Perecen en ataques rebeldes nueve personas, entre ellas un soldado francés

Sabotaje de la resistencia armada marca las elecciones legislativas en Afganistán

La fuerza aérea estadunidense bombardea una provincia en el oriente del país asiático

REUTERS, AFP Y DPA

Kabul, 18 de septiembre. Casi cuatro años después de que una coalición militar encabezada por Estados Unidos depuso al gobierno talibán, Afganistán realizó hoy sus primeras elecciones legislativas en 36 años, en un proceso marcado por actos de sabotaje de la resistencia armada, que alcanzaron inclusive a la capital y obligaron a la fuerza aérea estadunidense a bombardear la provincia de Jost, en la región este del territorio.

Nueve personas fallecieron a consecuencia de los ataques perpetrados por rebeldes afganos en Kabul y cinco provincias: Nuristán, Jost, Helmand, Spin Dak y Baghlan.

Entre los fallecidos están siete civiles afganos, un soldado del gobierno afgano y un militar del contingente francés -compuesto por 600 hombres-, que integra las tropas de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

Esta es la primera vez que un soldado francés muere en Afganistán desde que el país asiático fue invadido en noviembre de 2001. El soldado pereció por la explosión de una mina en la provincia de Spin Dak. En esa zona, las fuerzas de la OTAN realizan operaciones contra la resistencia talibán en la frontera entre Afganistán y Pakistán.

Los ataques en Kabul fueron hechos con proyectiles de mortero que impactaron en terrenos de la Organización de Naciones Unidas, supervisor de los comicios, pero sin causar pérdidas humanas.

En los ocho meses transcurridos del año, un millar de afganos ha perecido en atentados y enfrentamientos en poblaciones y regiones remotas. Los hechos de guerra aumentaron a medida que se aproximó la fecha de las elecciones. Entre el viernes y el sábado fueron asesinados siete candidatos y seis personas que trabajaban en la organización del proceso.

Entre los muertos de este año están 49 soldados estadunidenses que fueron abatidos en enfrentamientos esporádicos con la resistencia o en accidentes aéreos.

Las elecciones fueron vigiladas por 100 mil soldados repartidos en tres contingentes: 20 mil de Estados Unidos, 10 mil de la OTAN y unos 70 mil integrantes del ejército y la policía de Afganistán.

Con un costo de 159 millones de dólares, los comicios fueron convocados para elegir a los 249 miembros de la Cámara baja -conocida como Wolesi Jirga o Casa del Pueblo- y a los 420 miembros de los 34 concejos provinciales, que posteriormente elegirán al Senado afgano. Las candidatas tienen reservadas 68 sillas de la Casa del Pueblo.

Doce millones 500 mil afganos conforman la lista de electores, que debieron escoger entre 2 mil 800 candidatos, casi un año después de que fue electo el presidente Hamid Karzai, en octubre de 2004.

Los ciudadanos tuvieron que votar en boletas gigantes -con seis y siete páginas-, que contenían cientos de nombres, fotografías y símbolos partidistas, algunas hasta con 600 candidatos.

Testimonios recogidos por agencias de noticias internacionales indicaron que los votantes emplearon un promedio de 10 minutos en las casillas.

El ministro del Interior de Afganistán, Ali Hamid Jalali, afirmó que la movilización de fuerzas militares y policiales en el país logró neutralizar las acciones de sabotaje, e informó que "más de la mitad" de los ciudadanos emitieron su voto en las urnas. El dato fue confirmado por la principal organización de observadores, la Asociación por Elecciones Libres y Justas en Afganistán, que desplegó representantes en casi todo el país.

La última experiencia de Afganistán en la elección de legisladores ocurrió en 1969, durante la monarquía constitucional de 1964 a 1973.

En este país montañoso y con escasa infraestructura de caminos, los primeros resultados de los comicios de hoy estarán disponibles hasta el 10 de octubre y la información definitiva será conocida el 22 de ese mes.

Después de la adopción de una constitución en enero de 2004 y de la elección presidencial en octubre del año pasado, las legislativas constituyen la tercera etapa del proceso de transición política pactado por la conferencia internacional de Bonn de finales de 2001.