos 100 mil millones de dólares y, en un duro editorial, vuelve a condenar la guerra en Irak que, sostiene, cuesta a los contribuyentes estadunidenses la bicoca de 200 millones de dólares por día, o sea, 600 millones al mes.
MIENTRAS EL DIARIO oficial cubano Granma nos comunica que en sesión solemne la Asamblea Nacional de su país votó por unanimidad una moción de pésame por la tragedia en Nueva Orleáns y de solidaridad con la población de esa región, El País, de Montevideo, dice que la cantidad de muertos oscila en 10 mil y que el UNICEF calcula el número de niños sin hogar en 400 mil. El Comercio, de Quito, informa que en toda la zona inundada hay un manto de petróleo, que hace peligrosa el agua, y arruinará, si ésta se retira, los campos de la región. El Comercio, de Lima, agrega que ha caído bruscamente el precio de los bonos del Tesoro de Estados Unidos (expresión de la mayor desconfianza ante la fragilidad que ha demostrado ese país).
SOLO TRES NOTICIAS más antes de ir a buscar cicuta: La Stampa publica que se acerca al sur de Japón "un tifón más fuerte que Katrina" (ya que en EU se destruye el ambiente y se recalienta el clima, pero eso afecta hasta a los asiáticos); la BBC informa que la policía haitiana asesinó en pleno día, en un estadio de futbol, a seis partidarios del ex presidente Jean Bertrand Aristide, pese a la ocupación de las tropas de la ONU, y por último, con gran fineza y sentido de la humanidad, el antichavista El Nacional, de Caracas, se pregunta: "¿Y a nosotros quién nos ayuda con los desastres del huracán Chávez?"