Reprueban varias ONG la represión a indocumentados

Continuará el despliegue militar en Ceuta y Melilla, advierte España

AFP

Madrid, 30 de septiembre. El despliegue militar en los enclaves españoles de Ceuta y Melilla para proteger la frontera que los separa de Marruecos continuará mientras "persista la situación", afirmó el viernes el número dos del Ministerio de Asuntos Exteriores español, Bernardino León.

A raíz de los asaltos masivos de inmigrantes sin papeles africanos en las vallas fronterizas que separan al territorio marroquí de Ceuta y Melilla, en los últimos días, en los que murieron el jueves cinco de ellos, el gobierno español ordenó el despliegue de militares en la zona.

Cuatro compañías de 120 hombres cada una, que ya tienen base en Ceuta y Melilla, serán desplegadas en la frontera para reforzar la vigilancia que del lado español lleva adelante la Guardia Civil.

Cinco africanos, que la madrugada del jueves participaron en un tropel para pasar de territorio marroquí al español, murieron en circunstancias que están siendo investigadas por ambos gobiernos.

Las autopsias practicadas el jueves a los dos inmigrantes que murieron en el lado español -otros tres fallecieron en el marroquí- presentaban impactos de bala que no utilizan las fuerzas de seguridad españolas.

Los soldados comenzaron el jueves a recorrer el perímetro fronterizo a pie y entre dos de las vallas que separan la frontera en parejas, en especial "en los puntos sensibles" de la frontera con propósitos "disuasivos", según la misma fuente.

Del lado marroquí, el primer ministro Driss Jettu anunció el jueves el despliegue de mil efectivos de seguridad más en la frontera con Ceuta y 600 en la frontera con Melilla, "desde la semana pasada".

Asimismo, las autoridades españolas reanudaron este viernes los trabajos para elevar la doble valla metálica que separa a Marruecos de Ceuta, adelantándose unas semanas a la fecha prevista para ello, informó la delegación del gobierno en Ceuta.

El enclave español de Ceuta está separado de Marruecos por una doble valla metálica de 8.5 kilómetros, cuya altura ya ha sido elevada de tres a seis metros a lo largo de seis kilómetros.

Los últimos trabajos iniciados hoy afectan al tramo restante de 2.5 kilómetros, donde tuvo lugar el asalto de los inmigrantes la madrugada del jueves. En Melilla se llevan a cabo obras similares en la valla divisoria en ese enclave español.

Diego Lorente, portavoz de SOS Racismo, dijo que entre los cinco muertos hay "un bebé de Costa de Marfil que quedó del lado marroquí", y criticó el "plan de seguridad" español: "Nos parece una barbaridad que se use al ejército para enfrentar a personas que tratan de salvar su vida de conflictos políticos o falta de expectativas".

Según la Comisión Española de Ayuda al Refugiado, "el aumento de las medidas policiales pueden incrementar el drama de muertes y lesiones en personas que, en su mayoría, son víctimas".

Un informe publicado por la sección española de Médicos sin Fronteras (MSF) denunció el aumento de acciones violentas contra inmigrantes clandestinos subsaharianos en el norte de Marruecos, junto a la frontera con Ceuta y Melilla.

Mil 400 personas han muerto en costas españolas y marroquíes en los últimos 10 años, pero MSF cita a la asociación antirracista United for Intercultural Action, que eleva la cifra a 6 mil 300 personas.