Kofi Annan, por estrategia que debilite al terrorismo y fortalezca la comunidad mundial
Estados pequeños mal gobernados, más peligrosos que las potencias: Rice
"Dictaduras brutales", algunos países miembros de la ONU, afirma ante la Asamblea General
Propone Teherán que empresas extranjeras participen en su programa de enriquecimiento de uranio
Nueva York, 17 de septiembre. Sin mencionar nombres, la secretaria de Estado estadunidense, Condoleezza Rice, afirmó hoy que en la actualidad estados pequeños y mal gobernados" son más peligrosos que las grandes potencias, calificó de "dictaduras brutales" algunos países miembros de la Organización de Naciones Unidas (ONU) y aseguró que ninguna de esas naciones "debería ser miembro".
Un día después de la cumbre de la ONU, que reunió a 150 jefes de Estado y de gobierno de 170 países y adoptó un proyecto de reforma calificado de decepcionante, Rice señaló que "para que esta institución se convierta en motor de cambio en el siglo XXI, debe transformarse ahora".
Asimismo, y ante el pleno de la Asamblea General de la ONU, Rice llamó a imponer la diplomacia entre Occidente e Irán por el tema nuclear, y que Naciones Unidas se reforme "ahora" para enfrentar el terrorismo, las pandemias y la pobreza.
Al responder implícitamente a los tres países (Cuba, Bielorrusia y sobre todo Venezuela) que en la cumbre acusaron a Estados Unidos de imponer su voluntad en la ONU, Rice anotó que desde hace 60 años los pequeños estados "débiles y mal gobernados" se han vuelto más peligrosos que las grandes potencias.
"En 1945 veíamos estados poderosos, agresivos, deseosos y capaces de extender sus fronteras por la fuerza, primera causa de los problemas mundiales", indicó.
"Hoy, sin embargo, es claro que son los estados débiles y mal gobernados, que no desean ni quieren que reine la justicia en su país, los que representan la principal causa de las crisis mundiales, de las guerras civiles, los genocidios, de la extrema pobreza a las catástrofes humanitarias", añadió.
"Las mayores amenazas que enfrentamos -enfatizó- emergen desde los estados y desaparecen en sus fronteras: amenazas trasnacionales como terrorismo y la proliferación de armas, las pandemias y el tráfico de seres humanos.
"Ninguna causa, movimiento o motivo justifica la muerte intencional de civiles y no combatientes (...) Es inaceptable para cualquier estándar moral".
La jefa de la diplomacia estadunidense llamó a los estados miembros de la ONU a ratificar el Convenio Global sobre Terrorismo, que debe contener todos los convenios ya existentes de la organización mundial sobre formas particulares de terror.
Sobre la pertenencia de ciertos países a la ONU y sus instancias, Rice dijo: "El Consejo de Derechos Humanos nunca puede dar a las dictaduras brutales la oportunidad de dirigir democracias responsables. El consejo debe tener autoridad moral para condenar a todos los que violen los derechos humanos, inclusive a los que se sientan en esta sala".
Una de las medidas adoptadas en la cumbre de la ONU, que concluyó el viernes anterior, fue la disolución de la desacreditada Comisión de Derechos Humanos, en la que figuraban como miembros países como Libia y Zimbabwe, cuya situación en esa materia ha sido criticada por Washington.
Se determinó también que habrá que cubrir nuevos requisitos para formar parte de un nuevo consejo, pero por ahora no se fijaron. En su momento, Estados Unidos fue expulsado de ese foro hace algunos años, para después recuperar su sitio.
"Irán debe regresar a las negociaciones con el UE-3 (Alemania, Francia y Gran Bretaña) y abandonar para siempre sus planes de capacidad nuclear", dijo.
Rice pretendió así darle más libertad a los negociadores, en momentos en que Washington no consigue suficiente respaldo en la Agencia Internacional de Energía Atómica para llevar a Irán ante el Consejo de Seguridad de la ONU con el fin de imponerle sanciones.
Este sábado, Irán propuso que empresas extranjeras participen en su programa de enriquecimiento de uranio, con el fin de garantizar a la comunidad mundial los objetivos civiles de su plan nuclear.
En un esperado discurso ante la Asamblea General de la ONU, el presidente iraní, Mahmoud Ahmadinejad, dijo que Teherán "está preparado para comprometerse en una sociedad seria con sectores públicos y privados de otros países en la implementación del programa de enriquecimiento de uranio de Irán".
La tensión entre Irán y Occidente está planteada porque Teherán asegura que su programa nuclear es legal y tiene fines energéticos civiles, postura respaldada por Rusia, China y otros países. Washington, en cambio, sospecha que el programa es una cobertura para desarrollar armas nucleares.
A su vez, el secretario general de la ONU, Kofi Annan, inauguró hoy una sesión de la Asamblea General con un enfático llamado a los estados miembros a implementar completamente un amplio paquete de reformas respaldado por líderes mundiales esta semana en la sede del organismo, que según sus críticos relegó a segundo término todo lo relacionado con el combate a la pobreza.
"Vamos a comprometernos a honrar lo que demandan de nosotros los resultados de la cumbre, y a rendir cuentas unos a otros para realizarlo", afirmó ante los 191 miembros de la asamblea.
Posiciones enfrentadas
Los países latinoamericanos se mostraron extremadamente críticos con el escaso impulso a la reforma de Naciones Unidas surgido de la Cumbre Mundial que concluyó en Nueva York el viernes, y pidieron un esfuerzo extraordinario de renovación.
En su discurso, Annan se refirió a temas irresueltos sobre los que hay posiciones enfrentadas. Respecto del terrorismo, el secretario general hizo notar que por primera vez los líderes de la cumbre habían coincidido unánimemente en su condena.
Sin embargo, instó a los estados a alcanzar una amplia convención antiterrorista, y "forjar una estrategia que debilite a los terroristas y fortalezca a la comunidad internacional".
Sobre la propuesta de remplazar la Comisión de Derechos Humanos por un organismo nuevo, más eficiente y vigilado por más miembros, Annan impulsó a los discrepantes a "hacer un esfuerzo extra y mostrar flexibilidad".
Rusia, China (que tienen poder de veto) y otras naciones en desarrollo destruyeron los planes, dirigidos por Estados Unidos, de que se formulara rápidamente un consejo de derechos humanos.
El jefe de la ONU también urgió a los miembros a "remediar nuestras penosas fallas" para convenir en temas como la no proliferación nuclear y el desarme.
"Los estados miembros no pueden llegar siquiera a un acuerdo al reafirmar los compromisos actuales", afirmó Annan. "Las apuestas están muy altas como para continuar en un peligroso camino de política diplomática".
Respecto del desarrollo, llamó a todas las naciones a cumplir sus compromisos de reducir la pobreza para 2015. Específicamente, llamó a los países ricos a cumplir sus promesas de impulsar el desarrollo financiero y aliviar la deuda.