En duda el respeto de Pyongyang a los acuerdos alcanzados en Pekín
Irán y Corea del Norte endurecen sus posturas sobre el tema nuclear
Teherán amenaza con abandonar el TNP y condicionar la venta de petróleo si siguen las presiones
París, 20 de septiembre. Irán y Corea del Norte endurecieron hoy sus posiciones en sus negociaciones sobre el tema nuclear: Teherán amenazó con abandonar el Tratado de No Proliferación (TNP) y condicionar la venta de petróleo al apoyo que reciba en este tema, y Pyongyang anunció que no dejará su programa nuclear hasta tener un reactor que le permita generar electricidad.
En respuesta al planteamiento iraní, la secretaria de Estado estadunidense, Condoleezza Rice, indicó que el aislamiento de la república islámica se debe a que "nadie confía en ellos" en el tema nuclear.
A su vez, el vocero de la Casa Blanca, Scott McClellan, al rechazar la exigencia norcoreana, consideró que los dirigentes de la nación asiática necesitan "tiempo para reflexionar".
Los anuncios de Irán y Corea del Norte surgen en momentos en que la Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA) evalúa enviar al Consejo de Seguridad de Naciones Unidas un proyecto de resolución sobre el caso iraní, y un día después de que Corea del Norte firmó una declaración en Pekín junto a Corea del Sur, China, Japón, Rusia y Estados Unidos, en la que reafirmó su compromiso de renunciar a su programa nuclear militar y suscribir el TNP, que abandonó en 2002.
El representante iraní en las negociaciones sobre el programa nuclear, Ali Larijani, anunció hoy que su país podría verse obligado a abandonar el TNP si se utiliza en su contra "el lenguaje de la fuerza".
Más aún, el funcionario anunció que Irán condicionará sus ventas de petróleo y otros intercambios al apoyo que los países le den en estas negociaciones sobre su programa nuclear.
"Los países que tienen transacciones económicas con Irán, especialmente en el campo del petróleo, no han defendido suficientemente los derechos de Irán", se lamentó Larijani.
"Irán decidirá la participación de sus socios en su economía en función del apoyo que le aporten en la defensa de su derecho nacional" en el terreno nuclear, subrayó.
Por su parte, Corea del Norte sembró la duda sobre el respeto de su compromiso de renunciar al arma atómica, al poner de nuevo como condición previa para abandonar su programa nuclear militar la entrega de reactores de agua liviana para cubrir sus necesidades de electricidad.
El texto refrendado el lunes indica que las otras partes "respetan" la posición norcoreana de considerar como su "derecho" el desarrollo de un programa nuclear civil. Pero precisa que "discusiones" para la entrega a Corea del Norte de un reactor de agua liviana "se podrían producir en el momento oportuno".
La entrega de este tipo de instalaciones no figuraba como condición previa al desmantelamiento del programa nuclear y el representante estadunidense en las discusiones, Christopher Hill, había declarado que "el momento oportuno sólo llegaría cuando (Corea del Norte) hubiera desmantelado de manera rápida el conjunto de su armamento nuclear y todos sus programas nucleares".