CIUDAD PERDIDA
Crisis por la inacción en el Tribunal Electoral del DF
Reformas urgentes
Ofensiva panista en su seno
LA REVISION de los órganos electorales del Distrito Federal deberá ser una tarea urgente para la Asamblea Legislativa de esta ciudad, por medio de los cambios necesarios al Código Electoral.
Y DE todas esas urgencias, la que corresponde al Tribunal Electoral vale la pena ejecutarla antes de que le pese a todos, porque una institución de la importancia del tribunal no puede convertirse en el instrumento de un partido o de un grupo.
DECIAMOS EN una entrega anterior que el TEDF no ha realizado, en lo que va del año, ni una sola investigación, ni una sola publicación en materia electoral, ni ha tenido cursos o actividades de capacitación.
PODRIA DECIRSE, sin mayor problema, que el organismo ha caído en una crisis en la que, por ejemplo, en el campo jurisdiccional los tribunales colegiados de circuito le han revocado 60 por ciento de sus resoluciones en materia laboral.
VALE LA pena destacar un asunto. Por ahí de la mitad del año, la secretaria administrativa de la institución, Adriana Rodríguez Servín, le ganó, después de un pleito legal de más de dos años, una demanda que obligó a su reinstalación y al pago de salarios caídos por el periodo que duró el litigio.
PERO NO es todo, como ya habíamos establecido, un hombre de filiación panista ha tratado de aprovechar la debilidad del magistrado presidente, Hermilo Herrejón, y ha cerrado la pinza con otro hombre cercano al PAN, el magistrado Rodolfo Terrazas. Se trata de Estuardo Mario Bermúdez Molina.
BERMUDEZ ESTUVO fuera del TEDF durante dos años. La razón es que pidió licencia como magistrado para incorporarse a la administración foxista como fiscal especializado para la Atención de Delitos en Contra de la Salud (FEAS).
DICEN QUIENES lo conocen que del FEAS fue orillado a renunciar, que su salida no fue nada agradable para un funcionario de ese nivel, pero lo cierto es que regresó al tribunal como si su paso por la dependencia federal hubiera sido un ejemplo a seguir.
DESDE SU regreso han sucedido ciertos conflictos en el tribunal que, según se dice, son producto de las ambiciones del magistrado. El más sonado de ellos es, sin duda, aquel pasaje en el que varios trabajadores del organismo fueron despedidos.
EL MOTIVO de esos despidos aun no queda muy claro para la gente, lo cierto es que los magistrados recibieron, al mismo tiempo, esplendorosos automóviles último modelo.
LAS PALABRAS del magistrado pintan su perfil y dan una idea del respeto por el trabajo y la dignidad de la persona. Estuardo Bermúdez sentenció: "a los automóviles no se les pagan aguinaldos ni prestaciones laborales".
TAMBIEN SE le culpa, aunque nadie da pruebas, de la compra de un nuevo edificio para el TEDF, cuyo costo fue mayor a los 100 millones de pesos y que, según los trabajadores, que no importan para Bermúdez, resulta excesivo para las necesidades del organismo.
PERO LAS cosas no quedan ahí, el magistrado en cuestión pretende imponer en el manejo de las finanzas del órgano colegiado a uno de sus más cercanos colaboradores durante su paso por la administración foxista. Se trata de José Jacinto Vélez, quien, casualmente, hoy es administrador del Consejo del Información Pública del DF, donde una de sus integrantes es nada más ni menos que la consejera Odette Rivas, esposa del magistrado Rodolfo Terrazas.
COMO PUEDE observarse, la ofensiva de estos panistas y filopanistas pone en entredicho la autonomía y la libertad del organismo. Por eso es necesaria la revisión del órgano antes de que todos tengan que lamentar lo que allí pase. Así que ¡cuidado, mucho cuidado!