Causó 103 muertes
Concluyen pesquisas sobre hormona de crecimiento
París, 7 de septiembre. Después de 13 años de pesquisas, la justicia francesa comunicó el miércoles el fin de una investigación sobre la administración de una hormona de crecimiento contaminada que provocó la muerte de al menos 103 personas, informaron fuentes judiciales.
Hasta el momento, 103 personas murieron en Francia por la llamada enfermedad de Creutzfeldt-Jakob, contraída después de recibir inyecciones de hormonas del crecimiento extraídas de hipófisis humanas, tratamiento recomendado a niños que sufrían enanismo.
Al menos otras tres personas que también fueron tratadas con esta hormona sufren actualmente la enfermedad, que produce una degeneración mortal del cerebro.
Se cree que unos mil niños franceses recibieron este medicamento durante el considerado periodo de riesgo, a mediados de los años 80.
En total, 12 personas, entre ellas médicos que recetaron el medicamento, dirigentes de laboratorios y farmacias, y trabajadores del prestigioso Instituto Pasteur, están acusados de "homicidio involuntario" y "engaño" sobre la calidad sustancial de estas hormonas en el periodo comprendido entre 1982 y 1986.
Esta notificación de fin de instrucción, comunicada el miércoles, implica que las partes civiles y los acusados disponen de 20 días para formular nuevas peticiones. Está previsto que el juicio comience en 2006.
Desde 1985, los científicos habían alertado de los riesgos de contraer la enfermedad de Creutzfeldt-Jakob ligados al uso de esta hormona. Francia, contrariamente a otros países como Estados Unidos, siguió produciéndola con ligeras modificaciones coin la cua creía desactivar el virus.
La hormona transformada se elaboró en el Instituto Pasteur a partir de hipófisis humanas extraídas a cadáveres hasta su sustitución por un producto de síntesis en 1988.