La iniciativa insiste en la figura del trabajador huésped planteada por Bush
Circula la Casa Blanca propuesta sobre una nueva reforma migratoria
Sólo un grupo selecto de diputados republicanos conoce los pormenores del proyecto
Nueva York, 16 de septiembre. Para sorpresa de varios legisladores, la Casa Blanca circuló el borrador de una propuesta de reforma migratoria que permitiría a indocumentados radicados aquí solicitar visas de trabajador huésped por tres años y la oportunidad de renovarla por tres más antes de ser obligados a regresar a su país de origen, revelaron hoy Financial Times y el rotativo Arizona Daily Star.
En el proyecto de ley, presentado a un grupo selecto de legisladores republicanos por el asesor presidencial Karl Rove, los trabajadores indocumentados serían beneficiados con estos dos periodos de tres años, y aunque al concluir ese tiempo tendrían que abandonar el país, podrían hacer una solicitud para regresar otra vez.
Los diputados republicanos Jim Kolbe y Jeff Flake señalaron que estaban sorprendidos de qué tan avanzada estaba la propuesta, mientras Kolbe aseguró que "está bastante apegada" al proyecto de ley que ha promovido junto con Flake y los senadores John McCain y Edward Kennedy. Kolbe comentó que la propuesta era más "específica y concreta" de lo que se esperaba.
Según Financial Times, el proyecto in-corpora tres líneas fundamentales: mayor seguridad fronteriza, mayores penas para patrones que contratan a trabajadores in-documentados y un programa de trabajadores huéspedes más amplio.
La sola existencia del borrador -de acuerdo con los rotativos y diversos analistas- indica que el gobierno de George W. Bush tiene la determinación de promover la reforma migratoria, pues se consideraba que la Casa Blanca postergaría aún más la acción legislativa sobre el tema, por la distracción política que representa el huracán Katrina.
Por lo pronto, se espera que diversos promotores de la reforma migratoria no se sientan satisfechos con la medida que establecerá qué trabajadores tendrán que regresar a sus países después de un máximo de seis años.
Desde que el presidente Bush ofreció un acuerdo migratorio que incluía la figura del trabajador huésped, circuló la preocupación de que una buena parte de los más de 10 millones de trabajadores indocumentados no se registraran al programa si tuvieran que enfrentar la repatriación.
Por eso, una de las medidas del proyecto de ley de McCain y Kennedy es ofrecer un mecanismo para que los trabajadores indocumentados que cumplan ciertos requisitos puedan solicitar la residencia permanente.
Kolbe espera que la Casa Blanca presente formalmente la propuesta al Congreso este mismo año, aunque reconoció que las perspectivas para su aprobación son inciertas.