Quieren echar por tierra la integración de AL, señala
Condena Hugo Chávez las acusaciones de corrupción contra el gobierno de Lula
Caracas, 2 de octubre. El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, afirmó hoy que las acusaciones de corrupción de las "élites" contra su par brasileño, Luiz Inacio Lula da Silva, son una estrategia para "echar por el suelo" el proceso de integración en América Latina.
Chávez aseguró que "están atacando despiadadamente (a Lula) para tratar de arrinconarlo y además para tratar de echar por el suelo el proceso de integración de Latinoamérica; por eso mis posiciones (fueron) tan firmes en la Cumbre de Sudamérica", celebrada hace dos días en Brasilia.
En su programa radiotelevisado Aló, presidente, el gobernante venezolano señaló que las "élites" brasileñas buscan "golpear a Lula" para "luego imponer mecanismos de integración basados en el capitalismo, (que) no funcionan, para más adelante decirnos que no fue posible la integración, que tratamos pero no pudimos".
Chávez defendió la integridad moral de Lula, a quien calificó de "líder" de una gran fortaleza. "Lula es un hombre humilde, de gran nobleza. Fue limpiabotas, vendió periódicos, perdió unos dedos porque era tornero", agregó.
En agosto, Lula ofreció disculpas públicas por el escándalo de corrupción que involucra a dirigentes del gobernante Partido de los Trabajadores (PT), y que -según analistas- pone en duda la relección del mandatario en 2006.
El presidente venezolano aseguró que la "competencia" que, a su juicio, emprenden las trasnacionales privadas para abarcar mercados en la región, también atentan contra la integración latinoamericana.
"Mientras los gobiernos queremos integración, las trasnacionales se pelean y la hacen imposible", manifestó.
Chávez hizo un resumen de su participación en la cumbre, y recordó que algunos pretendieron decir que había diferencias entre Lula y él.
El mandatario venezolano explicó que cuestionó la propuesta para dar forma institucional a la Comunidad Sudamericana, lo que dio paso a un debate que se decidirá en consultas en los siguientes tres meses.
Por otro lado, Chávez denunció una campaña mediática de sus adversarios contra su cruzada anti-latifundismo. El mandatario señaló que la prensa nacional e internacional "desfiguran" su llamada "guerra al latifundio" que contempla intervenciones de grandes fincas, las cuales según el gobierno presentan irregularidades en sus títulos de propiedad y son improductivas.
"En vez de decir que estamos luchando contra el latifundismo, dicen que estamos atacando la propiedad privada. Pero estamos curados contra esas manipulaciones y seguiremos dando la batalla", dijo.
Chávez también calificó de "ridículas" las versiones opositoras que acusan a su administración de impulsar una política de confiscación mediante las intervenciones ejecutadas en las últimas semanas, que también han alcanzado a varias empresas. Aseguró que su gobierno no está en favor de las expropiaciones: "planteamos la revisión de la propiedad privada con apego a las leyes venezolanas, partiendo que la Constitución plantea el respeto a ese derecho".
El presidente, que llamó también a la movilización de campesinos en favor de las políticas de su gobierno, abordó de esta manera el tema que expuso la semana pasada en Aló Presidente. En esa ocasión tuvo como invitado al coordinador del Movimiento de los Sin Tierra (MST) de Brasil, Joao Pedro Stédile, quien instó a los campesinos venezolanos a ocupar fincas sin esperar a que lo haga el gobierno.
El MST reclama la entrega de tierras a 400 mil familias de campesinos brasileños antes que termine 2006. Lula prometió en mayo de este año acelerar el programa de reforma agraria de su gobierno, pero ante el incumplimiento de la promesa, el MST emprendió el lunes pasado la ocupación de haciendas y oficinas públicas, en una gigantesca ofensiva llamada septiembre rojo.
En Brasil, en tanto, el ex secretario general del PT, Silvio Pereira, admitió que los 21 miembros de la dirección ejecutiva del partido (incluido su ex presidente, José Genoino) sabían del manejo de recursos ilegales en sus campañas electorales.
"Nadie es tan hipócrita como para alegar que no sabía sobre la existencia de una 'caja dos'", dijo Pereira en una entrevista publicada por el diario Folha de Sao Paulo de hoy.
Pereira renunció a su cargo de secretario general del PT luego de comprobarse que recibió una camioneta Land Rover de lujo como regalo de una compañía que mantenía contratos con empresas estatales.