Se usará la fuerza pública: gobernador de Veracruz
Siguen ocupados la mayoría de ingenios en varios estados
La mayoría de los 22 ingenios veracruzanos continuaron ocupados ayer como parte de la movilización que realizan los productores de caña de azúcar en demanda de que el gobierno federal se desista de la acción de inconstitucionalidad que promovió ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación contra la ley cañera aprobada en agosto pasado.
Por la misma causa, cientos de cañeros cerraron también los ingenios y bodegas de azúcar de Ciudad Mante y Xicoténcatl, en Tamaulipas, y el del municipio de Cuauhtémoc, en Colima.
El subsecretario de gobierno de Veracruz, Héctor Yunes Landa, reveló que la administración estatal propuso al gobierno federal desistirse de la acción de inconstitucionalidad contra la ley cañera, pero se le respondió que no hay una norma expresa que establezca el desistimiento en relación con ese recurso.
De su lado, el gobernador Fidel Herrera Beltrán advirtió a los cañeros que no se permitirá que se prolongue el bloqueo durante la zafra, la cual comienza en noviembre, ni que se realicen obstrucciones en las vías carreteras e incluso, para impedirlo, se hará uso de la fuerza pública.
"Aquí se aplicará la ley y no se tolerará perjuicios a terceros", afirmó, a la par que llamó a las organizaciones de agricultores para seguir los cauces legales, en lugar de recurrir a acciones indebidas de presión.
En Tamaulipas, cientos de productores de caña mantienen en su poder los ingenios y bodegas de azúcar de Mante y Xicoténcatl, propiedad de la familia Sainz, inconformes con el recurso de inconstitucionalidad promovido por el gobierno. Aunque sus dirigentes Ricardo Pizaña y Vicente Berástigui participan en las manifestaciones en la ciudad de México, los agricultores decidieron sumarse a la protesta nacional.
En Colima 200 cañeros ocuparon también el ingenio de Quesería, en el municipio de Cuauhtémoc. Encabezados por Agustín Facio Rogelio, secretario general de la Unión Local de Productores de Caña, los campesinos impidieron desde la madrugada de ayer el ingreso a cientos de obreros que tenían la encomienda de reparar y dar mantenimiento a la maquinaria de la fábrica.
Sólo se permitió el ingreso de 10 trabajadores seleccionados por la empresa para realizar operaciones contables y que no se retrase el pago de salarios a los obreros. En Colima, 4 mil familias dependen directamente del cultivo e industrialización de la caña de azúcar.
Guadalupe López, Andrés T. Morales, Martín Sánchez y Verónica González, corresponsales