Nueva industria en México que China busca liderar
Empresarios chinos invertirán 12 mdd en fábrica de etanol
Considerado por muchos uno de los combustibles alternativos que podrían sustituir a la gasolina, un grupo de empresarios chinos planea invertir 12 millones de dólares en una fábrica de etanol en México.
El etanol es el biocarburante que más se produce en el mundo, con 18.3 millones de toneladas en 2003 y más de 30 millones el año pasado, producidas de forma casi exclusiva por Brasil y Estados Unidos, países que buscan reducir su dependencia de los carburantes fósiles.
El representante en México de los empresarios chinos, Oscar Zhu, destaca que esta industria comienza en el país, por lo que buscan tomar el primer lugar en un producto que tiene amplias posibilidades de crecimiento.
La fábrica, cuyo 30 por ciento de las acciones estará en manos de inversionistas mexicanos, se comenzará a construir en una primera etapa en noviembre en Acapulco, Guerrero, y requerirá ''sólo de técnicos de 2 mil a 3 mil''.
El grupo, que ya cuenta con 800 fábricas en China, tres en Estados Unidos y dos en Brasil, no descarta más inversiones en este sector, y ''si camina bien la primera fábrica, habrá más inversiones''.
Zhu afirma que la inseguridad es un aspecto que tiene preocupados a los inversionistas chinos, por lo que han buscado también asociarse con mexicanos.
Además, asevera, para un mexicano la ley es segura, mientras para los extranjeros existen limitaciones como el idioma, las regulaciones y la normatividad, por lo que requieren asociarse.
El empresario asegura que hasta el momento ''no hay ningún país que tenga una fábrica de etanol que pueda competir con nosotros'', y será una energía necesaria para el mundo en un futuro próximo.
Afirma que en la actualidad, cuando el precio de la gasolina sube todos los días, el etanol va a tomar el lugar de este combustible; incluso China ya consume 10 por ciento de etanol.
Expertos en el tema han dicho que el uso de etanol en la mezcla con gasolina como combustible de vehículos de transporte ha impactado en la reducción de emisiones de monóxido de carbono, como consecuencia de una mejor oxigenación de la gasolina. Así, han estimado una reducción de entre 25 y 30 por ciento respecto a las gasolinas usadas en el país.
Incluso el etanol, que se produce con base en caña de azúcar, tiene historia en Brasil, pues hace tres años la compañía Volkswagen de ese país introdujo modelos capaces de usar cualquiera de los dos combustibles.
También en Estados Unidos ya se fabrican estos modelos y se venden convertidores con los cuales cualquier coche puede usar gasolina que lleve hasta 10 por ciento de etanol.