Encuentro en Roma
Pide el Papa a los obispos atender a los pobres del país
Los obispos mexicanos deben prestar especial atención a los grupos más desprotegidos y pobres, que representan el sector más amplio de la población, "víctimas de estructuras insuficientes e inaceptables", dijo ayer el papa Benedicto XVI al concluir la visita ad limina apostolarum que le hicieron los prelados del país a lo largo de este mes.
El pontífice les anunció que es necesario "aliviar no sólo las necesidades más graves, sino que se ha de ir a las raíces, proponiendo medidas que den a las estructuras sociales, políticas y económicas una configuración más ecuánime y solidaria".
El pontífice dijo a los purpurados, en su mayoría del sur del país, encabezados por el cardenal Juan Sandoval Iñiguez, arzobispo de Guadalajara, que desde el Evangelio la respuesta adecuada es promover la solidaridad y la paz, "que hagan realmente posible la justicia. Por eso la Iglesia trata de colaborar eficazmente para erradicar cualquier forma de marginación, orientando a los cristianos a practicar la justicia y el amor".
En este sentido, les pidió animar a quienes disponen de más recursos para que se dirijan a los más desprotegidos y pobres de México.
Ubicó a las mexicanas como ejemplo de la paradoja de una "exaltación teórica y una depreciación práctica o discriminatoria" en el núcleo familiar, en las comunidades eclesiales, en la asistencia social y en otros campos de la vida ciudadana. "Sigue siendo un desafío de nuestro tiempo cambiar de mentalidad para que sean tratadas con plena dignidad en todos los ambientes y se proteja también su insustituible misión de ser madres y primeras educadoras de sus hijos."
Alma E. Muñoz