Usted está aquí: lunes 19 de septiembre de 2005 Capital En 4 años se han construidos 12 mil casas en zonas de mediana y alta afectación sísmica

Exigen diputadas que se establezca un programa de información sobre desastres

En 4 años se han construidos 12 mil casas en zonas de mediana y alta afectación sísmica

En Alvaro Obregón, los residentes levantan hasta tres pisos en proyectos que soportan un nivel

RAUL LLANOS

Durante los pasados cuatro años, más de 12 mil viviendas han sido construidas en las cuatro delegaciones centrales del Distrito Federal: Miguel Hidalgo, Cuauhtémoc, Venustiano Carranza y Benito Juárez, que están también catalogadas como de mediana y alta afectación sísmica, lo que implica un peligro para los habitantes de esos lugares.

Así lo manifestó la diputada local Guadalupe Ocampo, quien expresó que a pesar de que buena parte de los daños ocasionados por los sismos de 1985 ocurrieron en esas demarcaciones, siguen construyéndose unidades habitacionales y condominios horizontales.

Frente a esa situación, consideró imprescindible que el jefe de Gobierno, Alejandro Encinas Rodríguez, establezca un programa emergente de información sobre los riesgos sísmicos para las familias que día a día llegan a establecerse esas demarcaciones.

La legisladora del Partido de la Revolución Democrática recordó que el 7 de diciembre de 2000, el entonces mandatario, Andrés Manuel López Obrador, emitió el bando número dos, que restringió el crecimiento urbano explosivo en nueve demarcaciones, con el objetivo de propiciar mayor crecimiento en las delegaciones centrales.

"Si bien dicho bando se tomó para revertir el crecimiento desordenado de la ciudad, e impedir que la mancha urbana siguiera creciendo hacia las zonas de recarga de mantos acuíferos y donde se produce la mayor parte del oxígeno de la ciudad -dijo-, nunca se tomó en cuenta que las delegaciones centrales están ubicadas en las zonas clasificadas por las autoridades como II y III, es decir, de mediana y mayor afectación sísmica".

Citó que un estudio realizado por la Organización de Naciones Unidas y del Instituto de Geofísica de la UNAM advierten que el suelo de la zona central del Distrito Federal es de origen lacustre y constituido por depósitos de arcilla blanda de alta compresibilidad, no obstante no desarrollan programas integrales sobre el peligro que representa un nuevo terremoto.

La diputada Araceli Vázquez Camacho expresó que la vulnerabilidad de los suelos se incrementa con la sobrexplotación que se ha hecho de los mantos freáticos, la extracción irracional de agua, que genera hundimientos diferenciales, sistemáticos, en algunos casos hasta de 10 centímetros al año en ciertas zonas.

Detalló el caso específico de la delegación Alvaro Obregón, cuyo suelo es arcilloso, con minas, y cuyas casas que estaban planeadas para un piso ahora son de tres o más niveles, o bien se siguen poblando barrancas con familias que viven en casas endebles.

Todo eso, dijo, es un serio problema, pues a la par está una falta de la prevención de catástrofes. "Nada más recordamos el 19 de septiembre de cada año, pero no tenemos ni se ha fomentado una cultura de prevención, de protección civil; no estamos educando a los niños, no hay una cultura de formación, de prevención, y eso al rato el tiempo nos lo va a cobrar". Expresó que las autoridades capitalinas deberían incorporar programa obligatorios en las escuelas en los que la protección civil sea parte de las materias, del quehacer cotidiano de los profesores y estudiantes.

 
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