El ex presidente trata de impedir una victoria de la izquierda en 2006, advierte el PRD

Malestar por el protagonismo de Carlos Salinas; AN intenta restarle importancia

Senadores priístas exigen que se esclarezca la reunión en casa del ex mandatario

DE LA REDACCION

Senadores priístas cuestionaron severamente la reunión del ex presidente Carlos Salinas de Gortari con funcionarios foxistas y diputados del PRI, al grado de exigir su "total esclarecimiento", mientras legisladores del PAN se tomaron las cosas con calma y señalaron que a esas revelaciones se les está dando "demasiada publicidad" y una importancia de la cual carecen.

Para Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano lo único que no es nuevo es que el presidente Vicente Fox Quesada no estaba enterado de nada. El ex candidato presidencial del sol azteca dijo que no ve nada ilegal en ese encuentro, que tuvo el propósito de pactar la reforma fiscal de 2003.

Interrogado sobre el particular, Porfirio Muñoz Ledo manifestó que no tenía opinión, pero sí información: recordó que en mayo de 2002, cuando era embajador en la Unión Europea, se llevó a cabo en el restaurante Lola, en Bruselas, una cena entre el ex canciller Jorge Castañeda y Carlos Salinas de Gortari.

"De ahí surgió todo un proyecto", expresó. Precisó que después de ese encuentro el gobierno federal dejó de presionar al PRI con el Pemexgate y tampoco se creó una comisión de la verdad sobre los crímenes cometidos en la guerra sucia.

El ex canciller Castañeda, expuso Muñoz Ledo, tenía la estrategia de acercarse al ex presidente Salinas "para que puenteara con el PRI".

Así, el gobierno de Vicente Fox, "en vez de hacer realidad la reforma del Estado, que implicaba necesariamente una convocatoria a todas las fuerzas políticas y organizar una comisión de la verdad, optó por sacar adelante las llamadas reformas estructurales, que eran un compromiso establecido con los sectores económicos", agregó Muñoz Ledo, en entrevista en Polifórum Cultural Siqueiros.

El gobierno de Fox "cometió su más grave error: poner por delante sus reformas; buscó ganarse a Salinas de Gortari por medio de Elba Esther Gordillo para dividir el voto del PRI . Otra estrategia fue la de amenazar a ese partido, chantajearlo con lo del Pemexgate, pero esas estrategias fallaron", comentó.

Ayer mismo Castañeda descalificó las imputaciones que hizo Muñoz Ledo respecto a su papel de intermediario foxista en los acercamientos con el ex presidente Salinas. "Porfirio sabe muchas cosas, es muy intuitivo; unas las sabe, otras las adivina y otras las inventa. Yo dejo a Porfirio la responsabilidad de las cosas que dice", expresó.

-Yo no era ningún enlace. La reunión, la cena que tuve con Salinas en Bruselas hace cuatro años fue muy pública, en alguna medida gracias a Porfirio Muñoz Ledo, pero fue en un restaurante, donde cualquiera podía ir y vernos, pero no había ningún secreto. Tampoco pacté ninguna reforma, aunque me hubiera encantado -declaró Castañeda.

Humberto Roque, senador y ex dirigente nacional del PRI, consideró que la confirmación de este encuentro sólo reitera la imagen "falaz y de engaño del presidente Fox, quien en su enorme y reiterativo despliegue publicitario dice que ha roto con el pasado cuando en realidad quiere negociar en lo oscurito" con personas vinculados al PRI".

Para el también senador priísta Manuel Bartlett estos hechos "descobijan totalmente" tanto a los foxistas como a Roberto Madrazo, quien "por cierto también debe aclarar lo tratado con el ex presidente Ernesto Zedillo, con quien también dice haberse reunido. Porque con Salinas ya está claro qué trató: definir cómo obligar al PRI a hacer lo que quería Fox. Eso es vergonzoso", dijo el senador, a quien en 1988 se le cayó el sistema electoral, lo cual permitió que Carlos Salinas llegara al poder.

Roque y Bartlett Díaz consideraron que "se debe hablar claro y decir públicamente qué funcionarios estuvieron presentes en la reunión entre el ex presidente Salinas, funcionarios foxistas y diputados. No se puede poner punto final a esa discusión si no se transparenta qué se trató y quiénes estuvieron". '

El primero insistió en que mientras no se transparente lo ocurrido en la casa del ex presidente "no podemos poner punto final a esa discusión".

En tanto, el senador blanquiazul César Jáuregui dijo que en estricto sentido esa reunión entre panistas y priístas con el ex presidente Salinas "no tiene nada de malo, siempre que vean por el interés de México. Si ya son muchos los que reconocen ese encuentro, entonces sí se reunieron".

El saldo mortal del salinato

En contraste, el PRD -que en el gobierno de Salinas sufrió el asesinato de más de 300 militantes y dirigentes- ayer aseguró que la reaparición del ex mandatario es para intentar cerrar el camino al sol azteca en las elecciones de 2006, además de que con su advertencia de "dejar las sombras" rompe el código no escrito de los ex presidentes de no hacer política.

Consideró que Salinas de Gortari es un representante de los intereses del capital extranjero, los cuales coinciden plenamente con las reformas estructurales que se han planteado para el país.

Pablo Gómez, coordinador del PRD en la Cámara de Diputados, recordó que Salinas tiene "gran parte de la responsabilidad de crisis social actual".

En cambio, el coordinador de los diputados del PAN, José González Morfín, pasó de una débil petición de que se esclarezcan los temas que se trataron en la citada reunión a decir que ese encuentro no tuvo ninguna importancia para el país.

El dirigente nacional del PRI, Mariano Palacios Alcocer, advirtió que no es posible conculcar los derechos políticos de Carlos Salinas por haber sido presidente de la República. "Lo que quiero decir es que, en mi opinión, bajo mi responsabilidad, los asuntos del partido se resuelven en el partido; las decisiones de los grupos parlamentarios se discuten en los grupos parlamentarios, y cualquier otro evento que se dé, se da bajo la estricta responsabilidad de quienes lo realizan", enfatizó el dirigente del tricolor.

Por su parte, Felipe Calderón, precandidato del PAN a la Presidencia de la República, señaló que la influencia salinista se da tanto en el PRI como en el PRD, pero reconoció que él también, como secretario de Energía, se reunió con ex funcionarios de ese periodo, como es el caso de Luis Téllez, ex subsecretario de Agricultura y uno de los negociadores del TLCAN. Indicó que los equipos que formaron parte del gobierno de Salinas se acomodan hoy en los equipos de campaña del PRD y del PRI, específicamente en el de Roberto Madrazo, ya que les da "consejos fiscales".

Finalmente, el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Alejandro Encinas, señaló que la verdadera "política ficción" es la que hace el ex presidente, quien nunca se ha ido del escenario político. "Tan no se ha ido que las preguntas que no contestó durante la entrevista que le hizo una conductora de televisión fueron justamente las que tienen que ver con su relación con el empresario Carlos Ahumada y con la reunión respecto a la reforma fiscal, lo cual habla de que desde hace tiempo ha estado operando aquí".

En su habitual conferencia matutina dijo que las declaraciones de Salinas sí son una muestra ejemplar de "política ficción, donde el pasado se olvidó, se olvidaron los actos arbitrarios, los perredistas asesinados, el daño que se le hizo al país". Más adelante Encinas afirmó: "ayer fuimos testigos de una entrevista donde lo más importante fue lo que no se contestó".

Con información de Alonso Urrutia, Víctor Ballinas, José Antonio Román, Ciro Pérez, Bertha Teresa Ramírez y Angélica Enciso, reporteros