Continúan las ejecuciones
El crimen organizado perpetró cuatro homicidios más en Nuevo León, Sinaloa, Baja California y Tamaulipas. Uno de estos crímenes ocurrió cerca de la medianoche del lunes en Ciudad Guadalupe, cuando Miguel Angel Esquivel Cantú, agente del Ministerio Público Federal adscrito a la agencia antidrogas de esa localidad neoleonesa, fue ejecutado a balazos mientras viajaba en su camioneta acompañado de un supuesto informante, quien resultó ileso.
Según la Procuraduría de Justicia, desde un vehículo blanco dispararon una ráfaga de ametralladora al fiscal, quien murió por disparo en la cabeza.
Napoleón Cantú Cerna, secretario de Gobierno del estado, reconoció que la policía por sí sola no puede enfrentar con éxito a las bandas de narcotraficantes, y exhortó a la población a utilizar el número telefónico 089 para presentar denuncias anónimas.
Aunque se le recordó que esta ejecución es la 24 de 2005, expuso que el estado "está muy lejos de ser centro de operaciones" de las mafias, por lo cual pidió a la Procuraduría General de la República revelar qué información tiene respecto a que Nuevo León o Monterrey son centros del narcotráfico.
El gobernador de Baja California, Eugenio Elorduy, rechazó también los señalamientos de Pedro Peñaloza, funcionario de la PGR, de que en México hay más violencia y asesinatos que en ciudades de Estados Unidos.
Pero apenas la noche del lunes, en el centro de Tijuana, bomberos que acudieron a apagar un auto que se incendió encontraron en su interior un cuerpo calcinado. Con este asesinato, que se atribuye a ajuste de cuentas del hampa, ya suman 319 los del año.
En Sinaloa, en tanto, fue localizado en una parcela de El Mezquite un residente de Salvador Alvarado en avanzado estado de descomposición y con varios impactos de bala. Los agentes identificaron a la víctima como Juan Cháidez Ramírez. Asimismo, en Nuevo Laredo fue asesinado a tiros Oscar Martínez Barrón.
David Carrizales, Antonio Heras, Javier Valdez y Carlos Figueroa, corresponsales