Los escándalos involucran a Creel y a hijos de Sahagún
Fonden, colapsado por el desvío de más de $800 millones
Ampliar la imagen Los da�ocasionados por los sismos de 1985 ocasionaron que varias construcciones fueran demolidas. En el periodo de Santiago Creel al frente de la Secretar�de Gobernaci�el Fonden fue utilizado para diversos il�tos, como jinetear el presupuesto que se le asignaba FOTO Fabrizio Le�iez Foto: Fabrizio Le�iez
Creado luego de los sismos de 1985, el Sistema de Protección Civil cumple hoy 20 años, aunque no hay motivos para festejar, pues llega a las dos décadas en medio de una crisis que ha puesto en evidencia graves irregularidades y corruptelas en la administración de su Fondo Nacional de Desastres Naturales (Fonden) durante la gestión de más de cuatro años de Santiago Creel al frente de la Secretaría de Gobernación.
Desde ambas cámaras del Congreso se han hecho infinidad de denuncias sobre desvíos de recursos del Fonden con fines electorales y para beneficiar a un grupo de no más de diez empresas privadas. Los legisladores piden cuentas por un fraude superior a los 800 millones de pesos, que incluyó la inversión de dinero público -cuyo fin es el apoyo a damnificados por huracanes y otros fenómenos naturales- en casas de bolsa, de manera específica en IXE.
El pasado 6 de julio, ante la Comisión Permanente, la diputada priísta Martha Palafox pidió que se investiguen las versiones en torno a que una empresa presuntamente propiedad de uno de los hijos de Marta Sahagún, es una de las beneficiadas con compras millonarias a cargo del Fonden, sin licitación alguna.
La senadora del PRI Noemí Guzmán Lagunes señaló que el gobierno foxista ha defraudado a los mexicanos más necesitados del país, al dejarlos en el abandono cuando han sido afectados por huracanes y otros fenómenos climáticos, mientras los recursos del Fonden se canalizan a entidades donde no hubo emergencias, "pero sí procesos electorales". Prueba de ello es que los mayormente beneficiados fueron Guanajuato, Querétaro, Morelos y otros gobernados por el PAN, agregó.
A su vez, Arturo Fernández López, quien destapó "esa danza de millones" al denunciar las desviaciones de recursos en que incurría la Coordinación General de Protección Civil de la Secretaría de Gobernación -que encabeza María del Carmen Segura Rangel- relata en entrevista que su decisión de hacer públicos los malos manejos le costó el trabajo y casi la vida, ya que fue víctima de un atentado en octubre de 2003.
Fernández López llevaba 33 años en la administración pública en 2002. Se desempeñaba como subdirector de Recursos Financieros de la Coordinación General de Protección Civil y comenzó a detectar operaciones dudosas, compras a destiempo a unos cuantos proveedores, canalización de la ayuda a estados sin litorales y que por tanto no tenían el riesgo de ser afectadas por ciclones tropicales.
Se dio cuenta que la coordinación a cargo de Segura Rangel violaba las normas de operación del Fonden, en las que se establece la necesidad de integrar una reserva estratégica que permitiera proveer a la Secretaría de Gobernación de los materiales de protección a la vida, la salud y al albergue temporal de los afectados por un desastre natural.
La estrategia que se siguió cuando Creel estuvo al frente de la Secretaría de Gobernación fue hacer las compras a última hora, cuando inclusive los ciclones ya estaban encima, para poder hacer los pedidos "por fuerza mayor" y no tener que licitar. En 2001 se compraron los materiales y medicinas cuando la temporada de huracanes llevaba tres meses y medio de iniciada y así siempre, hasta el 2004.
Fernández López detectó también que esos recursos comprados a destiempo y a precios altos se hacían llegar a entidades de la República que no tenían litorales ni riesgo de ciclones. En 2001, de mercancías valoradas en 19.8 millones de pesos y adquiridas "por fuerza mayor", la mayor parte -17.2 millones de pesos- se canalizaron a estados que no requerían ayuda.
Como sus quejas no fueron atendidas y Segura Rangel comenzó a hostigarlo, Fernández López presentó una queja en el Organo Interno de Control de la Secretaría de Gobernación, el 12 de julio de 2002. Una semana después, narra, se le impidió la entrada a su centro de trabajo y paralelamente se le acusó de abandono de empleo.
Pese a ello, siguió con la denuncia, pidió la intervención de la entonces Secretaría de la Contraloría y continuaron los ataques. No desistió y como en la dependencia a cargo de Creel se le negaron los "libros blancos" del Fonden, es decir, los informes anuales del manejo de ese fondo, acudió al Instituto Federal de Acceso a la Información Pública (IFAI). En octubre de 2003 fue objeto de un atentado. Desde un auto, dos sujetos le dispararon cuatro tiros, uno de ellos lo hirió en la mandíbula. Tras 19 días en el hospital, siguió con su lucha. Gracias al IFAI consiguió la información que Creel y Rangel Segura querían mantener secreta y encontró que mientras de 1999 a 2000, en el último año de Zedillo, el Fonden erogó 23.3 millones de pesos, mientras que de 2001 a 2004 entregó mil 113.8 millones de pesos que fueron además manejados con absoluta discrecionalidad.
Encontró también no más de diez empresas privilegiadas por el Fonden. Entre ellas Spite SA de CV, a la que se le hicieron pedidos de productos farmacéuticos por 100 millones de pesos en 2001, una cantidad similar en 2002 y 25 millones de pesos en 2003. También beneficiaria de esa compras de "emergencia" fue Distribuidora Integral de Medicamentos, que tan sólo en 2003 logró una venta de 95 millones de pesos.
En julio de 2004 el diputado priísta David Hernández Pérez propuso ante la Comisión Permanente que se demandara al entonces secretario de Gobernación, Santiago Creel, suspender a Rangel Segura, luego de la auditoría que llevó a cabo el organo interno de la propia dependencia, en la que se encontraron graves irregularidades de enero de 2002 a noviembre de 2003 en la Coordinación de Protección Civil.
Una de las anomalías es que la empresa Spite SA de CV no entregó medicamentos con valor de 316 mil 579 pesos, pese a que ese importe sí fue pagado. Asimismo se descubrieron facturas duplicadas por más de un millón de pesos, pagos en exceso a otros proveedores, compra de colchonetas y cobertores a Asesoría y Gestoría Corporativa, registrada ante las autoridades hacendarias, como una firma de contaduría y auditoría.
Además hay otros desvíos. El señor Fernández López detectó en el "libro blanco" del Fonden correspondiente a 2003 que Rangel Segura colocó en casas de bolsa los recursos para desastres de ese fondo. En octubre de ese año, la Secretaría de Hacienda autorizó 160 millones para atender emergencias "y tan pronto como llegaron, tomaron de ahí 80 millones de pesos y los invirtieron en IXE", señaló.
Es por ello "y por todas las demás corruptelas que la coordinadora de Protección Civil no ha querido comparecer en el Congreso", señaló por su parte la senadora Guzmán Lagunes. Dijo que tienen documentado que parte de la desviación de recursos del Fonden fue para beneficiar electoralmente al partido en el poder. Un ejemplo, dijo, fue que los recursos para los damnificados del huracán Isidoro llegaron casi un año después del fenómeno, durante el proceso electoral por la renovación de la gubernatura, que ganó el PAN.