Según el edil, la caída de chispas de soldadura en cartuchos del material fue la causa del percance
Estalla polvorín en Tlacotepec, Guerrero; 8 muertos y 4 heridos
El depósito se encontraba en una casa; la explosión colapsó varias viviendas y dañó una iglesia
Chilpancingo, Gro., 3 de septiembre. Una explosión ocurrida en un depósito de pólvora negra que se encontraba en una casa del centro de Tlacotepec, localidad del municipio de Heliodoro Castillo, provocó la muerte de por lo menos ocho personas -entre ellas cinco niños-, y lesiones a cuatro más. Además dañó una iglesia y colapsó varias viviendas.
Roel Ayala Mata, jefe del departamento de Fenómenos Meteorológicos de la Unidad de Protección Civil, informó que antes de las seis de la tarde habían sido rescatados ocho cuerpos, "pero, según los informes que nos han llegado, esta cifra podría aumentar hasta 15 (muertos), siendo la mayoría de las víctimas los niños que jugaban en una accesoria de telejuegos" aledaña a la casa donde se produjo el estallido.
Entrevistado vía telefónica, explicó que alrededor de las tres de la tarde Severo Oyorzábal Díaz, alcalde priísta de ese municipio ubicado en la Sierra de Guerrero, a cien kilómetros de Chilpancingo, se comunicó vía telefónica con el director de Protección Civil, Sabás Arturo de la Rosa, para informarle del accidente.
Ayala Mata señaló que los informes de Protección Civil indican que hubo una fuerte explosión en un depósito de pólvora ubicado en una casa con accesorias comerciales, a un costado de la iglesia de Santiago Apóstol, que también resultó dañada.
Según el alcalde, la explosión ocurrió cuando chispas de soldadura alcanzaron los envoltorios de pólvora utilizada para construir fuegos pirotécnicos. Tras el incidente cayó una fuerte lluvia, lo que ha impedido recuperar la mayoría de los cuerpos que quedaron enterrados al colapsarse las viviendas; no obstante, personal policiaco, de la Cruz Roja, Protección Civil y voluntarios continuaban las labores de rescate y la comunicación para saber con precisión el número de muertos.
"Los cuerpos quedaron irreconocibles, solamente sabemos que son cinco niños y tres adultos (los muertos)", comentó.
Las víctimas fueron identificadas como Aciel Alarcón Blanco y Severino González Salgado, ambos de 10 años; Raciel Alejo Blanco, de nueve años; Jesús Díaz Díaz, de ocho; así como Nicolás Estrada Blanco, de 55 años, Eugenio Martínez Durán, de 20 años, además de Reynel Alejo Blanco y José Edgar Díaz Mercado, cuyas edades se desconocen.
El funcionario de Protección Civil señaló que una joven herida también habría fallecido cuando era trasladada de urgencia a esta capital.
Los heridos son Demetrio Ríos Peña, Angel Cárdenas Serrano, Roberto González y Zenón Meza, quienes fueron trasladados a la 35 Zona Militar para su atención médica.
Ayala Mata reiteró que solamente se ha confirmado la muerte de ocho personas y que los familiares ya velan los cuerpos en sus casas; "se analiza con las autoridades correspondientes si se les dispensa la autopsia", dijo.
El funcionario de Protección Civil informó que se solicitó al Ejército personal experto en explosivos, "pero en general participó el personal adscrito a la Base de Operaciones Mixtas asentada en Tlacotepec".
No obstante, llegaron al lugar 20 trabajadores de la Dirección de Protección Civil, 15 de la Cruz Roja, un número indeterminado de ambulancias que trasladaron a algunos heridos, los más graves al Hospital General Raymundo Abarca Alarcón, así como elementos de las policías ministerial y municipal que acordonaron el lugar.
Protección Civil señaló a su vez: "nuestro trabajo terminó y corresponde a la agencia del Ministerio Público, a la Procuraduría General de la República y al Ejército iniciar las investigaciones, debido a que el accidente fue provocado por explosivos", dijo.
Por teléfono, la secretaria del ayuntamiento, que no proporcionó su nombre, expresó: "para Tlacotepec fue una verdadera tragedia, nunca se había visto nada igual, la gente estaba consternada por la explosión ocurrida en el punto conocido como La Vecindad en el centro de la ciudad.
En la calle había gente consternada, la cual elevaba rezos para pedir por el descanso de las personas muertas. "Hubo escenas de dolor entre los familiares, sobre todo de los niños cuyos cuerpos estaban irreconocibles, además de que muchos fueron lanzados debido a la fuerte explosión", concluyó.