Poeta declina invitación de Laura Bush para "no avalar acciones arrogantes" de EU
Cindy Sheehan pide en el Capitolio la salida de soldados estadunidenses de Irak
Manifestantes altermundistas protestan en Washington contra la reunión del BM y el FMI
Ampliar la imagen Cindy Sheehan, quien perdi�un hijo en la guerra de Irak, recorri�er los pasillos del Capitolio, en Washington, y pidi�trevistarse con legisladores para solicitarles que consideren el fin de la ocupaci�e Irak y regresen a los soldados estadunidenses a casa FOTO Reuters Foto: Reuters
Washington, 22 de septiembre. Mientras Cindy Sheehan, la madre de un soldado caído en Irak, visita el Capitolio y la Casa Blanca, decenas de miles de personas preparan su arribo a esta ciudad para manifestarse el fin de semana contra la guerra y demandar el retorno inmediato de las tropas estadunidenses.
Al aproximarse el huracán Rita a las costas de Texas, vientos de disidencia empiezan a correr por las calles de esta capital, donde activistas están vinculando las crisis de los dos golfos (el Pérsico y el de México), y las políticas de globalización empresarial. El sábado está programada una marcha y manifestación nacional contra la guerra y las políticas sociales y económicas del gobierno de George W. Bush. Al mismo tiempo, se planean acciones para protestar contra las políticas neoliberales, ya que se celebra en estos mismos días la reunión del Banco Mundial y el Fondo Monetario Internacional.
Hoy Sheehan recorrió los pasillos del Capitolio buscando entrevistarse con senadores y representantes para demandar el retorno de las tropas y hacerles la misma pregunta que deseaba hacerle al presidente George W. Bush en su vigilia de un mes frente a su rancho en Texas: "¿Cuál fue la noble causa por la que murió mi hijo?" Ha logrado verse con algunos legisladores o sus representantes, aunque varios se han negado a darle cita, particularmente los líderes de ambas cámaras.
Sheehan llegó ayer a esta capital en una caravana de tres campers y varios automóviles que transportan a más de 30 familias de militares y veteranos de esta y otras guerras, culminando así su gira de 21 días. Salieron de su campamento en Crawford, Texas, el 31 de agosto y visitaron 51 ciudades de 28 estados en un esfuerzo para movilizar a la ciudadanía contra la guerra. Sheehan y sus colegas serán las estrellas en la manifestación del sábado, en la cual se espera la participación de unas 100 mil personas.
"Ayer, nueve estadunidenses murieron en Irak, y sólo la semana pasada, más de 200 civiles iraquíes perdieron la vida. Nuestros representantes y senadores tienen que asumir la responsabilidad por esta guerra, y adoptar decisiones para acabar con ella", declaró Sheehan hoy al recorrer las oficinas de los legisladores.
Al llegar aquí ayer, Sheehan trasladó el Campamento Casey (llamado así por su hijo), desde Crawford al centro de esta capital, y se dirigió directamente a las rejas de la Casa Blanca, donde intentó entregar una carta al presidente con la misma pregunta que le hizo en Texas. Los guardias de seguridad no le permitieron el paso, pero algún funcionario menor de la Casa Blanca salió para recibir la misiva. No obstante, el mensaje ya se ha recibido, y miles de voces, dicen los organizadores, lo gritarán alrededor de la Casa Blanca el sábado.
En otro frente, la poeta Sharon Olds declinó la invitación de la primera dama Laura Bush para participar en el Festival Nacional del Libro aquí, que se celebrará el mismo día de la manifestación contra la guerra. Olds fue una de las figuras literarias invitadas a leer sus obras y después participar en un desayuno en la Casa Blanca.
Olds respondió a la Sra. Bush, en una carta abierta publicada ayer en el sitio de Internet de la revista The Nation, que "no puedo enfrentar la idea de compartir el pan con usted. Sabía que si me sentaba a comer con usted, me sentiría como si yo estuviera avalando lo que percibo como acciones salvajes y arrogantes del gobierno de Bush. Lo que continuaba presentándose en mi mente era que yo estaría tomando alimento de la mano de la Primera Dama que representa un gobierno que lanzó esta guerra y que desea su continuación", escribió al final de un largo argumento sobre la literatura, y sobre la manera engañosa y antidemocrática en que se realizó la guerra contra Irak.
Olds concluyó en su carta formal a la señora Bush que "tantos estadunidenses que sentían orgullo en nuestro país ahora sienten angustia y vergüenza por el régimen actual de sangre, heridas y fuego".
En tanto, la semana pasada, la asamblea municipal de Chicago aprobó una resolución formal con 29 votos en favor, nueve en contra y 12 abstenciones, instando al gobierno federal a iniciar de inmediato el retiro rápido y ordenado de Irak. San Francisco aprobó una resolución parecida recientemente, igual que ciudades más pequeñas como Evanston, Illinois y Gary, Indiana.
Por otro lado, manifestantes altermundistas programaron hoy un espectáculo cerca del Banco Mundial aquí, en reconocimiento a la unión entre intereses empresariales y militares ejemplificado por el hecho de que Paul Wolfowitz, el ex subsecretario de Defensa, ahora es presidente del Banco Mundial. Por lo tanto, realizaron una boda entre el Pentágono y el Banco Mundial.
En medio de tormentas que revelan las consecuencias de las políticas económicas y sociales del gobierno de Bush, y el creciente coro, con más voces militares cada día, contra su guerra, los días en Washington se están llenando de voces disidentes.
Como opinó un marine disidente que fue desplegado a Irak, Jeff Key, y ahora es activista y dramaturgo, en comentarios al Institute for Public Accuracy, "supuestamente estábamos ahí por la democracia. Bueno pues, es la clara voluntad del pueblo iraquí que nos salgamos de ahí; y ahora es la voluntad del pueblo estadunidense que nos retiremos de ahí. Los líderes deben cumplir con la voluntad de los pueblos o ser destituidos".