Recursos para atención a las mujeres, insuficientes
Para 2006, el gobierno federal pretende invertir 21 mil 255.3 millones de pesos en los programas de atención a las mujeres. Sin embargo, los recursos fueron considerados insuficientes para abatir los rezagos históricos -especialmente en salud- por la asesora principal en temas de género del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo en México, Itza Castañeda. Consideró que no basta la voluntad política para atender la problemática, sino que es necesario motivar esfuerzos y destinar recursos para cumplir con las Metas del Milenio, en específico reducir en tres cuartas partes la mortalidad materna entre 1990 y 2015. México requiere evitar 900 defunciones por año, pero el problema es que 12 estados concentran cerca de 75 por ciento de estas defunciones. Son las entidades que tienen más altos niveles de marginación y, por tanto, presentan menos cobertura de uso de anticonceptivos y de atención de partos por personal calificado. De acuerdo con los avances presentados por el gobierno, la muerte de mujeres es reconocida como un problema de salud pública y como expresión de la desigualdad en diversas regiones del país, lo que indica la necesidad de impulsar medidas para mejorar la cobertura y la calidad sanitarias durante el embarazo, el parto y el puerperio. En 1955 hubo 197.4 defunciones en el sector femenino por cada cien mil nacidos vivos; en 2003 disminuyó a 65.2. Para alcanzar el objetivo trazado hacia 2015 se requiere disminuir el total de muertes por año. El gobierno reconoce que la principal causa de fallecimiento en este rubro son los trastornos hipertensivos del embarazo, parto y puerperio; seguido por hemorragias obstétricas y después las complicaciones del aborto. Estas tres causas representaron en conjunto cerca de las dos terceras partes de defunciones de 2003 y en total aumentaron su peso relativo en 2.9 puntos porcentuales en comparación con 1990. Itza Castañeda apuntó que la mortalidad materna "tiene que ver con educación, salud, ingreso y muchísimos otros factores que rebasan la dimensión salud por sí sola".
Alma E. Muñoz